Mitos cosmogónicos

Introducción

Los mitos son clave importante en el desarrollo de las culturas, pues si bien, estos buscan dar una explicación a lo que no puede ser meramente entendido, llevando a dar un sentido al origen de una cultura.

En los siguientes párrafos se tratara de exponer al mito y a como este se encuentra estrechamente relacionado con el rito, al igual que los elementos que lo componen.Todo ello ilustrado con un ejemplodentro de la mitología náhuatl.

Los autores que se abordaran serán, el estructuralista francés Levi-Strauss, el funcionalista igualmente francés,Mauss desde la perspectiva de Matos Moctezuma, y al mismo Matos.

El mito

La Real Academia de la Lengua Española determina que el mito es la narración maravillosa situada fuera del tiempo histórico y protagonizada por personajes de carácter divino o heroico. Con frecuencia interpreta el origen del mundo o grandes acontecimientos de la humanidad.

Los mitos nacen como narraciones que buscan dar respuesta a aquellas interrogantes que no pueden ser explicadas.

Para Lévi-Strauss hay una estrecha relación entre la lengua y el mito, ya que este último se encuentra en el lenguaje y más allá del lenguaje. Esto puesto a que el mito se define por un sistema temporal que combina las propiedades de la lengua con el habla.

Para él, los mitos suelen ser arbitrarios, ya que dan elementos contradictorios, pero también hay una lógica en el desarrollo de sus acontecimientos. Y a pesar de sus arbitrariedades aparentes, se dan grandes similitudes en ellos en las diferentes partes del mundo.

Un claro ejemplo es claro cuando analizamos que en la mayoría de los mitos se puede encontrar que los embarazos son dados a partir de un “milagro”, como la Virgen María y la diosa azteca de la vida y la muerte, La Cuatlicue. Donde la primera queda embarazada gracias al Espíritu Santo, mientras que la segunda lo hace a partir del obsequio dado por un quetzal.

Con ello, Strauss llega a tres conclusiones, como primer punto reconoce que los mitos tienen un sentido, los cuales no pueden depender de elementos aislados, dichos elementos son los geográficos, económicos, sociológicos y cosmológicos, donde “Cada uno de estos niveles, y el simbolismo que le es propio, aparece como transformación de una estructura lógica subyacente y común a todos los niveles” (Strauss, 1979; 142).

Su segunda conclusión recae en que el mito pertenece a un orden del lenguaje, en el que forma parte de manera integral, ya que es así como se pueden manifestar las propiedades específicas.

Y la última complementa la segunda conclusión, pues dichas propiedades específicas solo puede ser buscada por encima de un nivel habitual de la expresión lingüística.

A continuación, se expone un fragmento de la mitología náhuatl sobre la creación del cielo y la tierra.

“El tiempo más antiguo”

Dos dioses Quetzalcóatl y Tezcatlipoca, bajaron la diosa de la tierra del cielo. Ella tenía las articulaciones completamente llenas de ojos y bocas, con las cuales ella mordía como una bestia salvaje. Antes de que la bajaran ya había agua, de la cual nadie sabe quién la creo, sobre la cual esta diosa caminaba. Viendo esto los dioses dijeron el uno al otro: “es necesario hacer la tierra”, y diciendo esto se convirtieron ambos dos en grandes serpientes las cuales agarraron a la diosa la una en la mano derecha y en el pie izquierdo, la otra en la mano izquierda y el pie derecho, y la jalaron tanto que la hicieron romperse por la mitad. De la mitad detrás hicieron los hombros hicieron la tierra, y la otra mitad la llevaron al cielo. Por eso se enojaron mucho los otros dioses. Para recompensar a la dicha diosa de la tierra por el daño que los dos dioses le habían hecho, todos los dioses descendieron del cielo para consolarla y ordenaron que de ella salieran todos los frutos necesarios para la vida de los hombres. Por eso hicieron de sus cabellos árboles, flores y hierbas, de su piel las hierbas muy pequeñas y las pequeñas flores, de los ojos pozos, fuentes y pequeñas cavernas, de la boca ríos y grandes cavernas de los agujeros de la nariz valles de montañas, y de los hombros montañas. Y esta diosa lloraba algunas veces durante las noches queriendo comer corazones de hombres y no se quería callar hasta que se los daban, no queriendo llevar fruta si no estaba rociada con su sangre humana… (Krickeberg: 1999; 22).

Retomando los aspectos de la estructura mitológica propuestos por Levi- Strauss, podemos ver que este mito de creación náhuatl cumple con funciones geográficas, pues se plantea en primer instancia en un sitio en el que solo existe el agua, lo que lleva a dos deidades a crear el cielo y la tierra a partir del sacrificio de un tercero.

Con respecto al aspecto cosmogónico, este es perceptible al comparar los cabellos de la diosa sacrificada con árboles, flores y hierbas, de su ojos como pozo, pequeñas cavernas, de la boca ríos y grandes cavernas y de los hombros montañas.

Pero también propone un planteamiento ritual para detener el llanto de la diosa que sacrificaron para la creación de la tierra. Dicho ritual, tiene que ser seguido por los hombres llevando así ajustificar el acto del sacrificio humano dentro de la cosmovisión náhuatl.

Otro francés que expone acerca del mito, pero desde la perspectiva del funcionalismo es Marcel Mauss, quien determina que el mito tiene un valor practico, una veracidad, certidumbre y constancia.

El fragmento mitológico que a continuación se expone un fragmento mitológico del origen de los hombres y de las plantas alimenticias, el cual fue extraído del Códice Chimalpopoca, en él se relata el nacimiento de los cuatro soles y la destrucción de cada uno de ellos,

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