EXPLICACIONE TEOLÓGICAS

EXPLICACIONE TEOLÓGICAS

Una pregunta teológica tradicional es la de por qué Dios permite que haya mal en el mundo. El problema con esta cuestión se pregunta por qué Dios, quien posee ciertos atributos como la omnipotencia, omnisciencia y bondad. Aún así, el mal exista.

En todos estos casos si Dios no fuera omnipotente, el mal existiría porque él no podría impedirlo, si Dios no fuera omnisciente, el mal podría existir porque Dios no sabía que creaba el mal al crear el mundo, si Dios no fuera bondadoso, el mal también podría existir sin problemas. Entonces vemos que no parece haber explicación religiosa de un mundo que contiene el mal.

Según algunas perspectivas, el mal es la falta de bien. No es que Dios haya creado el mal, simplemente no puso suficiente bien por todas partes, no llenó todo con bondad.

Una doctrina entiende que el mal cumple una función en el mundo, la de educarnos. Sufrimos el mal y así ganamos sabiduría. Esta doctrina nos lleva a preguntar, ¿por qué no nos crearon con un grado superior que nos hubiera eximido de sufrir este proceso de aprendizaje? Otra doctrina tradicional entiende que el mal surge del libre albedrío, pero si este fuera el caso, ¿no podría Dios haber predicho de antemano cuáles iban a usar su libre albedrío para el mal, y así excluirlos de la creación?  Otro enfoque sostiene que el mundo fue creado a partir de materia preexistente, así Dios no tendría la culpa de los males de la creación porque esas cosas procederían del material residual anterior. Sin embargo, aunque esto sea cierto, ¿por qué no pudo Dios transformarlo para desechar ese residuo maligno?

Los gnósticos sostenían que la divinidad que creó nuestro mundo no era un dechado de sabiduría y perfección, tampoco era la divinidad máxima, ellos creen que nuestro mundo fue creado por alguien inferior, como un asistente revoltoso, por alguien que cometió un traspié en su labor. Pero entonces, ¿por qué el ser superior permite que esta divinidad inferior arme aquí semejante estropicio? ¿Por qué no lo creó de tal modo que no actuara erróneamente?

Una rama de la tradición judaica, la Cábala, sostiene que el mal en el mundo deriva de una tensión entre diversos atributos divinos, es decir, que estos estaban en tensión, no podían alcanzar el equilibrio atinado y por eso hay problemas en el mundo creado. Como se observa estas teorías son especialmente profundas.

Leibniz tenían también una visión sobre el problema del mal, este afirmaba que Dios creaba el mejor de los mundos posibles, y Dios al organizar un mundo, deseaba leyes perfectas, simples y naturales, pero la operación de estas leyes en ocasiones causa terremotos y accidente laterales, a veces afectando a la gente. Si embargo Dios pudo haberlo evitado, él pudo haber prodigado milagros que habrían intervenido en los momentos oportunos. El filósofo Schlesinger, sostiene que no existe el mejor de los mundos posibles. Lo único que podría ser mejor sería un mundo de valor infinito, pero lo único que posee valor infinito es Dios.

Pero, ¿por qué Dios quiere crear un mundo? ¿por qué crear un mundo donde existe el mal? Por supuesto, son preguntas a parte. Pero quizá si entendiéramos las razones de por qué un ser divino y perfecto crearía un mundo en vez de contentarse con estar a solas, entonces entenderíamos porque este mundo posee el carácter que posee, con el mal incluido. Dado que el mundo que creo no puede tener valor infinito, cualquier mundo que crease sería criticado de cualquier modo, por no ser ¨mejor¨, pues teóricamente no existe el mejor de los de los mundos posibles, así como no hay entero positivo máximo. Tal vez si Dios en serio quería un mundo esplendoroso, ese mundo no nos incluiría.

Una visión religiosa adecuada de la existencia del mal debería cumplir el requisito de darnos algo que decir a alguien que va a padecer sufrimiento. Las teorías que acabamos de presentar no nos brindan ninguna frase decente para decir a nadie.

¿Qué criterios debe seguir una respuesta satisfactoria al problema del mal? Primero, lo obvio es que debe reconciliar los 3 atributos de Dios con la existencia del mal en el mundo. Una respuesta tiene que lograr que esas cosas congenien intelectualmente. Segundo, la respuesta tiene que ser algo que podamos decir a alguien que ha experimento el sufrimiento del mundo. Tercero, que la respuesta tenga una especulación psicológica. Cuarto, la explicación del mal no debería dejar intacto al ser divino. Quinto, una explicación satisfactoria debe hablar de un ser divino digno de adoración, un ser divino que justifique una religión.

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