Captar y mantener atención

Los procesos de atención son claves para un buen desarrollo de aprendizaje en el aula, podemos dividir dichos procesos en dos puntos:

• Captar la atención del alumnado

• Mantener la atención

Captar la atención:

Para comenzar a dar una clase, el docente, debe captar la atención de todos los alumnos sin excepción, ya que crea condiciones favorables en el desarrollo de la clase.

Para captar la atención de los alumnos se pueden tomar como referencia una serie de puntos:

I. Crear rutinas de inicio rápido de la clase:

El profesor debe habituar a sus alumnos a un inicio de clase desde el inicio del curso y debe cumplirse siempre:

• Puntualidad

• Preparación previa del material

• Clima de atención generalizada, previa al comienzo de la clase magistral

II. Actividades incompatibles con la distracción:

Si una clase se comienza acelerando la concentración del alumnado y evitando distracciones, se evitará tener que estar continuamente llamando a la atención.

Algunos ejemplos de estas actividades son:

• Hacer preguntas de repaso sobre lo que se explicó la clase anterior

• Requerir actividades prácticas de corta duración

• Plantear interrogantes que provoquen la curiosidad y el interés

III. No comenzar sin la atención de todos:

Un requisito indispensable es asegurarse de que todos los alumnos prestan atención, pero siempre habrá alumnos que no presten estén prestando atención, algunas de las posibles soluciones pueden ser:

• Advertir individualmente a los alumnos distraídos, si es un grupo, la reclamación de atención debe hacerse a líder del foco de distracción

• Callar hasta que se callen, esta práctica no debe usarse habitualmente

• Hacer preguntas sobre la clase anterior a los alumnos distraídos

• Desplazarse a la zona de distracción y mirar fijamente al alumno hasta que se ponga a trabajar

• Proponer actividades calificables en el inicio de la clase

IV. Neutralizar distractores:

Siempre habrá alumnos que busquen elementos distractores para desconectar de la clase, conviene detectar dichos elementos rápidamente para neutralizarlos:

• Ubicación en las ventanas o cerca del pasillo

• Ubicación en zonas de camuflaje

• Mesas contiguas a los alumnos distractores

• Mesas llenas de material potencialmente distractor

Estos distractores deben neutralizarse, solo se permitirán si no comprometen la atención de los alumnos.

V. Distribución de clase que favorezca la atención:

La distribución de las mesas en el aula son un factor muy importante, ya que puede favorecer o perjudicar la atención de los alumnos. El docente debe organizar la clase como crea conveniente para disminuir los factores de distracción, si hay alumnos que se oponen a ello, las soluciones posibles son:

• Aceptar la distribución propuesta por los alumnos, pero condicionándola al grado de atención que se consiga con ella

• Ponerse de acuerdo con otros profesores para establecer la misma distribución en las distintas materias

VI. Cuidar la ubicación de los alumnos:

La ubicación de cada alumno debe estar condicionada a su rendimiento y atención, por ello los alumnos más disruptivos y distraídos deben ubicarse en las zonas de mayor control:

• Primeras filas

• Pupitres centrales

Mantenimiento de la atención

Una vez conseguida la atención de todos los alumnos debemos mantenerla durante toda la clase. Es prácticamente imposible mantener el grado máximo de atención durante toda la clase, pero existen diferentes estrategias para disminuir las distracciones, estas pueden ser:

I. Incrementar la atención positiva y disminuir la negativa:

Esto se consigue mediante el reconocimiento, agradecimiento o aprobación y tiene efectos beneficiosos en el aprendizaje del alumno.

II. Refuerzo diferencial:

Reforzar alternativas incompatibles con la conducta que se pretende extinguir, por ejemplo agradecer la atención en la clase en lugar de reprochar la falta de esta.

III. Diversificar las corrientes atencionales:

En el aula se dan tres tipos de corrientes atencionales:

• Atención de los alumnos al profesor o la tarea

• Atención del profesor a los alumnos

• Atención de los alumnos hacia elementos distractores

La atención de los alumnos al profesor debería ser concentrada y la del profesor a los alumnos debe ser distribuida equitativamente. Para lograr esto el profesor no debe quedarse inmóvil. La diversificación se puede conseguir con el uso de una metodología variada , así se pueden conseguir mayores niveles de atención.

IV. Alternar diferentes modalidades de presentación

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