La adición de los jóvenes a internet y las redes sociales

TEORÍA DE LA COMUNICACIÓN

Lluís Gimeno Panadés

2º Periodismo

Curso 22-23

LA ADICIÓN DE LOS JÓVENES A INTERNET Y LAS REDES SOCIALES

Introducción:

La adicción a Internet es un problema actual que afecta principalmente a la población de estudiantes universitarios. Además, España es uno de los países europeos con mayores índices de uso problemático de Internet. En España, los datos del estudio Adicciones Comportamentales (ESTUDES, 2019) revelan que el 99,8% de los estudiantes de entre 14 y 18 años ha utilizado Internet en los últimos 12 meses, junto al 2,9% que realiza un posible uso compulsivo de la red, siendo la prevalencia de este problema siete veces mayor entre los más jóvenes (21%). Estos datos dejan en evidencia la adicción que sufre la población joven con el uso desmesurado de internet, pero, ¿Cómo afecta esta adicción a las últimas generaciones?  

Internet es una herramienta muy útil para la sociedad actual que contiene infinidad de ayudas para el día a día. Sin embargo, el mal uso de la web puede originar daños y mal estar en los usuarios de la misma, sobre todo en la gente joven, que al fin y al cabo representan al grupo de la sociedad que tiene la conciencia más frágil y más importancia le dan a la opinión externa sobre si mismos.

El análisis de este comportamiento en estudiantes universitarios merece especial atención, ya que junto con la pubertad muestran una mayor susceptibilidad frente a este comportamiento, debido a que tienen varios factores de riesgo que les hacen desarrollar este trastorno de conducta, por ejemplo, pueden ser: La conexión a Internet es frecuente y los teléfonos móviles, más familiarizados con las TIC y más proclives a buscar nuevas sensaciones, les hacen más receptivos a estas nuevas formas de relación.

Adicción a la aprobación:

Manteniéndonos en la línea argumental, las personas más jóvenes son las que (por lo general) buscan una mayor aceptación de la sociedad y le dan mucha importancia a la imagen que dan de ellos mismos hacia al exterior, esto lleva a un uso constante de las redes sociales y una comparación e idealización de lo que ven a través de la pantalla. Esto puede llevar a frustraciones, mal estar con uno mismo y trastornos de muchos tipos a raíz de estos aspectos.

Por ejemplo, uno de los más frecuentes es el trastorno alimentario. Gracias a los estudios que han surgido en los últimos años conocemos el tema en más detalladamente.

Desde el momento en que la legislación europea prohibió esas manifestaciones virtuales, la exaltación de los desórdenes de la alimentación se disfraza de diario íntimo y se asoma a internet en forma de blog personal en el cual millones de personas -mayoritariamente adolescentes o incluso niños- pugnan por perder kilos en un tiempo récord, hablan de autolesiones que les permitan eliminar grasa y, en definitiva, defienden los Trastornos del Comportamiento Alimentario como una forma de vida (Morales M. J., 2010).

En Internet encontramos muchos tipos de adicciones, según López, A. L. (2004), podemos considerar que hablamos de una adicción cuando encontramos un comportamiento que cumpla estos seis requisitos:

1. Saliencia: Una actividad particular se convierte en la más importante en la vida del

individuo y domina sus pensamientos, sentimientos y conducta.

2. Modificación del humor: Experiencias subjetivas que la gente experimenta como

consecuencia de implicarse en la actividad.

3. Tolerancia: Proceso por el cual se requiere incrementar la cantidad de una actividad

particular para lograr los mismos efectos.

4. Síndrome de abstinencia: Estados emocionales desagradables y/o efectos físicos que

ocurren cuando una actividad particular es interrumpida o repentinamente reducida.

5. Conflicto: Se refiere a los conflictos que se desarrollan entre el adicto y aquellos que le

rodean (conflicto interpersonal), conflictos con otras actividades (trabajo, vida social,

intereses, aficiones), o dentro de los propios individuos que están involucrados con la

actividad particular.

6. Recaída: Es la tendencia a volver a los patrones tempranos de la actividad en la forma más extrema de la adicción tras muchos años de abstinencia o control.

La vulnerabilidad psicológica hacia la adicción a Internet se puede expresar en los siguientes factores de riesgo:

a) DÉFECTOS DE PERSONALIDAD: Introversión acusada, baja autoestima y nivel alto de

búsqueda de sensaciones.

b) DÉFECTOS EN LAS RELACIONES INTERPERSONALES: timidez y fobia social.

c) DÉFECTOS COGNITIVOS: fantasía descontrolada, atención dispersa y tendencia a la

distraibilidad.

 d) ALTERACIONES PSICOPATOLÓGICAS: Adicciones químicas o psicológicas presentes o pasadas. Depresión. (López A. L., 2009)

La adicción a Internet puede considerarse una adicción psicológica específica
(por ejemplo, adicción al sexo, compras, trabajo, videojuegos, televisión, etc.), y
Características comunes de otras adicciones: pérdida de control, síndrome de abstinencia, dependencia psicológica intensa, interrupción de la vida diaria y pérdida de interés en otras actividades.

Analizar este tipo de comportamiento en estudiantes merece especial atención, ya que, junto a la adolescencia, son los que presentan una mayor sensibilidad a tener dichas conductas, ya que poseen varios condicionantes de riesgo que los abocan a presentar este trastorno de la conducta, como pueden ser: conectarse con frecuencia a internet y la telefonía móvil, estar más familiarizados con las TIC y tender a buscar nuevas sensaciones, lo que hace que sean más receptivos a estas nuevas formas de relación. (Romero-Rodríguez, J. M., Martínez-Heredia, N., Campos, M. N., & Ramos, M, 2021)

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