Ciencia Y Tecnología

CUESTIONARIO

1) ¿Qué consecuencias puede mencionar de la actual revolución tecnológica?

2) ¿Las ciencias se deben enseñar por disciplinas? ¿Qué beneficios o no traería a los estudiantes?

3) ¿Qué son los islotes de racionalidad?

1) Las dos principales consecuencias de la actual revolución tecnológica son: la globalización y el aumento en la productividad del trabajo sobre todo en aquellos sectores de la economía que hacen uso intensivo de las nuevas tecnologías. Este último elemento ha puesto al alcance de grandes sectores de la humanidad un nivel de vida y una cantidad de bienes de consumo que eran inimaginables hace tiempo atrás, no obstante ello, también se han generado efectos indeseables; la desocupación es uno de ellos, dicho fenómeno se ha profundizado debido al aumento de la productividad del trabajo humano que es crecientemente reemplazado por equipos de producción automáticos.

Si damos una mirada histórica a dicho fenómeno notaremos que no se trata de algo nuevo, ya que los grandes cambios introducidos en algunas ramas de la tecnología, durante la segunda revolución tecnológica, produjeron desplazamientos de poblaciones, cambios en los estilos de vida y desocupación tecnológica. La mecanización agraria desplazo a miles de campesinos a las ciudades, conformándose el proletariado urbano.

Otro claro ejemplo sería el caso de la invención de los sistemas de producción basados en la fabricación de máquinas compuestas por piezas intercambiables (Ej.: armas, autos, etc.) Este hito marca el abandono del trabajo artesanal y el comienzo de la revolución en los métodos de producción de bienes, la racionalización del trabajo, la introducción del concepto de calidad y la introducción de la línea de montaje. Fue así que el Fordismo, como sistema de producción, abarató los costos de sus bienes poniéndolos a disposición de amplios sectores de la población, para cambiar por completo sus costumbres.

El ejemplo más cercano del impacto social de las innovaciones es el de la industria electrónica, durante las últimas décadas. La revolución de las comunicaciones, a través de la radio, la televisión, el teléfono y la informática, ha cambiado la forma en que los sujetos se relacionan entre sí. De todas maneras, es importante no perder de vista que el desarrollo de la tecnología no tiene un efecto determinante sobre la evolución de nuestras sociedades; aún cuando cierta tecnología sea aceptada, su impacto social puede variar de una cultura a otra.

Los cambios tecnológicos, desde la antigüedad, han tendido a facilitar el trabajo humano, reemplazando la fuerza física por formas basadas en la capacidad mental y en la inteligencia de los trabajadores. Incluso, en la actualidad, el máximo desarrollo alcanzado por los productos informáticos tiende a reemplazar la parte más rutinaria y mecánica de la actividad mental humana por el trabajo de las computadoras. Desaparecen de la variedad de la demanda laboral puestos de trabajo que sólo exigen fuerza muscular y bajos niveles de capacitación, para dar lugar a nuevos tipos de tareas que antes no existían y que se encuentran más vinculadas al dominio de nuevas tecnologías.

No podemos dejar de tener en cuenta que tales desarrollos plantean problemas graves a la humanidad, ya que el creciente reemplazo de la capacidad humana con máquinas hace que decrezca el trabajo para los individuos, el enorme aumento de la productividad de encuentra acompañado de una creciente desocupación y malestar social en lugar de opulencia y bienestar. Es evidente que la organización económica y social deberá cambiar totalmente para que este desarrollo conduzca a una mayor felicidad de la humanidad y no a su colapso. Sin lugar a dudas los avances tecnológicos establecieron normas y hábitos, generando influencias en todos los aspectos de nuestra vida y afectando nuestras formas de pensar.

2) En nuestra sociedad las disciplinas científicas se encuentran establecidas desde hace por lo menos dos siglos, éstas mismas han servido de base para la definición de ciertas carreras, proporcionándoles una identidad. Esto remite a una determinada organización de la sociedad, dado que esta estructuración de los conocimientos en disciplinas científicas que se presentan como totalidades de saberes organizados no se limita a representaciones puramente intelectuales, sino que tienen también una dimensión socio-cultural.

Es importante tener en cuenta que el malestar vinculado a la enseñanza disciplinaria se remonta a varias décadas atrás. Las tentativas frustradas de ofrecer aproximaciones interdisciplinarias ha dejado en evidencia la dificultad de tal aproximación. En este sentido es objetable la escasa formación que la universidad ofrece a los docentes en este tipo de trabajo, a lo largo de sus estudios se ha tendido a valorizar sobre todo a las investigaciones disciplinarias de punta.

Esta tendencia se evidencia claramente en el hecho de que los contenidos de los cursos de ciencias han variado escasamente a lo largo de los años, en muchos casos su estructura de base data del siglo XIX. Si tomamos el caso de la Didáctica de las ciencias, observaremos que utiliza los aportes de la pedagogía y la epistemología,

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