FRACASO ESCOLAR EN ADOLESCENTES

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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE NUEVO LEÓN

FACULTAD DE PSICOLOGÍA

NORMALIDAD Y PATOLOGÍA PSICOLÓGICA

PRODUCTO INTEGRADOR DE APRENDIZAJE

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FRACASO ESCOLAR EN ADOLESCENTES

LIC: Pedro Cortines Hernández

GRUPO: 006

NOMBRE DEL ALUMNO: Mariana Suárez Galván

MATRICULA: 1947041

FECHA DE ENTREGA: 11 de noviembre del 2021

CONTENIDO

INTRODUCCIÓN        3

FRACASO ESCOLAR EN LA ADOLESCENCIA        3

ESTADÍSTICAS        7

CONCLUSIONES PERSONALES        8

BIBLIOGRAFÍA        9

INTRODUCCIÓN

El fracaso escolar genera malestar y desigualdad, cuya repercusión trascienden los muros de la escuela. El rendimiento escolar en los distintos niveles educativos es el resultado de una constelación de factores. Éste es objeto de frecuente preocupación, pues los datos que de vez en cuando se publican reflejan las altas tasas de insuficiencia de los alumnos. En algunos casos, las cifras de fracaso superan el 30% de los alumnos de enseñanza secundaria.

FRACASO ESCOLAR EN LA ADOLESCENCIA

Fracaso escolar, es toda insuficiencia detectada en los resultados alcanzados por los alumnos en los centros de enseñanza respecto de los objetivos propuestos para su nivel, edad y desarrollo, y que habitualmente se expresa a través de calificaciones escolares negativas. El problema está en que se compara educación exclusivamente con rendimiento, cuando nosotros como psicólogos, abogamos por integrar dentro de la educación también el desarrollo personal, ético, afectivo, social y además el intelectual.

En pocas palabras se puede concluir que el fracaso escolar también se relaciona con el fracaso social, porque de un modo u otro la disfuncionalidad afecta al conjunto de la sociedad.

La adolescencia es una de las etapas más complicadas de la vida de cualquier persona y por lo tanto la secundaria se convierte, a veces, en una cuesta arriba constante donde el fracaso escolar es el protagonista. Algunos adolescentes entre los 12 y los 16 años tienen la cabeza en cualquier parte menos en los estudios. 

Sin embargo, esta etapa de la educación es una de las más importantes. La carga de estudio es muy fuerte y la presión de muchos adolescentes es alta. Aprobar todas las asignaturas es algo que para muchos se vuelve algo imposible y el fracaso escolar puede aparecer. El fracaso y abandono escolar suelen ir de la mano.

En el fracaso escolar se incluyen a los alumnos que tienen un bajo rendimiento académico y no logran la adquisición de un conjunto de conocimientos mínimo.

Este es uno de los grandes temores de cualquier alumno y sus padres. Cuando nos enfrentamos a malos resultados queremos buscar rápido soluciones para prevenir el fracaso escolar. 

Existe un denominador en común en todos los casos de fracaso escolar: la insuficiencia de los resultados escolares alcanzados; es decir; se habla de fracaso para referirse al abandono, retraso o dificultad de aprendizaje. Este puede medirse mediante pruebas de rendimiento y/o calificaciones.

La tasa de fracaso escolar aumenta con el nivel de obligatoriedad, lo que explica que este problema afecte más a los alumnos adolescentes que a los niños.

El éxito y el fracaso escolar presentan una dimensión subjetiva, pues algunos alumnos pueden sentirse fracasados si únicamente obtienen una calificación aprobatoria y no alcanzan el anhelado resultado elevado o sobresaliente.

Frecuentemente los logros escolares se asocian a la potencialidad laboral y económica de un país.

El sociólogo Perrenoud (1990), enfatiza que el éxito y el fracaso escolar son construidos, señala que las clasificaciones escolares prefiguran jerarquías vigentes en la sociedad con arreglo a modelos de excelencia que se les imponen a los alumnos.

Al estudiar, en el rendimiento académico se pasan por alto los factores extra cognitivos que se pueden contribuir, aun sin pretenderlo, a desenfocar la cuestión y a generar peligrosas discriminaciones individuales y colectivas.

El conocimiento de la potencialidad intelectual de cada alumno, en un marco amplio que también comprenda otras variables, se torna labor necesaria para orientarle mejor educativamente.

Cuando el fracaso escolar aparece es síntoma de muchas cosas que están mal. Ir corrigiendo una por una es algo que puede tardar muchísimo en arreglarse. La autoestima, la falta de concentración, el valor del esfuerzo, la capacidad de aprendizaje, entre otras. Son cosas que no cambian de la noche a la mañana. 

Aunque sea algo que tardará mucho tiempo en cambiar es importante no desfallecer. Por eso remontar una situación de fracaso escolar es tan complicada. Será mucho tiempo y de forma muy intensa. Sin embargo, superarse de una mala racha es posible y hasta los grandes genios han pasado épocas en las que no fueron grandes estudiantes. 

La posición interaccionista piagetiana impide considerar el conocimiento como reductible al sujeto y sus capacidades.

Valoración del adolescente con fracaso escolar:

Los exámenes de salud, los test de valoración del desarrollo y la maduración, el análisis del entorno socio-familiar, los resultados académicos y el nivel de conocimientos son las bases para analizar y valorar a un adolescente con fracaso escolar:

• Exámenes de salud: descartan patologías del sistema nervioso central, malformaciones y trastornos neurológicos, alteraciones de la vista, hipoacusias (pérdida de capacidad auditiva) o trastornos del habla.
• Test de inteligencia: mide el cociente intelectual. 
• Maduración: se valora la psicomotricidad, lateralidad, nivel de maduración psicológica e intelectual.
• Entorno familiar: hay que estudiar el tipo de familia o tutela, nivel económico, la situación laboral de los padres, si se trata de familias monoparentales, si ha habido divorcios o el entorno está desestructurado. 
• Nivel de conocimientos: se mide la capacidad de atención, si hay dificultad para el aprendizaje, las habilidades, etc. 

Causas del fracaso escolar:

Existen diversas causas del fracaso escolar, aunque en la mayoría de las ocasiones no se debe sólo a una de ellas sino a una combinación de factores; por ejemplo:

• Falta de interés por el estudio y poco esfuerzo por parte del alumno: la falta de interés en ocasiones se produce como consecuencia de una falta de motivación o por un temor al propio fracaso; ejemplo: “sé que voy a suspender y por lo tanto no estudio”.
• Situaciones especiales familiares: la enfermedad o fallecimiento de algún familiar, una separación de los padres o un nuevo matrimonio de la madre o padre, es cuando los adolescentes ven su desarrollo emocional afectado y por lo general afecta también al rendimiento escolar.
• Por el tipo de educación que el niño recibe de sus padres: cuando son demasiado exigentes y les imponen una disciplina exagerada se les crea inseguridad y se sentirán frustrados al no conseguir lo que los padres esperan de ellos.
• Enfermedades de tipo neurológico: dislexia, disgrafía, trastornos del déficit de atención e hiperactividad, etc., que requieren la ayuda de un profesional especializado.
• Enfermedades de tipo sensitivo: disminución de la capacidad auditiva o de la visual.
• Falta de madurez: influye en la atención, memoria o asimilación de conceptos.
• Trastornos psicológicos: fobias, miedos acusados, temores; lo que puede desencadenar en problemas de socialización y dificultades para integrarse en el centro escolar.
• Acoso escolar: puede ser físico, verbal, relacional, a través de las redes sociales.
• Dificultades para concentrarse.
• Adicciones: pueden aparecen en la etapa de secundaria y no solo respecto al alcohol y drogas, sino también a las nuevas tecnologías.

Prevención del fracaso escolar:

Prevenir el fracaso escolar es una cuestión multidisciplinar en la que entran en juego el bienestar cognitivo, psicológico, físico y social. Como indica Wang and Degol (2016) “el clima escolar es un constructo multidimensional que representa prácticamente todos los aspectos de la experiencia personal”.

El papel que juega la familia es fundamental. Los padres deben mostrar interés por el colegio de sus hijos, por sus amigos y profesores. Deben procurar que sus hijos hagan bien sus tareas y que sean ordenados y disciplinados a la hora de estudiar.

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