Tecnología Y Cotidianidad

La tecnología en nuestro diario vivir es un tema que ha dado mucho de que hablar en el mundo entero, tanto positiva como negativamente. La tecnología ha forma parte fundamental en nuestras vidas, ha llegado a cambiar el mundo de las comunicaciones, del ámbito laboral, social, e inclusive en los ejércitos con la invención de nuevos armamentos, etc.

Sin embargo muchos nos cuestionamos ¿que tanto nos beneficia tener ese libre acceso a la tecnología? ¿Será que tantos avances tecnológicos llegue a sustituir la labor del ser humano?, ¿ nos estamos deshumanizando debido a la tecnología?. Estas y otras muchas preguntas nos hacemos diariamente cuando nos vemos inmersos en un mundo donde las máquinas nos están gobernando.

Actualmente, al vernos rodeados de tantos alcances tecnológicos, el ser humano debe de reaccionar ante ellos de manera responsable. La responsabilidad ante el uso de la tecnología debe de ser de suma importancia ya que si no la manejamos correctamente puede ser perjudicial, con grandes consecuencias.

Se establece que a los científicos y a los tecnólogos la responsabilidad les es aún mayor, como se menciona en la lectura de Edgar Roy Ramírez (1995) “los científicos y los tecnólogos están en mejores condiciones de evaluar los posibles usos a que será puesto su conocimiento. De ahí su responsabilidad especial y su mayor responsabilidad: por saber más, se les exige más” (Mecanismos de evasión de la responsabilidad, Pág.41). Los creadores de distintos máquinas y objetos tecnológicos, tiene la mayor responsabilidad antes los daños y consecuencias que sus inventos puedan ocasionar. Estos son inclusive responsables por el uso que el comprador le pueda dar, ya que si en primera instancia su creador sabía de lo que esto podría causar y aun así lo realizó, y ese uso o manejo que el usuario le da sea para bien o para mal, su creador tiene la misma culpa que el usuario, un ejemplo claro es el uso de armas.

Quien diseña y fabrica las armas, sabe que su uso y su fin es destruir y hacer daño. Por lo tanto es responsable del uso que le pueda dar quien adquiera el objeto. Muchas veces nos olvidamos de esos detalles de responsabilidad sobre el uso indebido de las tecnologías, y olvidarnos de esto nos hace menos personas, como lo expone Ramírez (1995) “Es urgente, además, la conciencia de que la responsabilidad se sienta como una necesidad y que, renunciar al grado que nos corresponde, es un empobrecimiento” (Mecanismos de evasión de la responsabilidad, Pág.42).

Ante todo esto nuestras acciones con respecto a la tecnología nos refleja quienes somos en realidad, el uso que le demos depende de nosotros y de lo que creamos correcto o no. En la lectura de James Buchanan en Ética, ciencia y tecnología (1999) nos menciona un poco sobre las acciones y nuestra manera de actuar ante ella, “actúa de manera tal que los efectos de tus acciones reflejen el hecho de que no puedes predecir los efectos”. (Los márgenes de la responsabilidad y el imperativo de los desconocido, Pág.86). Muchas actuamos sin pensar en las consecuencias que nos pueden traer, un ejemplo claro es lo que publicamos en Facebook, esa acción tan común que se da alrededor del mundo. Muchas veces desconocemos que existe mas allá de lo que publicamos, hay personas que utilizan este medio como vía para hacer publica su vida privada. No tomar en cuenta que esa información llega a manos de personas no aptas, al igual desconocemos si los comentarios o puntos de vista que publiquemos afectan la vida de las personas que lo pueden ver, al igual que el famoso ciberbullying, donde la vida y los sentimientos de las otras personas se ven afectadas por malas acciones de los demás.

Por otra parte y enfocando más a lo que vivimos en la actualidad tecnológica, el mundo de las comunicaciones ha cambiado de manera radical gracias a la tecnología, comunicarse con alguien que se encuentre a mil kilómetros de distancias es más fácil que hace 10 diez años, con un solo clic socializamos de manera gratuita, rápida y accesible para todos, pero hasta que punto llegamos a hacernos dependientes este tipo de comunicación virtual.

Unos de los problemas sociales que enfrentamos es la falta de comunicación, como lo expone Esther Díaz (2005) “El mundo y la relación entres los sujetos han sufrido cambios profundos en lapsos cada vez mas breves. Esto puede verse en todo tipo de relaciones, tales como las familiares, laborales, educativas o sociales en general”. (Posmodernidad y vida cotidiana, Pág.97) . estamos en una era donde preferimos enviar un mensaje vía red social o aplicaciones en nuestros celulares, que realizar una llamada telefónica o citar a una persona para verse y ponerse al día, como podemos decir estamos a un solo “clic” de entablar una conversación que no sea personalmente. Este tipo de situaciones tienen sus ventajas y a la vez sus repercusiones. Sus ventajas por que nos permite comunicarnos a cualquier hora y momento del día con familiares, amigos que se encuentran a grandes distancias, nos permite mantenernos al día con lo que les suceden y sin necesidad de pagar un solo centavo de mas. También nos ayuda a reencontrarnos con viejos amigos de la infancia que muchas veces hemos perdido contacto, sin embargo el uso de las tecnologías ha llegados a extremos donde la comunicación entre familiares en un mismo hogar se empobrece, esas cenas o almuerzos en familia sin que una persona este con su celular ya no son tan

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