Educacion

4. Elementos Metodológicos Preventivo de Don Bosco

a. La asistencia

Al desarrollar la pedagogía propiamente salesiana, varios elementos y factores se traslucen y dejan ver de golpe. Uno de ellos es el de la asistencia y la presencia del educador en la vida del educando. Una actitud que abre el campo de acción y de relación entre ambos y los hace compartir experiencias extracurriculares y significativas. Una asistencia que lejos de ser una observancia policíaca es una cercanía fraterna. Muchos males se evitan en la vida del joven cuando tiene cerca al educador salesiano. Famosa es aquella reflexión de Don Bosco al visitar con Don Cafasso las cárceles de Turín:

“Me sentí horrorizado al ver esa cantidad de muchachos, de doce a dieciocho años, sanos, robustos, inteligentes, que estaban allí ociosos, roídos por los insectos y faltos en absoluto del alimento espiritual y material. Estaban personificados en estos infelices la vergüenza de la patria, el deshonor de la familia y su propio envilecimiento. Pero qué sorpresa y asombro constatar que muchos de ellos salían de ese antro con el propósito firme de cambiar de vida y, sin embargo, reincidían fatalmente en los mismos lugares de reclusión que pocos días antes habían abandonado.

Constaté, así mismo, en esas ocasiones, que las recaídas de muchos se debían a que estaban completamente abandonados. Fue cuando me pregunté: y si estos chicos allá afuera tuvieran un amigo que se interesara por su bien, los acompañara y los instruyera en la religión durante los días festivos, ¿no se reduciría el número de los que vuelven a la cárcel?” (MO 39)

 El significado de presencia educativa

Al referirse a la presencia educativa, el Sistema Preventivo hace alusión a la razón del estar en los muchachos. No es un propio infantilismo del educador de “querer jugar”, sino de acompañar, asistir y estar en las diversiones de los alumnos. “Amando sus inclinaciones infantiles lograremos que ellos amen lo que nosotros amamos” decía Don Bosco en la Carta de Roma.

La presencia educativa es una disposición natural de los educadores para hacerse parte de la vida de sus muchachos: compartir sus gustos, conocer su realidad, saber sus sueños, etc. Pero con la finalidad de orientarlos para el bien suyo y la gloria de Dios. No es un mero ‘entrenador’ ni un solo ‘consejero’, es un amigo que saberse hacerse amar porque es el primero que ama y lo demuestra estando con sus muchachos. No es una ‘educación a distancia’, sino es un compartir, una vida educativa.

 Formas operacionales de la asistencia

Existen varios tipos de asistencia que el educador puede asumir. La primera es ligada a la propia vida del educando: acercarse a su realidad. Conocer su familia, saber dónde vive, quiénes son sus amigos y descubrir sus gustos y aficiones.

La segunda es la ligada propiamente al proceso sistemático de la educación: es el docente que no ve notas y grupos, sino que estudia cada caso de sus alumnos y sabe orientar la materia, la actividad y la dinámica para el bien común. Y en caso alguno aún esté perdido, sabe acercarse e inducirlo de vuelta al grupo. Es, en pocas palabras, una educación individualizada.

Tercero es en la propuesta asociativa extracurricular. A través de grupos musicales, grupos de estudio, deportes, películas, etc. El salesiano puede desarrollar talentos propios de sus alumnos, acompañarles y brindarles la oportunidad de tener un crecimiento integral. A través de esta propuesta el salesiano se asegura la presencia del muchacho y su integración a un proceso formativo guiado.

La cuarta es una forma indirecta: a través del ambiente. Es difícil realmente tener un acercamiento constante con la totalidad de los alumnos, pero puede crearse un ambiente educativo en la obra de manera que los mismos muchachos se acompañen y asistan entre ellos y sea natural la convivencia cercana. Tal vez no vea al salesiano, pero se sentirá asistido el joven a través de carteleras, música, espacios abiertos, etc.

 Actualidad de la presencia educativa salesiana

De la propuesta original de Don Bosco muchas cosas han tenido que cambiar y adaptarse a la situación actual. La dinamicidad propia del Sistema Preventivo obliga a desechar la idea de repetir lo hecho por los primeros salesianos y a asumir las nuevas propuestas creativas.

La mayoría de nuestras obras como salesianos son centros escolares o centros de formación profesional. Procesos sistemáticos reconocidos civilmente que abre las puertas a la inserción social más pronta. Además de espacios amplios para el deporte y la sana diversión, en su mayoría con campos de fútbol y basquetbol. Algunas parroquias también están bajo el cuidado salesiano y proponen en la asociación y en los grupos juveniles esta espiritualidad

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