SALUD DESDE LA PSICOLOGÍA

SALUD DESDE LA PSICOLOGÍA.

El cuerpo humano es un mecanismo perfecto que ha intrigado a diferentes estudiosos y ramas de la ciencia a lo largo de los siglos, como: Medicina, Antropología, Psicología. La palabra salud proviene de la existencia de una enfermedad física, y con el tiempo han ido surgiendo diversos conceptos surgieron y se transformaron en otros tratando de explicar qué significaba la palabra salud.

Hoy en día, la salud se considera un estado de completo bienestar físico, mental y social, no solo libre de afecciones o enfermedades propuestas anteriormente por la Organización Mundial de la Salud, hasta que se realicen los ajustes necesarios para adherir el conjunto de aspectos que engloba el término. Poseer y crear salud significa una gama de beneficios, considerada una disciplina autónoma.

Desde la antigüedad, las personas conocen la enfermedad y, por lo tanto, el bienestar que conlleva la salud. Nuestros antepasados ​​en diferentes épocas sabían reconocer la falta de la salud y cuando las personas estaban sanas. Según sus creencias culturales, algunas personas atribuyen la enfermedad de alguien a un motivo determinado. Hay teorías que apoyan la enfermedad en el cuerpo humano, así como las teorías personales atribuyen la causa de la enfermedad a factores sobrenaturales como la brujería y los espíritus. Por otro lado, la teoría naturalista nos dice que los fluidos corporales no están equilibrados. La teoría también sugiere que la enfermedad proviene de emociones negativas. Religiosos creyentes y fanáticos también participaron de este aporte para explicar la causa de la enfermedad, considerando que es provocada por el castigo divino y el pecado.

Lo interesante de todos estos esfuerzos filantrópicos por explicar y encontrar la causa de las enfermedades es que se ubican en diferentes períodos de la historia humana desde la era prehispánica hasta principios del siglo XX, donde la evolución de ideas y conceptos es claramente observable. En salud, sus aspectos subjetivos y objetivos siempre han sido una parte clave para entenderla. Sin duda, la atribución de aspectos emocionales y psicológicos para que una persona goce de buena salud muestra claramente que la psicología de la salud es una rama de la psicología que estudia los procesos y comportamientos asociados con el mantenimiento y la promoción de la salud del individuo. su entorno De esto puedo destacar la siguiente conceptualización de       Oblitas (2000). Que define la promoción, fortalecimiento y mantenimiento integral, así como el diagnostico, prevención y tratamiento de la enfermedad.

La llamada psicología de la salud se desarrolló dentro de un modelo biopsicosocial que sitúa la explicación de la enfermedad y los síntomas en una perspectiva física, social, cultural y psicológica. Como sistema, combina procesos estrechamente relacionados que juegan un papel importante en la comprensión de la presencia de enfermedades y comportamientos saludables o de riesgo. En la actualidad, en el trabajo de los profesionales de la psicología especialistas en salud se encuentra fundamentalmente la valoración de aquellos factores que contribuyen a mantener una salud digna y equilibrada, así como aquellos que reducen la presencia y causa de la patología y sus consecuencias.

La psicología de la salud crea tres niveles para su prevención y promoción, el primer nivel es la protección de la salud directamente al medio ambiente (saneamiento, higiene alimentaria) Y trabajar directamente con las personas para promover la salud y la prevención de enfermedades, implementando estrategias para cambiar malos hábitos, hacer ejercicio, consumir sustancias y más.

El nivel secundario interviene ante la primera aparición de la enfermedad y se dedica a su proliferación y erradicación para que no evolucione a un estado crónico. Por lo tanto, se propone un enfoque de tratamiento a seguir y adaptaciones conductuales que promuevan la recuperación. En sí, el último terciario significa la atención de la patología en estado crónico, y en ocasiones existen limitaciones al establecimiento de la misma enfermedad, por lo que el objetivo será evitar el deterioro e incapacitación de la persona. Estos tres niveles se utilizan en el tratamiento de diversas patologías como enfermedades cardiovasculares, enfermedades respiratorias, virus de la inmunodeficiencia humana VIH, obesidad, diabetes tipo 2 por mencionar las que presentan los índices más altos.

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