Metodos Activos

De los métodos activos y hacia el trabajo colaborativo

(Primera aproximación comprensiva)

Las ciencias de la educación promueven la idea de formar estudiantes que sean capaces de aproximarse al conocimiento a partir de experiencias que le sean significativas, estudiantes que puedan transferir sus saberes a situaciones nuevas, que tenga iniciativa para actuar no sólo en la gestión de sus aprendizajes, sino en su entorno social. Hay más preocupación por entender cómo pensamos y cómo aprendemos, ya que, si logramos encontrar las respuestas a estas preguntas, podremos desenmarañar y anticiparnos a los posibles obstáculos de la educación. Lo que se rentabiliza en la actualidad es formar personas que sean competentes en todas las facetas de su vida, que posean la inteligencia emocional y social para saber interactuar efectivamente. Para las sociedades de la información y el conocimiento, la educación es eje central para desarrollar sociedades sustentables que promuevan la equidad, la paz, la diversidad cultural, los derechos humanos, la calidad de vida de todos los ciudadanos, el progreso. Bajo esta perspectiva ha sido necesario cambiar la concepción que se tenía hasta hace años de la enseñanza y el aprendizaje.

El reto del docente es crear los ambientes propicios para que se lleven a cabo el desarrollo del nuevo perfil del profesional. Su labor no se debe basar sólo en transmitir información acabada. John Santrock , en su libro “Psicología de la educación” , afirma que una enseñanza efectiva requiere de los siguientes elementos: “los maestros necesitan dominar una variedad de perspectivas y estrategias, y ser flexibles en su aplicación. Esto requiere de dos ingredientes críticos: (1) conocimientos y habilidades profesionales y (2) compromiso y motivación” (p. 8). Es sobre estos supuestos donde se sustenta el innovador planteamiento de los métodos activos.

Los métodos activos se caracterizan por ser procesos que busca generar un aprendizaje significativo, con esto se pretende desarrollar las capacidades del pensamiento crítico y creativo en el alumno. Benito Águeda (2005) explica que en estas didácticas, el alumno es el que asume el reto del aprendizaje. Se focaliza al educando con el fin de que adquiera su propio aprendizaje con autonomía y responsabilidad, lo cual se logra diseñando las clases de tal modo que se involucre a los estudiantes en su propio proceso de aprendizaje, promoviendo en ellos un proceso personal de construcción de las propias estructuras de pensamiento por asimilación o acomodación de los nuevos conocimientos a las estructuras de pensamiento previas.

Lo que se busca con la metodología activa es fomentar en el alumno una mayor capacidad para responsabilizarse de sus tareas y trabajar en grupo de manera colaborativa y organizada, generar una mayor motivación intrínseca y una disposición para la resolución de problemas, desarrollando en él la confianza, la autonomía y la experiencia directa para potencializar la representación activa del conocimiento, poniendo en primer plano los procesos de aprendizaje y en segundo lugar las acciones de enseñanza. Aunado con lo anterior los métodos activos ven las distintas edades como una fase del proceso del desarrollo humano, conciben al alumno como un ser funcionalmente idéntico al adulto, pero radicalmente diferente en lo que se refiere a su mentalidad (Águeda, 2005)

En cuanto al profesor, este funge como un facilitador en el proceso de aprendizaje, es un mediador entre la diversidad, un orientador comprometido con los procesos de formación integral del alumnado. El maestro ofrece ciertas pautas, contextos, actividades para que el alumno construya su aprendizaje. Se pretende que el maestro comparta la autoridad y ayude a tomar decisiones, oriente y se preocupe por la buscar la evolución favorable del grupo. Debe enseñar a los alumnos a canalizar sus emociones y crear un clima de confianza para que el aprendizaje en grupos sea positivo.

Otras características de estos métodos activos son el respeto a la actividad espontánea y los intereses de los estudiantes, teniendo en cuenta las diferencias de cada alumno, el respeto de las características, ritmos y estilos de aprendizaje de los estudiantes, el aprendizaje a partir del juego y la utilización de la potencialidad de representación activa del conocimiento. La representación activa y audiovisual del conocimiento se da a través de la interpretación de mapas conceptuales, diagramas y gráficos, actividades interactivas, presentaciones en computadoras.

Existen distintos métodos activos de enseñanza, como el de descubrimiento, de socialización y el aprendizaje colaborativo, entre otros. El método de descubrimiento pretende que el alumno se convierta en agente de su propia formación, a través de la investigación personal, el contacto con la realidad y las experiencias del grupo de trabajo, propiciando en él una mentalidad cooperativa. Para ello el docente no debe dar los conocimientos elaborados sino orientar a que los alumnos descubran progresivamente a través de experimentos, investigación o ensayos que los lleven al discernimiento y a la reflexión. Entre la variedad de técnicas del método de descubrimiento se encuentran la resolución de problemas, estudio de caso, proyecto, investigaciones sociales y de laboratorio. El método socializado es donde el maestro y el alumno forman parte de grupos de aprendizaje donde se promueve una participación cooperativa, trabajo mancomunado, comunicación directa, ayuda mutua y hay toma de decisiones grupales. Entre sus principales procedimientos están las mesas redondas, panel, foro, seminario, simposio, asamblea y entrevistas. Algunos autores también incluyen el diálogo, la dramatización,

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