Didáctica De La Narración Y La Disertación

Didáctica de la narración y la disertación

Como sabemos, la comunicación verbal es muy indispensable para todo ser humano pero, para ello requiere de reglas metodológicas correspondientes a la narración y disertación, las cuales se consideran en la enseñanza.

Adaptación a la mentalidad del alumno y de la clase.

Cuando nos comunicamos verbalmente, nuestra idea es hacer que el oyente entienda la información tal cual es, y así el oyente puede activar en su interior del que escucha como representaciones, conceptos, así como los conocimientos que ya tiene, ya que solo de esta manera logrará consolidar las enseñanzas. Es por ello que el educador juega un papel muy importante, que es adaptarse a la mentalidad del alumno y de la clase.

Enseguida se describirán las exigencias parciales que un docente debe cumplir.

Adaptación al nivel de desarrollo del alumno

La principal cualidad que debe considerar un profesor es el nivel de desarrollo del alumno, A base de las experiencias y de acuerdo a la aportación del autor AEBLI, hemos llegado a entender que cuando menos edad tenga el niño, es mas indiferenciadas y globales sus representaciones y conceptos pero, conforme van creciendo se van diferenciando entre sí estas cualidades, se vuelven a conceptos mas simples y, a esto se le conoce con el nombre de unidimensionales, orque aun las operaciones del pensamiento infantil son menos móviles, es decir, a penas pueden cohesionarse para construir sistemas coherentes, mientras que el adulto son mas complejos por lo cual es conocido como multidimensionales.

Por esta razón se considera que un educador su campo de acción es muy amplio y complicado porque además, en clase debe tener en cuenta el estado del repertorio mental del niño y del adolescente, y tender a enriquecerlo flexible y coherente.

Por tanto el maestro debe expresarse de acuerdo al nivel de sus educandos, es decir sin ocupar pal

abras científicas o modernas para que las correlaciones que surjan en las narraciones y descripciones no excedan a la capacidad de los alumnos.

El pensamiento infantil esta vinculado a lo perceptivo- concreto, razón por la cual las descripciones y narraciones del profesor requieren ser más clara y apoyadas en imágenes cuanto más pequeño son los alumnos. De la misma manera se estaca la gran importancia de las vivencias, es decir el profesor tiene la tarea de hacer que el proceso de enseñanza- aprendizaje sea ajustado a las vivencias o experiencias de los pequeños que día con día van enfrentando situaciones diversas, las cuales pueden ser positivas o negativas, pero ambos tienen un fin y un efecto para solucionarlo.

Adaptación a la idiosincrasia de cada alumno

Como futuras educadoras y con las experiencias vividas en las prácticas en los diferentes centros educativos, sabemos que en un grupo de niños existen muchas diversidades individuales tanto como puede ser en carácter como en personalidad pero, no cabe duda que estos factores son los que ayudan a enriquecer el proceso de enseñanza y como se dice es el “espíritu de la clase”, un ejemplo de diversidad podemos mencionar, los diferentes puntos de vista de cada alumno, forma de actuar, de preguntar, entre otros, las cuales el profesor tiene la obligación de tomar en cuenta estas diferencias debidamente porque de lo contrario se obtendrá resultados negativos.

El contacto con la clase

El docente debe mantenerse en contacto psicológico con la clase, también debe darse cuenta muy bien si la clase que brinda ofrece buenos resultados o se va logrando los propósitos planeados, es por ello que debe intentar recurrir al intelecto, la sensibilidad y actitud de cada alumno. Para lograr lo deseado es necesario la palabra, el significado objetivo pero sobretodo basándose a través de las experiencias y conocimientos previos de los niños.

La forma intima de esta transmisión se puede definir acertadamente como empatía. El alumno que escucha al profesor y le observa durante su narración, empatiza con sus movimientos expresivos, con los movimientos del lenguaje y del cuerpo y hasta puede imitarlo interiormente. De este modo se establece una unión entre el narrador y el oyente.

Esta participación empática del oyente en las vivencias del hablante es la forma mas estrecha de comunidad que puede alcanzar la escuela, razón misma que el docente debe ser capaz de empatizar con la clase y así darse cuenta de su actitud mental.

Es así como podemos entender mejor el concepto de “contacto”, entre profesor y clase como expresión conjunta de un proceso sociopsicológico muy complejo, de un fino juego recíproco de empatía entre narrador y oyentes.

Una buena comunicación en la escuela, transmite a los alumnos una actitud mental básica del profesor y se convierte para ellos en algo vivo, es por eso que el maestro debe favorecerla eficazmente, para que el contacto establecido mediante la empatía posibilite la personalidad del profesor y actué de modo inmediato sobre la del alumno y marque en ella una impronta que la configure.

Pero para lograr este contacto es necesario la construcción psíquica del profesor, es decir, debe reservar siempre una parte de su atención para

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