Quiero Ser Libre

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De la codependencia a la coparticipación positiva

¿Qué es la codependencia? Es un síndrome se dice que cada autor lo define según el campo de acción en el que la encuentra, la codependencia es un nombre nuevo que engloba la conducta, los que viven verdaderas tragedias en sus hogares han aceptado vivirlas y caen en depresión.

Giran alrededor del cónyuge alcohólico o neurótico, del hijo drogadicto, de un padre inválido, de un hijo incapacitado, etc. Dejan estas personas de existir para sí misma, ignoran sus propios sentimientos, su alegría se transforma en tristeza o enojo acumulando que se nota en todo momento, su dulzura y su compasión dan paso a una dureza. Creen que no hay nada que hacer esto se llama codependencia se dice que es un enfermedad sus consecuencia son graves y que puede llevarnos a la muerte, Salí de ella es muy difícil sobre todo cuando los codependientes son vistos como las víctimas de los inválidos, adictos, alcohólicos, drogadictos y neuróticos. Es una enfermedad que impide relacionarse con los demás en formas normales y sanas es algo muy difícil, pero no imposible.

La coparticipación negativa Melody Beattie definió “la persona codependiente es aquella que ha permitido que su vida se vea afectada por la conducta de otra persona y que esta obsesionada tratando de controlar esa conducta”.

Un paso importante es lograr que la persona codependiente reconozca su sufrimiento, su necesidad de ayuda y que su vida empieza a no funcionar bien , se dice que las personas que sufren esto se deteriora física, mental, psicológica y espiritualmente; y si no se trata esa enfermedad, se puede presidir que llegara hasta la muerte.

Características señalada por codependiente una de ellas es cuando tienen dificultad en identificar sentimientos, no poder explicarlo, miedo en ser rechazado o lastimado por otros. Otras características la codependencia no respeta edades, la palabra codependiente o coadicto proviene; co: con o necesario y adicción: esclavitud. Es la persona necesaria para que la esclavitud funcione.

El codependiente tiene como características muy especial, siempre dejan que los demás los ignoren y los traspasen. No tiene habilidad para disfrutar espontáneamente, porque siente que pierde el control.

El codependiente tiene mucho miedo de su ira, porque no sabe hasta donde lo pueda llevar. Acostumbra mentir a exagerar hasta en cosas que realmente no tienen importancia

En estados avanzados de codependencia aparece una incapacidad para juzgar el estado de las cosas, así como una incapacidad para juzgar el estado de las cosas, así como una negación de la realidad. La persona no ve ninguna salida y empieza a manifestar cierta tolerancia al mal, que no puede entenderse más que como una verdadera enfermedad, ya que la exhibe no solo con gritos, golpes y destrozando las cosas, sino en su indiferencia en chantajes e infidelidad. En muchos casos, se llega a maltratar y hasta violar a los hijos.

El primer paso para salir de una enfermedad es reconocerla.La codependencia es una enfermedad adquirida.

La codependencia o la coparticipación negativa se manifiestan de muchas maneras, dependiendo de la personalidad de los individuos o de la forma en relacionarse en su familia y con los demás.

Dentro de esta forma se presentan diversos grados, pueden presentarse desde la infancia o aparecer de pronto, cuando se entra en la relación especificas donde se muestra la enfermedad.

Dependencia. Ser dependiente significa no ser uno mismo, no tener opciones, actitudes ni comportamiento libres.

Ser dependiente significa que la felicidad de otros es más importante que la nuestra propia, y que les permitimos tomar decisiones sobre nuestra vida, que nos corresponden únicamente a nosotros.

Sin embargo, se ha descubierto que el dependiente escoge serlo, pero acumula mucho enojo contra la persona de la que depende. El enojo acumulado, además de que incapacita o paraliza a la persona cuando se llenan sus expectativas, la lleva no sólo a debilitarse emocionalmente, sino a veces también a una debilidad física de esta proviene muchas úlceras, fatiga, insomnio, hipertensión, estrés, depresión, etc.; El enojo reprimido parece no existir, está agazapado detrás de una cara indiferente o de una sonrisa estudiada. El enojo y el resentimiento pueden estar gustados por años, quizá hasta parezca que han desaparecido; señales que existen dan a la voz de alarma, tales como sentimientos de desilusión y sensación de ser dejados a un lado, subidas y bajadas de peso sin razón aparente, dolores y enfermedades crónicas(dolores de cabeza, espalda).

Lo contrario de la dependencia es la libertad. Esto significa irse convirtiendo en uno mismo, con opciones, actitudes y comportamiento libres.

Nuestra codependencia puede controlar nuestra vida hasta en su más mínimo detalle. ¿Por qué?, te preguntarás. Porque nuestra emociones reprimidas, nuestra baja autoestima, la tensión que tenemos en nuestra ansiedad de complacer y buscar la aceptación, nos paralizan. Dependemos de los demás para pensar, porque ya no confiamos en nosotros mismos para decidir correctamente; porque nos da miedo diferir de los demás en nuestra elección, nos da pavor contradecirlos, hacerlos enojar y provocar que nos rechacen.

La dependencia llega a convertirse en un modo de vida. Nos acostumbramos a vivir preocupados, obsesionados, ansioso, temeroso. No podemos quitar la mente de las personas o hechos que nos atan; se convierten en una verdadera obsesión. Hemos dejado de saber qué sentimos, qué necesitamos y quienes somos; ya que ha desarrollado en nosotros un habito de preocupación, reacción y pensamientos obsesivo.

El único camino que nos ayudará a salir de ese agujero es el desprendimiento. El desprendimiento es la meta de la mayoría de los programas de recuperación para codependiente. Es lo primero que tenemos que ir logrando.

El desprendimiento parte del hecho de que cada persona es responsable de sí misma, que no podemos resolver problemas que no son nuestro, y que preocuparse y obsesionarse por ello no ayuda en nada. Les permitimos a los otros ser lo que son, le damos la libertada de ser responsables y de crecer, y nos damos nosotros la misma libertad.

El desprendimiento nos lleva a vivir en el aquí y en el ahora. Dejamos que la vida suceda, en el lugar de forzarla o tratar de controlar. Abandonamos los arrepentimientos por el pasado y los temores para el futuro. Sacamos lo mejor de cada dia; incluye también aceptar la realidad. Requiere fe en nosotros mismo. Aprendemos a amar sin volvernos locos; no quiere decir que nos convirtamos en seres indiferentes, sino que dejamos de crear el caos de nuestra mente y a nuestro alrededor. Esto va a traernos como fruto la paz, la capacidad de dar y recibir amor, en experiencias que nos hagan crecer. Nos da libertad para vivir sin atormentarnos con sentimientos de culpa enfermizos y permite a los que nos rodean tomar la responsabilidad de su vida, y así crecer también.

El desprenderse es como gozar del sol en todo su esplendor, pero no morir si éste no sale. Es gozar de una buena música mientras dure, sin pensar que cada nota que oímos nos acerca al final de la pieza. Es vivir amando, y no pensando en estrategias para que nos amen.

El desprendimiento necesita de la aceptación de que soy capaz y merecedor de pensar, vivir, decidir, y ser feliz; de que puedo vivir no con resignación, martirio, pensar, tristeza y desesperación, sino con entusiasmo, alegría, deseo de superación, paz y capacidad de dar amor, de dejar en libertad y de amar sin exigir.

El objetivo principal es que al descubrir tu verdadera identidad decidas dar los pasos necesarios para cambiar lo que pueda ser cambiado. Es presentarte a la realidad de tu enfermedad, junto con la opción que tienes para elegir entre seguir como estabas o dar los pasos hacia nueva libertad interior

Glosario

Propensión: Inclinación de una persona o cosa a lo que es de su gusto o naturaleza

Lindero: adj. Que linda o limita con una cosa

Ambivalencia: Estado de ánimo, transitorio o permanente, en el que coexisten dos emociones o sentimientos opuestos

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