Experiencia religiosa

Ignacia Bastías Dauré.

La experiencia religiosa en el ser humano ¿búsqueda humana o conexión con lo sagrado?

El presente texto busca responder a la interrogante sobre si la experiencia religiosa en el ser humano es una búsqueda humana o una conexión con lo sagrado a partir de una postura personal; en este caso creemos que la experiencia religiosa en el ser humano es una búsqueda humana más que una conexión con lo sagrado. Lo que será argumentado a partir de la religión hindú, basada en la clase de Felipe Luarte, centrándonos en la idea de religión ritual en relación con la sociedad de castas.

Entendemos como religión hindú un conjunto de rituales y acciones basadas en una creencia monoteísta originada en la India, a partir de un proceso de sincretismo cultural entre pueblos nómades y sedentarios, adquiriendo especial importancia a partir de la época védica desde el 1500 a.C. aproximadamente. Esta época se caracteriza por la creación de los primeros textos fundacionales de la religión donde se especifican detalladamente los rituales para lograr comunicación con las deidades, la organización social a partir de castas, las formas de brahman o satya como la naturaleza o verdad del ser.

Esta religión supone que el atma estaría atrapado en un ciclo constante de muerte y reencarnación el cual puede romperse alcanzando el moksha o estado de liberación, lo que es posible, si en vida no se acumula karma al cumplir los deberes o dharma según cada casta.

Respecto a lo anterior y en conjunto de las ideas expuestas en la clase de Antonio Bentué consideramos que el ser humano ha buscado una experiencia religiosa desde la premodernidad, por medio de la explicación necesaria de su entorno y naturaleza, como por ejemplo los fenómenos naturales, vida, muerte, lluvia, creación, entre otros. Hasta la posmodernidad donde la experiencia religiosa logra entregar un sentido de existencia que el ser humano no ha podido resolver y mantiene, independiente del objeto de explicación, el elemento ritual como tradición

y constructo cultural cambiante según los contextos histórico-sociales de cada cultura.

En el caso de la religión hindú podemos ver como el elemento ritual ha sido central para el ordenamiento social desde los primeros textos sagrados y se mantiene hoy representado en una sociedad de castas que hasta hoy en día genera discriminación, lo que podemos comprobar en la necesidad de mecanismos de escaños reservados para que las castas inferiores puedan tener representación política. Debemos entender el rito como el control del poder sagrado a través de la técnica rigurosa que solo es realizable por expertos, en este caso la casta de los brahmanes que también es la de mayor privilegio y estatus en la India.

Este aspecto nos demuestra como la experiencia religiosa en tanto búsqueda de sentido, explicación de la naturaleza y orden de la realidad por el ser humano está presente en un plano más terrenal político que sagrado espiritual, permitiendo una perpetuación de poder, por medio del control del ritual a un grupo de la sociedad, como es el caso de los brahmanes desde el 1500 a.C. aproximadamente hasta la actualidad. Mantenido bajo la idea de dharma donde cada persona acepta sus deberes, condiciones y derechos en base al orden social religioso con la promesa de poder llegar al moksha.

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