Mantenimiento Autonomo

Ensayo: Mantenimiento Autónomo

El mantenimiento autónomo es una de las etapas de la preparación de las condiciones de implantación del TPM (Mantenimiento Productivo Total) y es la acción más difícil y que más tiempo lleva en realizar, por lo difícil de dejar la forma habitual de trabajo. El mantenimiento autónomo es, básicamente prevención del deterioro de los equipos y componentes de los mismos.

Se dice que el propósito del mantenimiento autónomo es brindar conocimiento a los operarios de cómo mantener los equipos de trabajo por medio de la realización de revisiones diarias, lubricación, en ocasiones reparaciones y reposición de elementos e incluso detectando la aparición temprana del mal funcionamiento del equipo.

Existe un pensamiento habitual entre los operarios, el cual ha sido: “yo la manejo tu la reparas”. En ocasiones, los operarios se consideraban solamente responsables de la preparación y montaje de las piezas que no habían sido procesadas y de la inspección de calidad de piezas procesadas. El mantenimiento, incluyendo el más pequeño como lo es la lubricación, era visto como responsabilidad del personal de mantenimiento.

Las consecuencias pueden ser malas, si pensamos en los operarios que pueden evitar averías simplemente observando las anormalidades a través del contacto físico con la maquina como: apretando tornillos flojos, lubricando las partes donde exista mayor desgaste o partes secas, o simplemente eliminando suciedad por medio de limpieza.

El mantenimiento autónomo requiere que los operarios conozcan el equipo o máquina que utilizan. La experiencia laboral, no sólo debe estar relacionada con hacer funcionar el equipo, también deben incluir muchas tareas que son vistas como trabajo del departamento de mantenimiento. Por encima de todo, los operarios necesitan aprender a detectar las fallas que pueden ocurrir en el equipo que utilizan a diario, esto significa desarrollar completamente las habilidades de observar la calidad de los productos y funcionamiento del equipo y darse cuenta de cuándo puede ocurrir una anormalidad.

Para ello se requieren algunas aptitudes como:

• Entender claramente los criterios para determinar las condiciones en las que pueda trabajar el equipo.

• Cumplimiento estricto de las reglas de funcionamiento manteniendo el equipo en condiciones.

• Una solución rápida a una falla repentina.

Cuando el operario ha dominado dichas aptitudes podrá conocer suficientemente el equipo, conociendo las causas de los problemas futuros.

Es muy difícil hacer varias cosas al mismo tiempo. Ésta es la razón por la que el entrenamiento en tareas de mantenimiento autónomo necesita una aproximación paso a paso, asegurándose de que cada actividad clave se conoce a fondo antes de pasar al siguiente.

A pesar de que el nombre “autónomo” implica que los pequeños grupos realicen estas actividades bajo su propia responsabilidad es más difícil que tengan éxito si, al menos en los primeros momentos, reciben ayuda de una organización de TPM (Mantenimiento Productivo Total) operando bajo una cadena de autoridad en la cual el líder del grupo recibe apoyo del encargado, el encargado del jefe de sección, el jefe de sección del director de departamento, etc.

Cuando los empleados del nivel alto, como los jefes de sección y departamento ayudan a evitar o a salir de situaciones sin final, a ir más rápido, y a desarrollar

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