Relacion De Los Padres Con El Autoncepto Del Niño

Autoestima.

La autoestima es una actitud, es la forma habitual de percibirnos, de pensar, de amar, de sentir, y de comportarnos con nosotros mismos, es, por tanto: "es el núcleo básico de la personalidad, un conjunto organizado y cambiante de percepciones que se refieren al sujeto. Como ejemplo de estas percepciones citemos: las características, atributos, cualidades y defectos, capacidades y límites, valores y relaciones que el sujeto reconoce como descriptivos de sí y que él percibe como datos de su identidad" (C. Rogers, 1967)

Nathiel Branden (1999) define la autoestima como la experiencia de ser aptos para la vida y para las necesidades de ésta, también la define como:

 La confianza en tu capacidad de pensar y de enfrentar los retos que la vida presenta.

 La confianza de tu derecho a la felicidad, de ese sentimiento que te dignifica y te hace merecedor de valorar a ti mismo como persona y las aportaciones que haces al mundo como tal.

La autoestima es el conjunto de las actitudes de un individuo que tiene hacia sí mismo, como se percibe en niveles sensoriales, tipo de pensamientos sobre el mismo y sus comportamientos.

Rubert B. Burns. (1990) precisa que la autoestima es “la conducta del individuo es el resultado de la interpretación peculiar de su medio, cuyo foco es el sí mismo”.

Maslow, cuando habla de la jerarquía de las necesidades humanas, describe la necesidad de aprecio, fragmentándolo en dos partes: el aprecio que se tiene por uno mismo (amor propio) y la estimación que se recibe por las demás personas (reconocimiento y aceptación).

Según Cortés de Aragón (1999), La autoestima tiene una serie de componentes de diversa índole, entre los cuales señala: cognición, emocional y conductual.

 Componente cognoscitivo. Denominado por el autoconocimiento, autocomprensión, autoimagen y autopercepción. Estos se refieren a la representación mental que cada uno elabora de sí mismo.

 Componente emocional. No se separan los sentimientos y emociones de los deseos y necesidades. Todos los sentimientos referidos a uno, determinan la autoestima como la base de la autorrealización que cada uno mismo desea conseguir.

 Componente conductual. Partiendo de las premisas de autoestima, son conocerse, evaluarse y aceptarse, no es menos cierto que la implica acción hacia el exterior o actividad del entorno, la interacción y adaptación al medio.

La autoestima es la base para el desarrollo humano, esta nos puede indicar un nivel de conciencia, que no sólo permite nuevas miradas al mundo y a sí mismo, también ayuda a realizar acciones recreativas, como un impulso eficaz.

Existen dos tipos de autoestima alta y baja. Dependiendo que tipo de percepción se tenga de uno mismo influirá considerablemente en el tipo de herramientas para el crecimiento personal.

Branden, marca cuales son los grados de la autoestima, en virtud de ello las personan presentan uno de los tres estados:

 Tener una autoestima alta equivale a sentirse confiadamente apto para la vida, sentirse capaz y valioso, se siente aceptado como persona.

 Una persona con autoestima baja, es cuando, no se siente con disposición para la vida, sentirse equivocado como persona.

 Autoestima media, es la ambivalencia entre los estados anteriores, sintiendo apto o inútil dependiendo la ocasión, actuando con sensatez o imprudencia.

Autoestima en el niño.

Un infante, a partir de los 7 años (etapa operacional de Piaget), empieza a generar su propios autoconceptos. Cómo evoluciona el desarrollo del pensamiento, las ideas se vuelven más realistas y equilibradas. El niño integra sus autoconceptos al yo, que pueden marcarlo de por vida. En esta etapa es capaz de distinguir el yo real al yo ideal.

A medida que el niño crece es consciente de reconocer sus sentimientos y emociones en él y otras personas. Es capaz de regular lo que siente y responder a la angustia emocional de sus congéneres.

Algo que determina la autoestima en el niño, es la perspectiva acerca de su capacidad para el trabajo productivo (Erikson, 1982). En la tercera infancia (de los seis a los doce años) se enfrenta a industria vs inferioridad, donde tienen que aprender las habilidades que son valoradas en la sociedad.

La virtud o fortaleza que se desarrollan en esta etapa (tercera infancia), es como el yo es capaz de dominar habilidades y tareas aptas para la sociedad. Los padres tienen una fuerte influencia en su idea de competencia. Lo que ellos piensen, opinen y demuestren de su hijo, será de vital importancia para desarrollar una autoestima baja o alta del niño.

Si el niño siente una inadecuada comparación con sus similares, esto afectaría su manera de socializar.

Factores que intervienen en la autoestima del niño.

Los factores que intervienen en la autoestima son amplios, pero los más importantes son: socialización, apariencia física, competencia académica y su relación con padres y hermanos.

Relación familiar nuclear.

La influencia de los padres y hermanos, en el desarrollo de una sana autoestima en el niño, es sumamente importante. Como es la relación con el infante ¿comprensiva y amorosa o está llena de conflictos?

Un factor que contribuye es qué tan bien manejan los padres, las necesidades de crecimiento de su hijo en edad escolar y su capacidad para permitir que éstos tomen sus propias decisiones.

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