Trastornos psicosomáticos

Introducción

Los temas a tratar en este documento son trastornos psicosomáticos, el reto del caso frontera así como también la perspectiva para el futuro, se indagara en cada uno de ellos, así como en sus implicaciones con el fin de dar una explicación sencilla y básica de lo que trata cada tema mencionado con anterioridad.

Trastornos psicosomáticos

Como bien se sabe muchos de los padecimientos que sufren las personas a lo largo de la vida tienen un origen esencialmente psicológico, aunque la manifestación de sus padecimientos sea meramente física, es a lo que nos referimos cuando decimos que es una enfermedad de carácter psicosomático.

Adentrándome al tema, mencionare a Weiner y Fawsy quienes en 1989 distinguieron claramente tres modelos de aproximación al paciente:

-El modelo biomédico que es materialista y mecanicista y vislumbra al hombre de algún modo como una máquina.

-El modelo psicológico que dice que todas las enfermedades tienen consecuencias psicológicas y en algunos casos son factores psicológicos los que producen enfermedades.

-El modelo psicosomático que pretende unir los dos modelos anteriores, argumenta que la dualidad mente-cuerpo es indisoluble y no se puede entender una sin la otra.

Los factores psicológicos, cognitivos, emocionales y motivacionales de cada persona, junto con su historia de vida y el ambiente sociocultural en el que se ha desenvuelto influyen en gran medida en las enfermedades que llega a padecer, así como en la prevención de enfermedades y la conservación de su salud.

Otro factor que influye de manera decisiva en las enfermedades, es el estrés ya que médicos y psicólogos coinciden que quienes viven con estrés y preocupaciones constantes tienden a manifestar más enfermedades físicas y mentales.

En casos extremos un estrés demasiado prolongado puede provocar el llamado colapso nervioso, en el cual las personas no son capaces de afrontar ni siquiera los problemas más sencillos.

Existen otras enfermedades de carácter psicosomático como los trastornos gastrointestinales, como la gastritis que se caracteriza por una producción excesiva de ácido clorhídrico en el estómago y rara vez las personas que la padecen reconocen que más que del estómago es de índole psicológico, después viene lo que es la ulcera péptica que son las heridas por gastritis persistente y se dice que los que la padecen poseen un patrón de personalidad pasivo-agresiva.

Al igual que las enfermedades antes mencionadas existe lo que es el colon irritable (cuadro de dolor abdominal intenso), aquí el psicólogo clínico puede intervenir trasmitiendo recursos de afrontamiento para que el paciente pueda modificar su actitud ante la disfunción, mejorando así su calidad de vida.

Otra enfermedad de este tipo es el infarto al miocardio que es una neurosis producida por la falta de irrigación sanguínea al tejido cardiaco y aunque muchos de los factores de riesgo son de carácter físico, otros son esencialmente conductuales como el sedentarismo, la obesidad y fumar.

Se han estudiado los factores psicológicos que se asocian con las personas que han sufrido un infarto y en particular se relacionan al estrés excesivo, la personalidad de tipo internalizante y al perfeccionismo.

La migraña es una enfermedad psicosomática que según Navarro (2006) está asociada con trastornos emocionales y factores psicosociales como la ansiedad o depresión.

El asma bronquial es una enfermedad del mismo índole que las anteriores y puede ser provocada por estímulos psicológicos, traducidos en el SNC mediante una actividad parasimpática aumentada provocando una hiperventilación de origen psicológico.

RETO DEL CASO FRONTERA

Como se mencionó al principio de este documento pasó a hablar del reto del caso frontera, el término se usa para referirse a casos donde no es posible establecer una entidad patológica, pero al mismo tiempo

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