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El Bullying

Denissepowerpink29 de Mayo de 2012

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Introducción

La escuela es uno de los lugares más importantes en el desarrollo de una persona, en ella se relaciona con personas de su misma edad y se aprende las bases para el futuro.

Desafortunadamente, de dos décadas a la fecha, esta situación ha cambiado por el conocido “Bullying o acoso escolar” que hoy en día aqueja a la población estudiantil, no solo de nuestro país sino del mundo entero.

Esta situación ha cambiado el orden de las cosas, ya que en la mayor parte de las escuelas encontramos que la figura de liderazgo ya no se relaciona con el cumplimiento, el orden y la búsqueda de sobresalientes notas académicas, sino por el contrario encontramos que el líder actual es el que mayormente propicia el desorden, la agresividad y la grosería; poniendo a los alumnos sobresalientes en el papel de los malos; llamados regularmente “nerds” o matados”.

Los medios de comunicación, causante principal de esta conducta, influyen de manera negativa, proporcionando modelos de conducta erróneos para la juventud mexicana, que siempre está en búsqueda de un modelo a seguir. Por lo consiguiente, tenemos una sociedad quebrantada que lo único que busca es el beneficio personal.

Es preocupante esta situación, nuestra sociedad se desmorona poco a poco, si nosotros como jóvenes no cambiamos nuestra actitud y estas conductas continúan, ¡Qué nos deparara el futuro!; si los jóvenes somos el nuevo porvenir de nuestro país.

Esta problemática nos ha impulsado a realizar este trabajo; es importante que nuestra generación conozca las consecuencias que el Bullying trae a nuestra sociedad y que hagamos algo al respecto. ¡Es tiempo de actuar y no quedarse de brazos cruzados!

¿Qué es el bullying?

La palabra "Bullying" proviene del vocabulario Holandés, que significa acoso.

El bullying es cualquier tipo de acoso psicológico, verbal o físico producido de forma reiterada a lo largo de un tiempo determinado o una forma de comportamiento violento, intencional, dañino y persistente, que se puede ejercer durante semanas o incluso meses, y supone una presión hacia las víctimas que las deja en situación de completa indefensión. En toda situación de bullying hay siempre un abuso de poder y un deseo de intimidar y dominar.

El bullying es también un fenómeno que normalmente ocurre entre dos (o más) iguales, la semejanza más común reside en la edad. Estadísticamente, el tipo de violencia que predomina es el emocional, y normalmente se da en los salones y patios de las escuelas.

En México el interés por este problema es aún más reciente, al grado de que no se cuenta con bibliografía en la que se reflexione sobre las particularidades del bullying en nuestro país.

Tipos de bullying

Los protagonistas del "Bullying" escolar suelen ser niños o niñas que están entrando a la adolescencia, es decir entre los 12 y 13 años.

Los abusadores pueden ser niñas o niños, pero normalmente predominan los hombres.

1.- Bullying Físico

El bullying físico incluye toda acción corporal como golpes, empujones, patadas, formas de encierro, daño a pertenencias, etc.

El acoso físico es la forma más fácilmente se identifica, ya que en la mayoría de los casos deja huellas corporales.

El incremento de edad, tanto del agresor, como de la víctima, es un ingrediente muy importante en el bullying físico, y tienen repercusiones dignas de atender.

Según se van desarrollando los jóvenes, las agresiones se vuelven más peligrosas, pues se llevan a cabo con mayor fuerza y con una intencionalidad más explícita.

2.- Bullying verbal

En este grupo se incluyen acciones no corporales, pero igualmente dañinas, como poner apodos, insultar, amenazar, generar rumores, expresar dichos raciales o sexistas con la finalidad de discriminar, difundir chismes, realizar acciones de exclusión, bromas insultantes y repetidas, etc.

Es necesario recordar que la opinión de los padres en edades que van desde los 4 hasta los 14 ó 15 años ya que los ayudarán a formar la identidad y personalidad.

Éste tipo de bullying es el más utilizado por las mujeres en la medida en que se van desarrollando hacia la adolescencia.

3.- Bullying gesticular

Estas agresiones son las más difíciles de detectar, ya que pueden consistir en una mirada, una señal obscena, una cara desagradable, un gesto, etc.

Se trata de formas de agresión, amenaza o exclusión que por lo común se llevan a cabo a espaldas de cualquier persona que pueda advertir la situación y, en consecuencia, ayudan a quien expresa estos gestos y señas a permanecer en el anonimato.

Este tipo de bullying se utiliza frecuentemente para subrayar, reforzar o resaltar acciones llevadas a cabo con anterioridad, así como para mantener latente la situación de amenaza.

4.- Cyberbullying

Este tipo de bullying, es un nuevo fenómeno, derivado de los grandes avances tecnológicos. Tanto internet como la telefonía celular surgieron como canales de comunicación que en muy poco tiempo se han vuelto necesarios en todo el mundo. Gracias a éstos una gran cantidad de información y productos están a nuestro alcance.

Sin embargo estas herramientas excepcionales también dan la oportunidad de enviar mensajes desde el anonimato, sin que el emisor del mensaje se vea en la necesidad de dar la cara, de asumir la responsabilidad de sus palabras.

Específicamente el Cyberbullying se da a través de teléfonos celulares con llamadas y mensajes de texto, y por internet, con correos, por medio del chat, o en las redes sociales. Normalmente los mensajes de cualquier tipo incluyen amenazas, difamaciones, groserías y diferentes formas de comunicación, agresivas o violentas.

Cualquiera de las formas de bullying descritas se puede manifestar de forma directa o indirecta, dependiendo de que la víctima se dé cuenta inmediatamente o no de la agresión.

Cuando hay burla, apodos, gritos, amenazas, etc., se considera como una agresión directa, pero cuando hablamos de influir en otros para que se burlen, excluyan o critiquen a un tercero elegido como blanco de las agresiones estaríamos ante formas indirectas de agresión.

El agresor

En primer lugar está el agresor, cuyo papel es de fácil detección ya que es la persona o personas que realizan el acto agresivo, es decir pegan, insultan o intimidan. A pesar de lo que la gente pueda pensar, el agresor tiene razones emocionales para realizar el acoso, tales como problemas familiares, etc.

En la escuela, los agresores generalmente tienen un gran número de amigos y seguidores. Físicamente suelen ser más y grandes y fuertes que los demás, lo que contribuye a que se fomente en ellos una imagen de superioridad. Además de estas características hay que agregar que son impulsivos, con escasas habilidades sociales, con baja tolerancia a la frustración, y con dificultad para cumplir normas; relaciones negativas con relación a los adultos y un bajo rendimiento escolar.

Están de acuerdo con las creencias que llevan a justificar la violencia y la intolerancia en distintos tipos de relaciones, incluidas las que se producen entre pares, manifestándose igualmente como más racistas, xenófobos y sexistas, es decir, que tienden a identificarse con un modelo social basado en el dominio de los unos y en la sumisión de los otros.

Tienen dificultades para colocarse en el lugar de los demás. Identifican el término justicia como «hacer a los demás lo que te hacen a ti o lo que crees que te hacen», orientación que puede explicar su tendencia a vengar ofensas reales o supuestas.

Su frecuencia es mayor en la adolescencia temprana (de 13 a 15 años), en los cursos de educación secundaria obligatoria, en los que se experimenta una mayor dependencia del grupo de compañeros, en aquellos que suelen resultar más difíciles para el profesorado de secundaria en el contexto evaluado en este estudio.

La víctima

En segundo lugar está la víctima, sobre la cual se realiza el abuso. Las víctimas del acoso escolar o bullying, suelen ser niños que no disponen de recursos o habilidades para reaccionar, poco sociables, sensibles y frágiles. Ante un acoso constante, lógicamente se sienten angustiados, tensos y con mucho miedo a tal grado que en algunos casos puede llevarlo a consecuencias devastadoras. Dentro de la víctima se destaca la víctima pasiva y la activa.

Víctima activa

La víctima activa sufre de una situación social de aislamiento e impopularidad, tiene una tendencia a actuar de una manera impulsiva muchas veces inadecuada a la situación, empleando conductas agresivas, irritantes y provocadoras,

Con un rendimiento escolar peor que el de las víctimas pasivas, suelen ser escolares hiperactivos y frecuentemente son chicos.

Víctima pasiva

La víctima pasiva al igual que la activa, tiene una situación social de aislamiento, no tiene un sólo amigo en el colegio, tiene problemas de comunicación y baja popularidad. Muestra una conducta muy pasiva, miedo a la violencia, vulnerable, ansioso y con poca autoestima. Se culpa por la situación y se niega a reconocerla. Generalmente están muy sobreprotegidos por su familia.

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