ARQUITECTURA

Uno de los principales objetivos de la Dirección de Arquitectura del Instituto Nacional de Bellas Artes es propiciar la divulgación y puesta en valor del patrimonio artístico inmueble, contando para ello con este espacio de ubicación privilegiada, que ha mostrado obras y autores de gran significado en la historia de la arquitectura contemporánea nacional e internacional. En esta ocasión el Museo Nacional de Arquitectura comparte con el público visitante el talento creativo de especialistas orgullosamente mexicanos en el arte de la iluminación arquitectónica.

Reconocer el oficio en estas experiencias de trabajo que muestran variados diseños lumínicos, en algunos casos, dirigidos a monumentos históricos y artísticos, en otros, a obras representativas de La arquitectura moderna y espacios públicos, permite apreciar los resultados de un ejercicio profesional como parte de una propuesta interdisciplinaria y tecnológica avanzada integrada a proyectos arquitectónicos con alcances distintos.

Identificar y valorar la conservación del patrimonio artístico inmueble también invita al ejercicio de una lectura integral de la obra y su entorno, los materiales y técnicas constructivas, La conformación de sus espacios, el manejo de la escala, la volumetría y La conjugación de todos sus componentes. EL estudio y el manejo de la iluminación natural y artificial, diseñadas de origen en algunos casos, sin duda genera polémica en distintos foros, aunque también resulta una aportación significativa para destacar la memoria arquitectónica y urbana de nuestras ciudades.

La iluminación en la arquitectura y el espacio público evolucionó vertiginosamente durante el siglo XX y, con la aplicación de las diversas innovaciones tecnológicas continúa su desarrollo a toda velocidad en lo que ha transcurrido del siglo XXI. Los elementos, combustibles y dispositivos que se han utilizado para iluminar un lugar de forma artificial dan cuenta de los progresos que la humanidad ha Logrado en este aspecto de nuestra vida cotidiana.

Agradecemos la tenacidad y entrega de Guillermo Plazola y todo su equipo de trabajo, motivador de este proyecto expositivo, por haber apoyado la iniciativa de mostrar en paralelo una breve reseña del origen de algunas de las prestigiadas empresas con presencia y trayectoria en México y en otros países, que ya forman parte de la historia de la iluminación, además de exhibir algunos ejemplos reconocidos internacionalmente de arte objeto como parte integral del recorrido. Enhorabuena.

Difundir una cultura de iluminación arquitectónica profesional, esa es la misión principal de esta exposi¬ción. A partir de la experiencia de diseño de interiores y de la especialización en el ámbito del proyecto arquitectónico, es como surge la idea de mostrar algunos de los principales exponentes de esta disciplina, además de reconocer y agradecer a los catorce diseñadores participantes, que con gran entusiasmo apor¬taron ejemplos de su ejercicio profesional y creativo.

La oportunidad brindada por el Museo Nacional de Arquitectura para presentar por primera vez ejemplos destacados de esta disciplina, es trascendental. Apreciar la iluminación no sólo como una solu¬ción de instalaciones tecnificada, sino como una especialidad artística, con todos Los valores de equilibrio, armonía, unidad y contraste, entre muchos otros. Al proceso creativo en el análisis y diseño al intervenir o realizar una obra arquitectónica, con variables como el diseño de interiores, obras patrimoniales o el paisaje urbano, ahora se suma un concepto: el diseño de iluminación.

¿Cuál es el panorama actual? No más de un 5% de las construcciones proyectadas incluyen en su desarrollo a un diseñador de iluminación. Muchos arquitectos, proyectistas, desarrolladores inmobiliarios, construc¬tores o líderes políticos, aún no identifican que existe esta disciplina y en ocasiones la consideran como un gasto superfluo. Se le asigna un presupuesto muy reducido o bien se considera en la fase final de La obra. Esta situación propicia errores que en muchos casos afecta directamente a los usuarios y a Los dueños de Los inmuebles al aumentar el gasto en el consumo de luz, ineficiencia laboral, inseguridad, entre otros problemas por la falta de atención en tiempo y forma de este concepto.

Pocas firmas reconocidas en el desarrollo de proyectos arquitectónicos incluyen en su programa con un diseñador de la luz en el proceso creativo, incluso lo incorporan desde el inicio del anteproyecto, con resultados muy positivos, revalorando incluso el manejo de la luz natural. Además de los lighting desig-ners, existe toda una industria con aportaciones importantes en la investigación, desarrollo, producción e innovación en las diferentes formas de proporcionar iluminación a espacios destinados a la vivienda, producción, recreación y convivencia.

El futuro es prometedor, filosóficamente, la luz es el todo. Enaltecer sus aportaciones es también parte medular de este homenaje. Incluso llevan este proceso productivo a un nivel artístico, como piezas de museo, integrándolo a La arquitectura con autores geniales. Falta mucho por hacer, disfrutar de una calidad de Luz adecuada debería planearse como parte integral de la arquitectura en todos los géneros de edificios y a todos Los niveles sociales.

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