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Consejos Comunales Y Contraloría Social


Enviado por   •  10 de Diciembre de 2014  •  1.823 Palabras (8 Páginas)  •  196 Visitas

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CAPITULO I:

CONTEXTO-PROBLEMA

El hombre es, por naturaleza, un ser sociable. De allí que siempre esté en una permanente búsqueda de asociación con sus semejantes a objeto de facilitar la consecución de fines comunes que serian más difíciles lograr en forma individual. Esta tendencia gregaria lo lleva a formar organizaciones que le permitan crear una base para el pleno desarrollo en los diversos aspectos de la vida ya sean estos económicos, sociales, culturales, tecnológicos o ambientales.

Según la opinión de Robbins (2004, p: 4): “Una organización es la unidad social coordinada deliberadamente, y compuesta por dos o más personas, que funciona de manera continua para alcanzar una o varias metas comunes”. Es decir, una organización viene dada por la asociación entre sujetos con necesidades o fines comunes, que actúan en función de satisfacer esas necesidades o de alcanzar esos fines.

En Venezuela, lo novedoso en materia de organización social, son los Consejos Comunales, quienes han adquirido un protagonismo reflejado en la inserción de nuevos mecanismos de participación a través de lo que se ha denominado constitucionalmente la democracia participativa y protagónica. Este protagonismo ha supuesto el diálogo entre ellos y las distintas organizaciones de un territorio específico, como las instituciones.

En el nuevo diseño curricular bolivariano se contempla el desarrollo de nuevos espacios para la participación de las comunidades y de la sociedad civil. Asimismo, el Proyecto Nacional Simón Bolívar 2007-2013, propone incentivar la creación y el fortalecimiento de vínculos de comunicación entre distintas organizaciones sociales.

Todo lo anterior se plantea en el plano teórico. Sin embargo, durante visitas realizadas al Liceo Bolivariano “Creación Arenas” del Municipio Montes del Estado Sucre, se pudo observar la escaza participación de los Concejos Comunales en las actividades escolares llevadas a cabo por dicho plantel educativo.

Situación ésta que impide concretar un proceso de integración exitosa y productiva. Al respecto, cabe preguntarse: ¿cuáles son los motivos que impiden que se dé una relación efectiva entre la comunidad y los planteles educativos ya que las relaciones entre estos actores tienen que ser de armonía, cooperación, solidaridad, corresponsabilidad, ayuda mutua y trabajo conjunto?. Para ello, es indispensable el fomento de la participación de la comunidad tal como lo establece Rondón (1999), al afirmar que:

La escuela no puede ser una institución que desarrolle y promueva un proceso formativo de calidad a espaldas de la comunidad donde está anclada; pues debe tener participación protagónica en los espacios escolares, y por ende debe promover la integración entre la comunidad y la escuela. (p.3).

Lo que Rondón advierte es que la escuela debe abrirse a la comunidad y ésta insertarse en aquella para contribuir mancomunadamente en la consecución de los objetivos comunes. Es decir, que la escuela no debe funcionar como un ente aislado de la comunidad, de tal manera que se crea autosuficiente y que no requiera de los aportes de su entrono. Para ello se hace necesario asumir la tarea de construir espacios que promuevan la participación e integración de los Consejos Comunales dentro de la estructura organizativa escolar. De allí que los planteles educativos deben estar puertas abiertas a la comunidad, de manera que se manifieste en ellos la fuente principal de participación comunitaria.

Para corroborar esto, se sostuvieron conversaciones con directivos y docentes del Liceo Bolivariano “Creación Arenas”, y al abordar el tema de la participación y los niveles de corresponsabilidad entre la comunidad y los planteles, los mismos manifestaron los esfuerzos que realizan en convocar a los Consejos Comunales para que participen en sus actividades.

Por otro lado, en conversaciones sostenidas con algunos voceros de los Consejos Comunales, se pudo conocer que ellos asisten a las actividades de los mencionados planteles solo cuando tienen el tiempo disponible para acudir, ya que los mismos deben atender también sus labores personales.

Sobre la base de lo antes expuesto, cabe preguntarse ¿Si aun sabiendo que los procesos organizativos escolares son el resultado de un proceso de diálogo permanente entre los distintos sujetos corresponsables de la educación, cómo puede la comunidad participar en ellos si dicho diálogo no se genera en la práctica?.

Es por ello que la institución educativa está ante el reto de generar los espacios de comunicación, encuentros y diálogos de saberes a fin de integrar a los demás sujetos dentro del proceso organizativo escolar. Todo esto pasa por la necesidad de crear también un buen clima organizacional, entendiéndose este como “la calidad del ambiente de la organización que es percibido o experimentado por sus miembros y que influye ostensiblemente en su comportamiento” (Chiavenato, 2002: 345).

Por ello hay que tener presente que si al ser convocados los voceros de los Consejos Comunales al liceo, perciben que el trato es hostil y poco cortes, no les va a quedar ganas de volver a asistir a una nueva reunión, sin embargo si el ambiente es de armonía, respeto y buen trato, lo más seguro es que el diálogo y sus aportes sean más fructíferos. De allí la importancia de mejorar, a su vez, la comunicación entre los colectivos que hacen vida en la institución, ya que una buena comprensión entre los sujetos sociales, contribuirá a la motivación al logro y con ello a altos niveles de rendimiento positivo de los miembros de la comunidad escolar.

Del mismo modo, otro de los aspectos claves que debe observarse en una organización es el liderazgo, ya que por medio de él se puede crear un ambiente donde realmente las personas se motiven y desarrollen mejor sus funciones. Ahora bien, el liderazgo en la relación escuela-comunidad debe ser un liderazgo compartido a fin de que los esfuerzos por alcanzar metas comunes sean mancomunados y no dejen espacio al individualismo ni la arrogancia que lleve suponer que algunos sujetos son superiores a otros y se desvirtúe el trabajo en equipo.

Respecto al liderazgo, algunos directivos y docentes poseen una idea deformada del significado de compromiso entre la escuela y la comunidad,

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