EL EXTRANJERO

El extranjero de Albert Camus es una novela publicada en Francia en 1942 tras al paso de dos guerras mundiales, la dureza y el sufrimiento trascendidos en aquella época se refleja en el personaje principal, Meursault, él es un hombre completamente indiferente, sin sentimientos; a lo largo de la historia no se percibe ninguna actitud de su parte, a él no le importa nada ni nadie, ni siquiera le da importancia a su propia vida.

Meursault, es un hombre con una vida rutinaria, un trabajo con poco futuro y algunos amigos. Al recibir la noticia de que su madre había muerto, la noticia no le sorprendió le fue indiferente (Albert Camus, 1942, Cap. 1 primera parte) diciendo "Hoy, mamá ha muerto. O tal vez ayer, no sé". al llegar al funeral de su madre el no hizo ningún gesto de tristeza, simplemente se sentó, tomó café y observaba a los demás ancianos, como si a quién estuvieran velando no fuera su madre, está actitud ante su madre es la clave para que lo juzguen como un hombre cruel.

El protagonista, por increíble que parezca tiene una amante, María, ella vive enamorada de Meursault, en cambio él solo la desea, no tiene sentimiento de amor hacia ella a pesar de todos los detalles de María, cuando ella le pregunta (Alber Camus, 1942, Cap. 1 primera parte)"Por la tarde, Marie vino a buscarme y me preguntó si quería casarme con ella. Le dije que me daba igual y que podíamos hacerlo si era su deseo.”

Uno de los acontecimientos más relevantes dentro de la historia es cuando Raymond, amigo de Meursault lo invita a él y a María a la playa, para esto, Raymond es perseguido por unos árabes, uno de ellos hermano de una de sus novias, después de un enfrentamiento, Meursault se encuentra solo y frente a él uno de los árabes lo amenaza con un cuchillo, Meursault tenía un arma de Raymond la cual le quitó para evitar que disparara, pero Meursault fue el que disparo al árabe junto con cuatro tiros más.

Meursault es detenido y termina en un interrogatorio por un juez, como es clásico del personaje principal se muestra indiferente ante la situación, no le interesa tener un abogado y la indiferencia de su respuesta (Albert Camus, 1942, segunda parte)"Lo maté porque me irritó el reflejo del sol que de la hoja de su cuchillo me daba en los ojos”, molestan al juez. El juicio continúa y todas las personas a las que Meursault conoce son llamadas para testificar llegando a la conclusión de que Meursault es un hombre malo, el tema del asesinato queda por un lado, Meursault es juzgado por no haber llorado en el funeral de su madre y haber comenzado una relación al día siguiente de su entierro. (Albert Camus, 1942, segunda parte) "¿Se le acusa, en fin de haber enterrado a su madre o de haber matado a un hombre?... Pero el fiscal se levantó de nuevo, se envolvió en su toga y afirmó… Sí -exclamó con fuerza- acuso a este hombre de haber enterrado a una madre con un corazón

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