Procedimiento De Diseño De La Ingieneria

EL PROCESO DE DISEÑO EN LA INGENIERÍA

El diseño de ingeniería puede describirse como el proceso de aplicar las diversas técnicas, metodologías y principios científicos con objeto de definir un dispositivo, un proceso o un sistema “encaminado a cubrir una cierta necesidad” con el suficiente detalle para permitir su realización.

La enseñanza del diseño es una tarea estimulante y difícil dada la educación analítica que han recibido los alumnos y que entorpece, en ocasiones, un pensamiento abierto. Se plantean las bases metodológicas y de contenido fundamentales en el desarrollo de tal materia, priorizando el trabajo del alumno, la formación global y multidisciplinar y las situaciones próximas a las reales de la vida laboral en el campo del diseño, debiendo cubrirse todas las etapas del proceso (desde la definición del problema hasta la presentación de la solución).

Se analiza la idoneidad para esta asignatura de diferentes estrategias metodológicas docentes: desde la clásica técnica expositiva a métodos como el torbellino de ideas, Phillips 6.6, estudio de casos, proceso incidente, estudio dirigido y el método de proyectos. Por último, se plantea la posibilidad de secuencialización de contenidos a través de la realización completa de un proyecto de diseño, el cual se elabora y se tutela en paralelo a la impartición de la materia abarcando los diferentes aspectos de la misma.

El diseño de ingeniería puede describirse como el proceso de aplicar las diversas técnicas y principios científicos con el objeto de definir un dispositivo, un proceso o un sistema con suficiente detalle para permitir su realización (Norton, 1999) .Además, habría que añadir un aspecto fundamental que sí apuntan Spotts y Shoup (1999) que es el hecho de que es un proceso que debe ir encaminado a cubrir una cierta necesidad.

De las acepciones del diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, Martínez- Val (1993) señala que, si bien la acepción cotidiana es la de traza o delineación de una figura, en el mundo ingenieril se está más cerca de la acepción que se refiere a la concepción del objeto, incluyendo dibujos, cálculos, etc.

El diseño, por lo tanto, es un ejercicio de creatividad e innovación aplicadas en el que s integran numerosas disciplinas y donde es innegable el papel fundamental que juega la experiencia del diseñador.

La gran cantidad de exigencias que rodean al proceso de diseño y la diversidad de las mismas supone que esta tarea multidisciplinar deba plantearse, desde un inicio, con unos claros objetivos convenientemente delimitados, fundamentales para obtener el éxito. Los objetivos pueden dividirse en dos grupos fundamentales (Manchado et al, 2004 ).

• Objetivos tangibles (requisitos técnicos, dimensionales, etc)

• Objetivos intangibles (estéticos, imagen de marca, connotaciones subjetivas, etc).

De esta forma, además de criterios como análisis económicos, estudio de cargas sobre las piezas, facilidad de fabricación, montaje y mantenibilidad, durabilidad, mejora de prestaciones frente a productos ya existentes, mejora de la fiabilidad y seguridad, respeto del medio ambiente, reciclaje, coste, deberán tenerse en cuenta la estética, la imagen de marca, la potenciación de la diferenciación o el incremento de la calidad percibida (no puramente objetiva del producto, que sí sería cuantificable, sino aumentar la calidad subjetiva percibida por el cliente). Además, como puede observarse, el proceso de diseño y sus posibles implicaciones no se acaban en la fabricación y el montaje sino que se extiende a lo largo del ciclo de vida del producto.

La enseñanza del diseño puede resultar, a la vez, estimulante y difícil dada la educación

analítica que han recibido

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