Alimentacion

Por qué la Alimentación

La alimentación manifiesta una relación cotidiana con el hombre y el medio ambiente. La necesidad de alimentarse, ha condicionado el modo de vida de los seres humanos. Para poder abastecerse de los alimentos necesarios para vivir, el hombre caza, pesca, siembra, fabrica herramientas que se han ido adaptando y modernizando con el paso de los años.

El hombre domesticó los animales y las plantas a tal punto que creó la agricultura. Los métodos agrícolas se han transformado al pasar de los años, permitiendo cada vez más extraer mayores frutos de la tierra para una mayor cantidad de personas. La era industrial marca una nueva etapa en la agricultura caracterizada por un crecimiento sin precedentes, la producción, industrialización y comercialización de productos agrarios, pecuarios, forestales y biológicos y la aparición de una sociedad consumidora a ultranza; lo que cambia obviamente las condiciones de producción agrícola, fomenta el uso de agroquímicos, pesticidas y otras sustancias contaminantes y cambia totalmente la relación del hombre y su entorno.

Hoy en día, el mercado ha creado una uniformización en los modos de consumo, vendiendo los productos que otorguen mayor beneficio económico y que se puedan producir en mayor cantidad. Tan es así, que 30 especies vegetales aseguran 90 por ciento de las calorías consumidas a nivel mundial. Para producir estas variedades se necesita gran cantidad de agua y una diversidad de sustancias contaminantes como pesticidas y fertilizantes que contaminan fuentes de agua, suelos, reducen la biodiversidad y son causales del aumento de enfermedades como el cáncer.

El sector pecuario y sus modos de producción no están exentos de generar repercusiones ambientales y en la salud humana. En dicha producción se ven involucradas sustancias como plaguicidas (para producción de cereales que alimentan el ganado), metales pesados, antibióticos y sustancias toxicas que además de quedar en los suelos y fuentes de agua se transmiten al ser humano por medio de la cadena alimenticia.

Para la producción masiva de carne a nivel mundial, es necesario deforestar bosques y selvas y degradar el suelo, unas de las principales causas del calentamiento global, el atlas de la alimentación en el mundo, dice que sólo para producir un kilo de carne son necesarios 10 mil litros de agua, mientras que para producir 1 kilo de cereal 900 litros bastan.

Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), las emisiones directas de gases de efecto invernadero provenientes de la producción de carne, representan aproximadamente 18 por ciento del total de las emisiones. Mientras que el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) indica que la producción de carne a nivel mundial envía a la atmósfera más gases que producen el efecto invernadero que el transporte automotriz. Lo que quiere decir que es importante cambiar nuestros hábitos alimenticios si queremos contribuir a la conservación de nuestros recursos naturales y de nuestro medio ambiente.

Es evidente que estos contaminantes existentes en las aguas, la atmósfera, los suelos y en el medio ambiente en general, perjudican tanto a los animales como al ser humano que se alimenta de ellos. A la hora de alimentarse, es importante tener en cuenta la procedencia del alimento y la forma de producción, elemento importante a la hora de tener en nuestras mesas un producto de calidad, saludable y libre de sustancias perjudiciales para la salud.

Una buena alternativa a toda esta problemática es comprar nuestros

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