Esto no es un documento real

Con el análisis de los documentos y el video logro entender que la globalización nos ha llevado a la perdida de nuestro fundamento humano y social, y por esto nuestro desarrollo ha dejado de ser humano.

En general, la globalización se ha encargado de dividir a la población en dos grandes bloques: el de los beneficiarios y el de los excluidos, dando paso a una sociedad dual, donde la gran mayoría termina perdiendo. Ensanchando más y más la distancia entre la capa más alta y la más baja de la sociedad, al tiempo que se deteriora la posición de las clases medias. También, ha dado paso a la aparición de un estado débil, donde el mercado mundial y el mundo mediático parece ser el nuevo soberano.

Con la globalización económica y la soberanía del mercado, el Estado parece haber entrado en una fase de debilitamiento tal, que más bien parece cerca de su desaparición como elemento autónomo, corrector y garante de un orden. Más bien ha dejado paso al libre juego de la economía, como al poder verdaderamente soberano, pues ha sido incapaz de controlar y regular las actividades económicas. Al mercado se le ha concedido tanta soberanía que ni el propio estado debe interferirlo, ni adoptar alguna medida contra su libre juego. Se impone entonces la política de desregulación, de privatización y liberalización, contracción del gasto público, disminución de la fiscalidad.

Como también lo expresa Osvaldo Sunkel (2007) “Se crea una estabilidad económica superficial y frágil, aumenta o persiste la pobreza y existe una creciente tendencia a la exclusión social, todo ello en agudo contraste con una extraordinaria concentración del ingreso y la riqueza. Se produce una dicotomía en la calidad de los servicios entre quienes acceden al sistema privado y los usuarios del sistema público, cuya calidad empeoró por el debilitamiento del Estado. Asimismo, se fomenta desmesuradamente el consumo mediante una publicidad desorbitada y el crédito fácil, que genera un endeudamiento angustiante. Si bien se logran ciertas mejorías en los niveles de consumo, por otra parte, se deteriora la calidad de vida por el aumento, intensificación y desprotección de las jornadas de trabajo, la necesidad de tener varias ocupaciones, las angustias de equilibrar unos ingresos difíciles de obtener con demandas en constante multiplicación.”

De alguna u otra manera, la generación de diferentes bloques de países para el control y el dominio del mercado ha dado paso a un mundo de relaciones más abiertas y de fronteras permeables. Los bloques trabajan con la finalidad de

producir para vender e intercambiar dentro de las políticas mundiales, pero el hombre comienza a verse más como un objeto de producción y los otros no son más que un objeto para alcanzar sus deseos, en vez de ser aquello que lo pone en contacto con lo real; teniendo en cuenta que, el fundamento del hombre es la realidad y esta sucede en contacto con el otro, inserto en ella y como parte de ella, de ella viene cada vez que siente, piensa, imagina o desea con verdad.

En conclusión, la globalización, como dictador económico, comienza por la reducción del otro a una cosa, calculando a los hombres exclusivamente según su valor del mercado, de ahí la perdida de fundamento. En nombre de la modernización estamos creando sociedades disfuncionales bajo una cultura deshumanizada donde el hombre no es más que un elemento del mercado, generando comportamientos patológicos de violencia y competitividad, llevando entonces, al desarrollo humano a perder toda característica y necesidad social, individualizando al ser y de una u otra manera, desviándolo de su naturaleza humana, el espíritu de trascendencia ha sido devorado por las ansias de una reducida respuesta instrumental, técnica y vacía que conforma la triada producir-consumir-competir.

Es por esto que, “el desarrollo humano no puede fraccionarse, su vocación

...