FIN DE LA ABUNDANCIA

El Fin de la Abundancia 

ÍNDICE

Introducción           3

Desarrollo           6

Conclusiones           8  

Bibliografía         10

INTRODUCCIÓN

En la actualidad, existe una seria preocupación referente al suministro de alimentos para la población de los países del mundo, debido a que para el año 2025, se  alcanzará una población de 8,000 millones de habitantes, quienes demandarán una mayor cantidad de alimentos.

Esta preocupación surgió por la gran cantidad de personas expuestas a la pobreza, originadas no por la falta de alimentos, sino por su consumo excesivo en la última década. De la misma manera, por el incremento acelerado en el costo de los alimentos, ya que entre los años 2005 y 2008, aumento tres veces el valor del trigo y el maíz, y cinco veces el del arroz, lo cual origino conflictos sociales en varios países.

Desafortunadamente, el alza de precios se dio en un año en que los agricultores obtuvieron una cosecha histórica en cereales, dejando visible que la población del mundo consume más alimentos de los que produce; según Jachi Von Braun, Director General del Instituto Internacional de Investigaciones sobre Políticas Alimentarias, considera que el crecimiento anual de la actividad agrícola es de uno a dos por ciento, el cual es demasiado bajo para cubrir la demanda de alimentos en proporción al crecimiento de la población.

Por otra parte, en opinión de Thomas Robert Malthus, en su ensayo sobre el Principio de la Población de 1978 dijo: “La capacidad de crecimiento de la población, es infinitamente mayor que la de la tierra para producir alimento para la humanidad”, debido a que la población aumenta en base en una tasa geométrica, y se duplica cada 25 años, siempre y cuando no encuentre obstáculos, mientras que la producción agrícola se incrementa a una tasa aritmética, de manera lenta y ocasionando una trampa biológica en donde la humanidad no podría escapar, es decir: “La dificultad para conseguir alimento ejercerá sobre la población una fuerte y constante presión restrictiva” (Bourne Jr, 2009). 

En la búsqueda de soluciones a este problema, a mediados de la década de los sesenta, en India, el Biogenetista Estadunidense Norman Borlaug, trabajando junto con investigadores indios consiguieron llevar sus variedades de trigo de alto rendimiento al Punjab y para el año 1970, los agricultores de esta nación casi lograron triplicar su producción con la misma cantidad de trabajo, dando origen a la Revolución Verde.

Estas nuevas variedades de cereales fueron un avance sorprendente, debido a que eran distintas a cualquier variedad vista antes, sin embargo subsistía siempre y cuando se le suministrará agua en abundancia y fertilizantes sintéticos, además de no interactuar con malas hierbas o insectos. Con el fin de impulsar la producción, el gobierno de la India subsidió perforaciones de pozos entubados para el riego, canales, fertilizantes; y además proporciono a los agricultores electricidad gratuita para bombear agua, obteniendo como resultado que las nuevas variedades de trigo se difundieran rápidamente por toda Asia, modificando las prácticas agrícolas tradicionales de millones de agricultores (Bourne Jr, 2009).

Sin embargo, tantos años de riego intensivo, fertilización y plaguicidas no fueron benéficos con los limosos campos grises del Punjab, ni tampoco con las personas; estos métodos, trajeron serias consecuencias en la salud y en el deterioro de los ecosistemas en los campos de cultivo; terminaron por afectar las capas freáticas y echaron a perder miles de hectáreas de tierras productivas por la salinización y anegación de los suelos, al mismo tiempo de la aparición de cáncer en la población, principalmente en los jóvenes, posiblemente derivado del agua contaminada y los plaguicidas.

A lo anterior se le suma el problema de los suicidios, derivado de las deudas generadas por los altos costos de los fertilizantes y plaguicidas, lo cual provocaron que los agricultores Punjabíes bebieran plaguicidas o se colgaran en sus campos.

Dado que la población mundial aumenta vertiginosamente y a mediados de este siglo alcanzará los 9,000 millones de personas, los expertos aseguran que hace falta repetir los logros obtenidos y duplicar la producción actual de alimentos hacia 2030.

DESARROLLO

Derivado de los antecedentes expuestos en la introducción, los especialistas en cultivos y agricultores piensan que la solución de la crisis alimentaria actual está en una segunda Revolución Verde, la cual, estará basada en los nuevos conocimientos sobre genética, ya que los nuevos adelantos en esta materia, conducirán a la formación de variedades nuevas con mayor rendimiento, menor necesidad de fertilizantes y mejor tolerancia a la sequía, permitiendo que para 2030 con la ayuda de la biotecnología se duplique el rendimiento en los cultivos fundamentales de maíz, algodón y soya.

Así mismo se debe evitar la falta de alimento en el mundo, como lo ocurrido en Bangladesh referente a que cada año necesita más alimentos para dar a su población, y al no tener suficiente abasto de mismo, provoco 35 millones de personas hambrientas, considerando además el aumento de precios, las inundaciones y ciclones, que contribuyeron a su problema, lo cual no ha sido considerado por ningún especialista (Bourne Jr, 2009).

Sin embargo, el modelo económico de potencias mundiales establecido, permite la disminución del los precios, pero permanecen los problemas referentes a reservas bajas de alimentos, población creciente desmedidamente, cambios climáticos extremos y mayor escasez de agua, provocando reducciones en las cosechas en gran parte del mundo, y dando inicio a lo que algunos científicos denominan: “Crisis Alimentaria Perpetua”.

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