Manejo de las emociones negativas
Fabián RodríguezMonografía6 de Junio de 2023
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COLEGIO ADVENTISTA “EL PORVENIR”
MONOGRAFÍA:
MANEJO DE LAS EMOCIONES NEGATIVAS
ÁREA:
COMUNICACIÓN
PRESENTADO POR:
JULIO FABIÁN RODRÍGUEZ BAZÁN
YARED HURTADO SOLEDAD
PROFESOR DEL ÁREA:
ERWIN SANCHEZ CANARIO
Chepén, Junio de 2022
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Esta monografía está dedicada a Dios por habernos dado la sabiduría, vida y salud, y a nuestras madres por habernos apoyado y motivarnos a realizar este trabajo.
Índice
1. INTRODUCCION 4
2. LAS EMOCIONES 5
2.1. Concepto de emoción 5
2.2. Clasificación de las emociones 5
2.2.1. Emociones positivas 6
2.2.2. Emociones negativas 6
3. CONSECUENCIAS DE LAS EMOCIONES NEGATIVAS 6
3.1. MIEDO 7
3.2. TRISTEZA 7
3.3. IRA 7
3.4. ASCO 7
4. TÉCNICAS DE MANEJO DE LAS EMOCIONES NEGATIVAS 8
4.1. Como controlar las emociones 8
4.1.1. Respiración Profunda 8
4.1.2. Relajación progresiva 8
4.1.3. Entrenamiento Asertivo 9
4.1.4. Mindfulness 10
5. CONCLUSIONES 11
6. BIBILOGRAFIA 12
6.1. WEBGRAFÍA 13
7. ANEXOS 14
- INTRODUCCION
El presente trabajo se centra en conocer el concepto de una emoción, sus tipos y sus técnicas de manejo. Gracias a las emociones se produce una activación que nos proporciona la energía necesaria para responder, rápidamente, a un estímulo que atente a nuestro bienestar físico o psicológico, permitiendo así, nuestra supervivencia. Sin embargo, en los últimos años, se ha descubierto que las emociones pueden ser, también, perjudiciales para la salud, influyendo en la contracción de ciertas enfermedades, perdiendo, en este sentido, su valor adaptativo.
- LAS EMOCIONES
- Concepto de emoción
Etimológicamente, el término emoción viene del latín emotio, que significa “movimiento o impulso”, “aquello que se mueve”. La emoción nos aleja o acerca a personas, situaciones o circunstancias. Todas las emociones son impulsos a la acción que nos inclinan hacia un comportamiento determinado.
El Diccionario de la Real Academia Española (RAE) (2018), define el término emoción como una “alteración del ánimo intensa y pasajera, agradable o penosa, que va acompañada de cierta conmoción somática”
Para Mora (2012, p. 14), la emoción es ese motor que todos llevamos dentro. Una energía codificada en ciertos circuitos neuronales localizados en zonas profundas de nuestro cerebro que nos mueve y nos empuja a vivir, a querer estar vivos en interacción constante con nosotros mismos y con el mundo.
Por otro lado, hay que destacar que desde el momento que nacemos las emociones están presentes en nuestro organismo. Por ello, hay que aprender a controlarlas.
Las emociones básicas, según Piqueras, Ramos, Martínez y Oblitas (2009, p.87), constituyen de patrones personales “de conducta expresiva, cada una asociada a un patrón específico de activación fisiológica, a una experiencia cognitiva-subjetiva y con un substrato neuroanatómico específico”.
Hay que señalar que las emociones son importantes en nuestras vidas y poder gestionarlas adecuadamente es una habilidad fundamental para conseguir el bienestar.
- Clasificación de las emociones
Los diferentes tipos de clasificaciones sobre las emociones pueden variar dependiendo de cada autor.
Cuando se da un listado de emociones a personas diversas para que las clasifiquen, la mayoría hacen dos categorías: negativas y positivas. En esto coinciden la mayoría de autores, que consideran que las emociones están en un eje que va del displacer al placer. Esto supone asignar una valencia a las emociones negativas y positivas. Por tanto, se puede diferenciar entre emociones negativas y positivas (Bisquerra, 2009, p. 73).
- Emociones positivas
Las emociones positivas son aquella que produce una experiencia emocional agradable. Por ejemplo la alegría, el amor, el orgullo, la satisfacción, la gratitud, la ternura, el interés, etc. Este tipo de emociones formar parte de nuestro bienestar, favorecen el manejo del estrés, facilitan el rendimiento y mejoran las relaciones sociales y la salud. Si nunca experimentamos emociones positivas, nunca estaremos alegres, contentos o satisfechos, nunca nos divertiremos, y no tendremos bienestar psicológico.
Una de las principales ventajas del cultivo de las emociones positivas radica en que ejercen una gran influencia sobre el procesamiento intelectual, el razonamiento, la resolución de problemas y las habilidades sociales (Barragán y Morales, 2014, p. 112).
- Emociones negativas
Las emociones negativas son aquellas que producen malestar psicológico o desagrado. Por ejemplo el miedo, la ira, la tristeza, la ansiedad, la envidia, los celos, el asco, la vergüenza, la culpa, etc. El malestar que provocan estas emociones va acompañado de una activación fisiológica, es decir, una manera de reaccionar de nuestro cuerpo, que suele ser desagradable y también una conducta eficaz que por ejemplo nos ayude a evitar una amenaza, a expresar enérgicamente una queja cuando detectamos un abuso o a mostrar nuestra tristeza por una pérdida importante.
El miedo y la ansiedad son las emociones que han generado mayor cantidad de investigaciones y sobre las que se han desarrollado un arsenal de técnicas de intervención mayor desde todas las orientaciones teóricas psicológicas (Piqueras, Ramos, Martínez y Oblitas, 2009, p. 90).
- CONSECUENCIAS DE LAS EMOCIONES NEGATIVAS
El miedo, la tristeza, la ira y el asco son emociones que, cuando son intenso y habituales, afectan negativamente la calidad de vida de las personas, es decir, las emociones negativas constituyen actualmente uno de los principales factores de riesgo para contraer enfermedades físicas y mentales. A continuación, describiremos algunos conceptos sobre estas.
- MIEDO
Según Piqueras, et al (2009) “el miedo-ansiedad se define como una respuesta del organismo que se desencadena ante una situación de amenaza o peligro físico o psíquico” (p.90). En otras palabras, el miedo es una emoción que nace a partir de un escenario de vulnerabilidad, donde corremos riesgo de ser atacados física o psicológicamente.
- TRISTEZA
La tristeza es una emoción que, constituye en un modo de comunicación en ambientes de pérdida o apartamiento. Según Piqueras, et al (2009, p. 92) “La tristeza se la ha considerado como una de las emociones desagradables, aunque no siempre se puede decir que es negativa. Sobre ella existe gran variabilidad cultural, e incluso algunas culturas no poseen palabras para definirla.”
- IRA
La ira es calificada como una emoción negativa por la mayoría de los hipotéticos de la emoción. “Esta emoción puede ser concebida teniendo en cuenta a tres tipos de definiciones de la valencia emocional, es decir, se puede entender como positiva o negativa en base a: 1) las situaciones que rememoran la emoción, 2) las consecuencias adaptivas de la emoción o 3) la práctica subjetiva de la emoción. Así, en primer lugar, la ira puede conocerse como negativa debido a las situaciones que rememoran la emoción, ya que suele ser rememorada por sucesos aversivos. En segundo lugar, la ira se puede calificar como positiva o negativa cuando es entendida desde el punto de vista de sus consecuencias adaptivas, dependiendo del resultado de un escenario particular. En último lugar, la ira se podría ver como positiva o negativa en función de la sensación subjetiva o valoración de la emoción, dependiendo de si un sujeto siente placer/gusto o displacer/aversión tras la experiencia subjetiva de ira” (Piqueras, et al, 2009, p. 92).
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