Análisis Institucional

Ficha de Cátedra: René Lourau, Gregorio Baremblitt y el análisis

Institucional

Lourau propone un concepto sociológico del término Institución, en cuanto forma que adopta la reproducción y producción de relaciones sociales en un modo de producción dado. Con los elementos de lo instituido, lo instituyente y el proceso de institucionalización, el concepto de institución se manifiesta como el instrumento de análisis de las contradicciones sociales. Por eso su definición de institución es dinámica y no estática.

Baremblitt otro autor relacionado con el análisis institucional y posterior a Lourau, dice que podemos definir las instituciones como árboles de decisiones, es decir, una serie de prescripciones, prohibiciones y opciones indiferentes, que guían la vida social, de manera consciente o no. Estas prescripciones se plantean de acuerdo con valores que definen lo que es verdadero o falso para la sociedad en cuestión. Según el grado en que tales árboles estén formalizados, las mismas pueden ser leyes, principios, máximas, códigos, normas, pautas o sólo costumbres o hábitos. Cada institución supone otra, necesita de otra y su conjunto es lo que constituye una civilización o sociedad humana. Este autor también plantea que las instituciones funcionan regulando una actividad social humana, pronunciándose valorativamente con respecto a cada una de ellas, señalando lo que debe ser, relegando lo que no debe ser, delimitando lo que es indiferente a esa institución.

Lourau en su definición dinámica de institución plantea tres momentos, lo Instituido, lo Instituyente (como fuerzas en juego) y el proceso de institucionalización.

Lo Instituido: hace referencia a la parte estática propia de cada institución. Este momento podríamos decir que es el más resistente al cambio, pero no deja de ser modificado por la actividad instituyente.

Lo Instituyente: se representa como una fuerza interna y a la vez externa que impulsa al cambio, esto permite que las instituciones no sean estáticas y puedan modificarse a lo largo del tiempo.

El proceso de institucionalización: es el movimiento continuo por el cual lo instituyente va creando o modificando una institución, es decir donde se modifica a lo instituido, pero no sin reservas.

Lo instituyente y el proceso de institucionalización implican una característica dinámica y móvil. Lo instituido, por su parte, transmite la impresión de estable, estática y opera con una cierta resistencia a la transformación. Lo instituido, sin embargo, no sería operante si no estuviese permanentemente abierto a la potencia instituyente. Ambos están en constante lucha y conflicto, lo instituido por permanecer inmodificable, y lo instituyente por cambiar a lo instituido.

El análisis institucional tal como lo plantea Lourau y lo retoma Baremblitt, tiende a designar un método de análisis social  centrado en el concepto de institución. Analizar una institución consiste en desentrañar su objeto, es decir, el conjunto de fuerzas sociales que operan en una situación regida en apariencia por normas universales con vistas a una función precisa.

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