El acto fotografico La fotografía considerada como espejo de lo real

1.- RESUMEN DE LOS TEMAS PRINCIPALES DEL LIBRO. (pag.2)

• La fotografía considerada como espejo de lo real.

• La fotografía considerada como transformación de lo real.

• La fotografía considerada huella de lo real.

2.- SINTESIS DEL SEMINARIO. . (pag.4)

3.- QUE OPINION Y ANALISIS TIENE SOBRE EL LIBRO. . (pag.7)

1.- RESUMEN DE LOS TEMAS PRINCIPALES DEL LIBRO

* La fotografía considerada como espejo de lo real.

El efecto de realidad ligado a la imagen fotográfica se atribuyó a la semejanza existente entre la foto y su referente. La fotografía al comienzo es percibida como una análogo de lo real. Es por esencia mimética. Era considera como la imitación más perfecta de la realidad. Según los discursos del siglo XIX, esa capacidad mimética la obtiene de su propia naturaleza técnica, su procedimiento mecánico, que permite hacer aparecer una imagen en forma automática, objetiva, sin que intervenga la mano del artista.

Así para Baudelaira la fotografía es un simple instrumento de una memoria documental de lo real y para el discurso de la época el arte es una creación imaginaria, expresión humana y la fotografía es un instrumento fiel de reproducción de lo real, una técnica.

* La fotografía considerada como transformación de lo real.

Pronto se manifestó una reacción contra el espejo fotográfico. La realidad fue considerado una pura “impresión”, un simple efecto; la imagen fotográfica no es un espejo neutro sino útil de análisis, de interpretación, incluso de transformación de lo real y culturalmente codificada, que desplaza el realismo hacia lo que podría llamarse una verdad interior. En el Siglo XX esta argumentación será reactivada con vigor, por ejemplo Rulf Arnheim en su obra Film as Art presenta las diferencias de la imagen fotográfica y la realidad: la imagen emerge del ángulo de visión elegido, por su distancia respecto al objeto y por el encuadre y por último aísla un punto preciso del espacio-tiempo y es puramente visual. A esta mirada desde la técnica fotográfica, otros autores postulan que la fotografía fija lo real no sólo por el uso deliberado de determinadas técnicas, sino que es el resultado de una elección arbitraria de la realidad; retiene cualidades visuales de un instante desde un punto de vista único. Por el trabajo (codificación) que implica en el plano artístico, la foto pasa a convertirse en reveladora de la verdad interior y no de la verdad empírica. La foto sería una codificación de las apariencias por convención (por lo que simboliza).

* La fotografía considerada huella de lo real.

Aquí la fotografía es considerada una representación por continuidad física con su referente (INDEX). Implica que la imagen inicial está dotada de un valor absolutamente singular o particular, puesto que está determinada por su referente y sólo por éste: huella de una realidad.(que se produce en el instante del registro). El principio de la huella marca un momento del proceso fotográfico, antes del registro natural del mundo sobre una superficie sensible hay gestos culturales codificados que dependen de opciones humanas (elección tema, cámara, ángulo de visión etc.) que culmina con el disparo y después revelado y formas de difusión. Es durante el momento de la exposición que la foto puede considerarse un acto-huella.

Hay varios trabajos teóricos contemporáneos que nos hablan de la fotografía como huella de la realidad: Benjamín, Barthes, D. Roche, y Rosalind Krauss, entre otros. En este mismo sentido reflexiona Dubois que considera a la fotografía, además de una huella de lo real, una categoría de pensamiento.

La imagen fotográfica aparece de entrada simple y únicamente como una huella luminosa, mas precisamente como un rastro, fijado sobre un soporte bidimensional.

Profundizando en esta posición teórica, Dubois llega a la conclusión de que la

2.- SINTESIS DEL SEMINARIO.

Si hay en la fotografía una fuerza invisible, si en ella existe algo atribuible al orden de la gravedad absoluta y es precisamente en lo que este libro quisiera insistir, es exactamente esto, que en la fotografía no podemos pensar en la imagen aislada, desmembrada del acto que la ha hecho surgir. La fotografía no es sólo una imagen (el producto de una técnica y de una acción, el resultado de una hacer y de un saber hacer, una imagen de papel que se mira sencillamente en su soporte de objeto terminado), es también, y de modo especial, un verdadero acto icónico, una imagen si se prefiere, pero trabajando, algo que no se puede concebir sin sus circunstancias, sin el juego que la anima, sin haber hecho literalmente la prueba: algo que es a la vez y consustancialmente una imagen-acto. La fotografía, en definitiva, como inseparable de todo su enunciado, como experiencia de imagen, como objeto totalmente pragmático. De aquí se deduce hasta qué punto este medio mecánico, óptico-químico, supuestamente objetivo, del que a veces se ha dicho en el plano filosófico que se efectúa sin el concurso humano, implica ontológicamente la cuestión del sujeto, y más concretamente del sujeto en acción

La fotografía como espejo de lo real se basa en el siclo XIX, y nos fijamos que al ver algo que existe busca identificar que es un registro, y es objetiva, es algo tal cual es la realidad.

Al hablar de La fotografía considerada como transformación de lo real, estamos hablando del siglo XX. Nos da a entender que la fotografía es mucho más compleja de lo que nos imaginamos influye el contexto del cómo y por el cual se crea la imagen y el cómo se está montando, el cómo influye el fotógrafo a como se va a interpretar la imagen, las transformación que se expresa, es un lenguaje muy distinto.

La fotografía considerada huella de lo real tiene un momento y contexto de cómo se desarrolla, que no existe un antes y un después. Hay un factor que no está en la era digital si no que en lo análogo y que nos deja una huella en la emulsión.

Hay varios trabajos teóricos contemporáneos que nos hablan de la fotografía como huella de la realidad:

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