ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

El hombre llamado a creer Apertura del hombre a Dios


Enviado por   •  18 de Marzo de 2016  •  Ensayos  •  1.825 Palabras (8 Páginas)  •  564 Visitas

Página 1 de 8

[pic 1]         [pic 2]

Seminario “Santa Rosa de Lima”

Cátedra: Teologia Fundamental

Pbro. Erick de Vreese

Formando: Luis Toloza (EUDISTA)

         

El hombre llamado a creer

Apertura del hombre a Dios

En este análisis lógicamente previo a la existencia incluso a la misma pregunta por Dios, debería poder justificar ante la razón común, pues se trata de encontrar en la existencia humana las disposiciones o estructuras que hacen posible una relación posterior a tales estructuras, ya que las presupone como condiciones de su propia posibilidad pero por principio, con ellas no tendría por qué darse ya que, por si misma, la capacidad de escucha no exige, ni impone, ni condiciona ninguna revelación o encuentro.

Hay una dimensión de nuestro ser humano que nos hace capaces de creer, que poseemos ya antes de creer, aunque una vez que hemos creído descubramos todo el sentido y alcance de tal dimensión. Por tanto, nuestra reflexión, siendo creyente y estando suscitada por la fe, debe poderse mantener con sentido al menos en parte entre la propia racionalidad

Si el ser humano no estuviera en disposición de abrirse a Dios o de responder a su posible llamada, no habría posibilidad de revelación. Pues esta  no solo supone que Dios se comunica, sino que el ser humano es capaz de acoger la comunicación de Dios. Si el hombre estuviera totalmente encerrado en una relación puramente inmanente al conjunto de lo mundano  o de lo histórico, no podría nio siquiera planterase la cuestión de Dios y mucho menos acoger su posible llegada. Apertura de la razón a la trascendencia, a lo que se le sobrepasa, es condición de la legitimidad de la religión. Esta apertura no demuestra la existencia de Dios o de su palabra reveladora, pero hace del hombre un posible oyente de la revelación (cf. Rm 10,17)

En gran principio mantiene toda su vigencia tomas de Aquino: “la fe presupone el conocimiento natural, como la gracia presupone la naturaleza” o la razón es condición previa de la fe, como el ser humano es condición previa del ser cristiano. Dicho de nuevo con palabras de tomas “la fe ( la comunicación de Dios) no puedo preceder  totalmente al entendimiento ( presupone unas estructuras intelectuales que puedan acogerla). El hombre no puede asentir, creyendo, a algunas verdades si no las entiende de alguna manera” esta es la razón por la la que el magisterio de la iglesia sostiene la posibilidad de un conocimiento natural de Dios.

La apertura del hombre a Dios pone además de relieve la afinidad- no se trata de una exigencia, pero si de sintonía- del hombre con la revelación de Dios. Hay una correlación entre lo que le hombre busca- el bien, la felicidad, la verdad y lo que la revelación ofrece.    

El ser humano está abierto a la trascendencia, a Dios, e incluso a la posible palabra de Dios. Se ha buscado también explicar las condiciones de posibilidad de dicha apertura.  Es decir el hombre es deseo de Dios de afirmar su radical orientación hacia Dios. Tomas de Aquino habla del deseo natural de ver a Dios para indicar la aspiración que hay en el espíritu humano a la felicidad y a la verdad. Tal aspiración no es un aspecto particular del hombre. Define más bien la situación fundamental de la existencia humana, siempre abierta más allá de si misma. La primera se refiere al designio de Dios. Hemos sido creados para la vida eterna que consiste en la visión de Dios. La segunda se refiere a la relación del espíritu creado, considerado en su estructura ontológica, con la visión de Dios, la voluntad busca siempre la felicidad que no posee y descansa cuando la ha encontrado. Igualmente la inteligencia busca la razón última de todas las cosas, movida por su deseo de conocer la verdad.

Tomas indica la perfección con Dios con todos los seres, puesto que  desean su perfección  su perfección y sus felicidades, hay un deseo de verdad

Tomas identifica la perfección con Dios. De ahí que pueda concluir que en todos los ser, puesto que desean su perfección y su felicidad hay un deseo natural de Dios.  El hombre naturalmente desea  permanecer perpetuamente. Prueba de ello es que el ser es lo apreciado por todos: pero el hombre, gracia al entendimiento, apetece el ser no solo como presente, luego el hombre alcanza la perpetuidad por el alma, mediante el cual aprehende el ser en absoluto y perdurablemente.

Una cosa es que si Dios existe el hombre pueda alcanzar la plena realización de sus aspiraciones o encontrarse con él, y otra que de los deseos del ser humano se siga que Dios debe existir. A este respecto sastre diría que el hombre es una “pasión inútil”, una aspiración imposible. Y Dios un absurdo, en cuanto termino ultimo del deseo imposible del  hombre.

Si el hombre es un deseo natural de Dios, pudiera parecer que Dios es una exigencia natural del hombre o que lo sobrenatural dimana lógicamente de lo natural y, en tal caso, la revelación si Dios pueda crear seres intelectuales” sin ordenarlos y llamarlos a la visión beatifica” en realidad tomas de Aquino no solo afirma el deseo natural de ver a Dios. También afirma la imposibilidad para  la sustancia creada de acceder a tal visión por sus fuerzas naturales y sin contar con la acción de Dios, del mismo modo que el agua tiene capacidad para el calor, pero no puedo llegar a calentarse sin la acción del fuego.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (10.6 Kb)   pdf (113.2 Kb)   docx (45.1 Kb)  
Leer 7 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com