Discurso Del Rey

Introducción

El discurso del rey cuenta la historia de Bertie (Colin Firth), que se convirtió luego en el Rey George VI y gobernó el Reino Unido durante dieciséis años. Pero no es la típica historia de cómo vive una familia real, o cuáles son los desafíos de liderar a un pueblo. Trata de un mundo donde la diplomacia se ejerce a través de discursos, y el candidato a heredar el trono de su padre es... tartamudo.

Aunque su hermano el Rey Edward VIII (Guy Pearce) es el que primero hereda el trono, no dura mucho al mando, y es George VI quien lo sucedería naturalmente. Para ello debe sentirse seguro de que puede hacer el difícil trabajo, y el incondicional apoyo de su esposa, la futura Reina Elizabeth (Helena Bonham Carter), parece no ser suficiente.

Sin embargo su vida cambia cuando conoce a Lionel Logue (Geoffrey Rush), un fonoaudiólogo poco convencional que insiste en abordar el problema desde un punto de vista psicológico, y poco a poco logra que el reservado y obstinado Bertie se abra y gane la auto-confianza perdida desde pequeño. La relación entre ambos se transformará en una amistad que ayudará al rey y a todo el Reino Unido.

El discurso del rey y la negoción

El encontrar soluciones para cualquier problema o necesidad, sugiere abrirse a posibilidades externas, a una escucha activa, a una búsqueda paciente; no es posible y no ha sido posible para el ser humano crear sociedades unipersonales, porque somos creados para vivir en comunión, en compañía, interdependientes y bajo normas de convivencia.

En el ciclo de vida de las personas a medida que se crece mentalmente se adquieren nuevas responsabilidades que deben asumirse de la mejor manera, y no se debe fijar en los aspectos negativos haciendo énfasis en ellos, sino en la forma de que se convierta en un aspecto que fortalezca la personalidad en general.

Esto se ve a cotidiano cuando alguien llega a un nuevo trabajo, cuando se encomienda una nueva tarea o cuando llega a un nuevo círculo social, las incertidumbres envuelven en ocasiones a la persona haciéndola dudar sobre su proceder. Si se manejan estos aspectos puede hacer de esa experiencia algo enriquecedora para la personalidad.

En la película “El discurso del rey” el duque de York precisa encontrar solución a su tartamudez, sin embargo le será necesario ajustar su temperamento, extender su paciencia, desacostumbrarse a su tradicional tratamiento especial, en síntesis, romper paradigmas, se encontrará con un personaje singular, un autodidacta de los trastornos del habla.

Su aún no superado aparente problema del Duque de York, que lo ha mantenido en general alejado del escenario público a pesar de contar con alrededor de 35 años y habiendo intentado con casi todos los galenos de su medio, quienes con tradicionales terapias no pueden ayudarle. Su actual situación de rey y la inminente guerra contra Alemania, le hace

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