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El pastor y sus colaboradores Ministeriales


Enviado por   •  16 de Mayo de 2017  •  Trabajos  •  2.693 Palabras (11 Páginas)  •  900 Visitas

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Contenido

El pastor y sus colaboradores Ministeriales        4

Una Hermandad Cristiana        4

Con el superintendente de Distrito        4

Con el evangelista        4

Para son sus hermanos        5

El pastor y su parroquia mundial        5

Ventajas que ofrece una denominación        5

Obligaciones impuestas por la Denominación        5

Asamblea de Distrito        5

Informe anual del pastor        5

Convenciones del distrito        6

Responsabilidad Financiera        6

Empresa domestica Misionera        6

Sucesión pastoral        6

Largura de un pastorado        6

Un llamado para pastorear otra iglesia        7

Factores para un Llamamiento        7

Aceptando un llamamiento        7

Llegando a un nuevo pastorado        7

Llamamiento anual del pastor        7

Enfrentándose a la oposición        7

Separándose de una Iglesia.        8

El pastor y sus obligaciones en comunidad        8

Relaciones con otras iglesias        8

Intercambio de Miembros        8

Reuniones Unidas        8

Asociaciones ministeriales        8

Actividades en la comunidad        8

Introducción

“Cuando un predicador toma la Biblia seriamente, toda la iglesia empieza a tomar la palabra de Dios seriamente” Steven Lawson.

El pastor es una pieza fundamental en la iglesia, ya que él depende casi todas, sino que la mayoría de cosas o situaciones que suceden en la iglesia, por lo que el trabajo de pastor no es tan sencillo como parece, él debe de dedicar la mayor parte de su tiempo en leer y escudriñar la palabra, más que cualquier miembro de la iglesia, ya que esto hace la palabra fresca de Dios se revelada a su vida y la pueda compartir a los miembros de la iglesia.

Tenemos que estar conscientes que el trabajo del pastor no es netamente espiritual, sino que debe de relacionarse, con las personas que lo rodean como por ejemplo con sus colaboradores del ministerio otros pastores, con las personas que están a cargo de la denominación a donde pertenecen, con los pastores que han sido y los que van hacer pastores de la iglesia en donde pastorea y sobre todo la relación con las personas de la comunidad.

El pastor siempre debe de dirigirse sabiamente por la vida, ya que las decisiones que el pastor no solo pueden afectar a su vida personal, familiar, sino que también puede llegar a afectar a la iglesia o quizás hasta la sociedad en donde causa impacto, por lo que a continuación estudiaremos cual es la relación del pastor en los diferentes ámbitos.  

El pastor y sus relaciones Denominaciones

El pastor y sus colaboradores Ministeriales

Una Hermandad Cristiana

Algunos hombres entregan su espíritu a la crítica y Generalmente se vuelven amargados y desilusionados, quedan aislados y hasta pueden perder su trabajo.

Un predicador no puede menos que entristecerse por la mala fortuna, la indiscreción o el pecado de sus compañeros ministros. Debe de restaurar al caído en el espíritu de bondad considerándose a sí mismo, no sea que sea tentado.

Si se siente que es un deber rendir información injuriosa al carácter y la utilidad de alguno, debe de estar preparado para sostenerlo con testigos competentes o con documentos notariados, debidamente firmados.

Todo predicador debe gobernar su vida de manera irreprochable.

Con el superintendente de Distrito

La relación de un pastor hacia su superintendente de Distrito debe de ser de ayuda mutua.

Cuando se originen problemas debe de consultar con su superintendente de distrito antes que las complicaciones sean tales agudas que el superintendente no pueda arreglarlas.

Con frecuencia un pastor puede cultivar una amistad con el superintendente, pero debe de tomar las medias razonables para que la relación personal siempre sea cordial.  

La indiferencia pasiva es peor que la oposición activa.

Con el evangelista

Se aconseja que el evangelista sea personalmente conocido del pastor

El pastor debe de albergar al evangelista y proporcionarle todo lo necesario para que el evangelista este cómodo, como proporcionarle un lugar donde pueda descansar o bien pasar a solas un buen momento para que tenga comunión con Dios y se pueda llevar a cabo con éxito la campaña.

El pastor debe pasar el tiempo suficiente con el evangelista para asegurarse de que ha cooperación completa y amistad perfecta, para evitar problemas del mal entendidos como pensar que el evangelista llega a usurpar la posición pastoral.

Al momento de que la iglesia decida cuál será la remuneración económica del evangelista se debe de considerar que el evangelista no tiene casa pastoral y que pagar los servicios básicos por su propia cuenta por lo que lo conveniente es no darle menos del cincuenta por ciento del salario del pastor y tomar en cuenta que entre más grande sea la iglesia más oportunidad de darle una ofrenda generosa tendrán.

El pastor puede ayudar al evangelista por medio de una actitud positiva de aprecio y recomendación expresada tanto en privado como en público mientras dure la campaña; el pastor siempre debe ser sabio y no criticar a su evangelista cuando la campaña está en progreso y si el evangelista llegara a cometer algún error, este debe de corregirse en privado y de la manera más bondadosa posible.

Para son sus hermanos

El pastor siempre debe tener un espíritu de cooperación y de buena voluntad entre el pastor y lo que sirven en otras iglesias cercanas de su propia denominación.

Los pastores no deben de oponerse a la organización de otras iglesias establecidas más bien deben de estimular y promover tales proyectos.

Cuando se dé el caso de que miembros de otra iglesia quieren formar parte de la membresía de nuestras iglesias el pastor nunca debe usar presión mayor de la ordinaria para consérvalos y bajo ninguna circunstancia debe estar justificado en tratarlos mal; Si por el contrario un miembro de nuestra iglesia ha decido de una vez por todas hacer el cambio el pastor debe de extenderle su carta sin resentimiento ni discusión a menos que hayan causas que justifiquen el no extender la carta.

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