Cayo

DESARROLLO

Cayo es un hombre casado de edad madura considerado por sus amigos como bueno y exitoso. Está casado con Marucha, con la que ha procreado cuatro hijos. Cayo se acercó recientemente a un amigo para contarle un problema personal.

Cayo estudió administración de empresas, con el tiempo se había hecho de unas acciones de una pequeña sociedad editora de libros, la que administraba él mismo, compartiendo la tenencia accionaria con otros socios minoritarios.

Para atender el negocio, Cayo debe permanecer en él la jornada completa y, con frecuencia los sábados. Las dificultades económicas del país afectaron sumamente la venta de libros y la casa editorial de Cayo no es la excepción, se encuentra ahora en una situación de máxima angustia económica. Todo esto genera en él una continua ansiedad.

En alguna ocasión Cayo se ha visto obligado a retirarse a su casa a descansar por varios días. Pero esto resulta complicado por que lo obliga a abandonar la editorial cuando más necesita estar al tanto y acaba agravando la situación. Al volver de esos días de descanso se siente mejor de momento pero a los tres o cuatro días su situación se vuelve a agravar, y resulta peor, incluso que antes del descanso.

Cayo pertenece a algunas instituciones de beneficencia, y es miembro de dos consejos de otras instituciones de asistencia privada. Su centrado sentido de responsabilidad aunado a las múltiples actividades en que participa le lleva a considerarse no apto para ejercer correctamente alguno de los tres trabajos que tiene que desempeñar. Esto agrava su ansiedad y también le afecta en otras cosas: le falta serenidad de ánimo y se irrita, explota con frecuencia en casa, difícilmente puede descansar por las noches, carece de equilibrio de ánimo, durante el día suele tener apetencias sexuales desordenadas lo que se agrava mucho más durante la noche, o sea, que es fuertemente inclinado a la sexualidad.

Como escape a las presiones y animado por estas apetencias se ha hecho asiduo visitante de un table dance, lugar que visita al menos una vez por semana y la frecuencia aumenta en las temporadas de mayor ansiedad. Estas visitas las hace solo y procura no ser visto.

Cayo es muy sincero consigo mismo respecto a todo lo que le sucede, y es muy consciente de que no es correcto lo que hace yendo al table dance, esas visitas en vez de hacerlo sentirse mejor sólo empeoran la situación.

Al comienzo del año Cayo descansó tres semanas con su familia en Ixtapa Zihuatanejo. Le ayudó mucho todo ese tiempo de ausencia de sus labores acostumbradas y no le asaltó la necesidad de ir a un centro nocturno. Su vida emocional mejoró mucho en esos días pero poco después de haber recomenzado sus labores habituales aparecen las mismas dificultades que afectan su vida diaria.

Cayo hace grandes esfuerzos para que mejore su vida emocional y sus relaciones

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