Mitos cosmogónicos

“Los Huicholes y el maíz”

Se cuenta que hace tiempo, los Huicholes estaban tan cansados y aburridos de comer siempre lo mismo y aún cosas que a ellos no les agradaba; ellos querían comer algo que pudieran comer a diario pero de distintas maneras. Un día un joven huichol, oyó hablar sobre un cereal llamado maíz, al escuchar que con este se podían hacer una gran variedad de alimentos, entre ellos, tortillas, chilaquiles, sopa de tortilla; etc., se maravillo de este alimento y decidió ir en busca de el, pero hubo un problema, ya que este cereal se encontraba hasta el otro lado de la montaña, pero eso no fue motivo para detenerse en su búsqueda, el siguió el trayecto de las hormigas, que eran las que sabían e iban a donde se encontraba el maíz, ellas resguardaban a este cereal y fue así que camino por largos trayectos, que tuvo que acampar por un día. Sin darse cuenta se quedó completamente dormido, y al día siguiente se percató que toda su vestimenta la habían devorado aquellas hormigas. Hambriento y con frío el joven huichol, tomo su arco y su flecha con la intención de dispararle a una ave que se encontraba en un árbol cercano, pero esta le dijo que no lo hiciera, ya que ella era la madre del maíz y que si el deseaba ella podía conducirlo y darle todo el maíz que el quisiera; el muy agradecido la siguió y fue así que llegaron a la casa del maíz donde se encontraban cinco bellas mujeres, que eran las hijas del maíz, cada una era de color distinto; la mazorca blanca, azul, amarilla, roja y negra. El huichol encantado de la mazorca azul por su belleza y dulzura, le pidió que se casará que con el y así fue, desde ese entonces en la casa donde ellos vivían nunca falto el maíz de todos los colores, además que la esposa del joven huichol, es decir, la mazorca azul; les enseño a todos los habitantes huicholes a cosechar su propio maíz, los cuidados que este cereal debía tener y muchas cosas más, los ancianos cuentan que después de haberles enseñado todo aquella doncella azul; ella misma se molió, y así fue como se creo por medio de sus restos el agradable y rico atole.

“La creación del mundo” (Mito Huasteco)

Existían unos viejos tan sabios de nombre teenek, que contaban que no existía nada, ni cielo ni tierra, ni animales, ni plantas, ni vida alguna; tan solo existía un mar profundo e inmenso con una gran oscuridad. Fue así que un día los dioses decidieron crear el universo, el cual se dividio en tres planos, el primer plano o plano superior, se encuentra en el cielo, sostenido por un gran pilar llamado T¨´ithach, lugar que solo podrían ocupar los grandes dioses, donde el clima era caliente.

El segundo plano, lo llamaron Tierra-Tsabaal, lugar en donde crearon la vida de los seres humanos y en donde estos morarían. La tierra, la sujetaron por cuatro hombres situados sobre los cuatro puntos cardinales, se dice que estos cuatro hombres murieron ahogados y son muy frágiles, por lo que cada año se rompen y se van hacia el oriente, donde vive Muxi, el Abuelo Trueno, que es el dios omnipotente de la lluvia. Tsabaal que es la tierra, es muy bella, es verde, llena de alegría, de frutos, de animales, siempre fresca; cuida de que nunca falte el agua y el viento, que igualmente también le pertenecen, ella siempre esta acompañada por el movimiento, ya que los dioses quisieron que siempre se moviese en el tiempo.

Por último el plano inferior, esta constituido por el inframundo, que es la naturaleza fría y habitada por los muertos. En sí, el universo alberga nueve planetas femeninos, cada planeta posee un compañero que es el movimiento, que es de sexo masculino, cada uno de estos planetas se mueven de acuerdo a los acontecimientos que suceden en la tierra, se encuentran regidos por las guerras, el conocimiento, las pestes, el clima sobre todo…la patrona de los planetas es una gran estrella con el nombre de Puulik Oot,

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