Doctrina Social

IUSPO SUAREZ Neydi

Educación, mención Ciencias Religiosas

Doctrina Social

Prof. Santiago PROL Los Teques, 22-02-10

DOCTRINA SOCIAL

El recorrido hecho en esta materia de Doctrina Social ha permitido una cercanía con respecto a la postura de la Iglesia ante las realidades sociales, políticas económicas presentes en la sociedad.

Son muchas las situaciones que se viven que atentan contra la dignidad de la personas sin tener en cuenta sus derechos elementales especialmente a vivir de una manera adecuada gozando de los servicios básicos.

Es aquí donde la Iglesia se hace su constantemente portavoz de las personas exigiendo a los organismos correspondientes organizarse de tal forma que puedan dar respuesta y no dejar que estas situaciones se conviertan en algo natural, la Iglesia exhorta a ser fieles a los valores fundamentales como la vida, el respeto, la justicia entre todos tantos valores necesarios para construir una sociedad digna.

Es interesante resaltar que la Iglesia ha prestado y lo sigue haciendo hoy un servicio a los sectores sobre todo más desprotegidos brindado atención médica, educación y formación laboral para que las personas puedan acceder a algún campo de trabajo, de igual manera apoyando la defensa de los derechos humanos todo esto con la intención de hacer presente la experiencia de liberación que Jesús vino a desarrollar en medio de un pueblo lleno también de opresiones e injusticias.

Cristo ha venido a liberar a los pobres y a los cautivos, Cristo inspira su acción en el amor del Padre, en la gratuidad de la salvación, que es generadora de vida nueva, El mandamiento del amor recíproco, que constituye la ley de vida del pueblo de Dios.

La persona humana es por ello el punto de encuentro de diferentes organismos eclesiales (parroquias, congregaciones, movimientos eclesiales) en la construcción del Reino. Ciertamente existe también el esfuerzo de hacer tomar conciencia a todos los cristianos laicos sobre su rol dentro de la sociedad, desde su lugar de trabajo dando testimonio de su compromiso eclesial.

El fin es llegar a construir el bien común entre todas las personas, no buscando sólo los intereses particulares que llevan a las personas a vivir sumergidos en el egoísmo y en la individualidad.

El trabajo humano de igual forma es un elemento de búsqueda del bien común por lo que la persona ha de tener presente que ha de realizarlo con conciencia social alejándose cada día del deseo desenfrenado de querer tener sometido a sus semejantes explotándoles y no siendo justo con el trabajo que realizan, sabiendo que en esta actitud colabora con la formación de una sociedad que muchos desean.

Otro aspecto importante de resaltar dentro de la doctrina social es el sentido de solidaridad y subsidiaridad entre los más necesitados siendo estas virtudes propias de un cristiano quien estando conciente de las realidades de sus prójimos busca la forma y la manera de colaborar ofreciendo su ayuda valiosa.

La defensa de los derechos humanos es lo que por otro lado va a garantizar el crecimiento y el desarrollo de la sociedad y en este aspecto la Iglesia ha sido muy preocupada para que exista un reconocimiento de la igualdad tanto de la dignidad como de los derechos, sabiendo de antemano que quienes se ven afectados la mayoría de las veces son los más pobres.

Finalmente dentro de la doctrina social está la misión de ofrecer la vivencia de la paz como camino de encuentro y convivencia dentro de la sociedad, cada vez son más las formas que amenazan con opacar la paz desde la palabras ofensivas los gestos violentos, pero también ante la incertidumbre que viven muchas personas

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