Claude Levi Straus

Claude Levi Straus- Antropología Estructural

Los mitos que ocupan un lugar tan grande en nuestras investigaciones, no es envocar un pasado anulado y aplicarlo como un enrojado sobre la dimensión del presente , a fin de descifrar en este sentido donde coinciden las dos caras la historia que opone al hombre su propia realidad.

Durkheim fue probablemente el primero en implantar e el hombre la exigencia de especificidad que habría de permitir una renovación de la quecasi todas ellas se beneficiaron. Es imposible discutir acerca de un objeto, reconstruir la historia que lo hizo nacer, sin saber como es; dicho de otra manera, sin haber agotado el inventario en las terminaciones internas.

Contra el teorico el observador debe tener siempre la ultima palabra , y contra el observador el indigina. Los hechos reales no se reducen a fragmentos dispersos, son vividos por hombres y esta conciencia subjetiva, tanto como sus caracteres objetivos , es una forma de su realidad.

Concebimos pues la antropología como el ocupante desde ese dominio de la semiología que la lingüística no ha estado como suyo; y esto en espera de que, cuando menos por lo que a algunos sectores de dicho dominio ¿, se construyan ciencias en el seno de la antropología.

La segunda dificultad es mas seria, pues es posible preguntar todos los fenómenos en que se interesa la antropología social en el carácter de los signos. Las técnicas mas simples de una sociedad primitiva cualquiera adquieren carácter de sistema, analizable en los términos de un sistema más general. Los hombres comunican por medio de simbolos y signos; para la antropología, que es, una conspiración del hombre con el hombre, todo es símbolo y signo que se percata como intermediario entre dos sujetos.

La antropología social seria una ciencia inductiva que como las demás ciencias de este tipo observa hechos formula hipótesis, las somete al control de la experiencia, para descubrir la leyes generales del a naturaleza y la sociedad. Se separa pues de la etnología que se3 esfuerza en reconstruir el pasado de las sociedades primitivas, pero con medios y métodos tan precarios que no puede aportar la menor enseñanza a la antropología social.

La historia de los historiadores no tiene necesidad de que la defiendan, pero tampoco es atacada, es decir que a lado de un tiempo corto existe un tiempo largo; que ciertos hechos participan de un tiempo estadístico e irreversible, otros de un tiempo mecanico y reversible.

Es sabida la función que desempeña la prohibición que desempeña la prohibición del incesto de las sociedades primitivas. Proyectando, si puede decirse así, las hermanas y las hijas afuera del grupo consanguíneo y asignándoles espesos procedentes por su parte de otros grupos, anuda entre estos grupos naturales lazos de alianza.

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