Formacion Ciudadana

TEMA 1 RESPONSABOLIDAD Y MORAL

La palabra responsabilidad proviene del latín respondere. Este término corresponde al campo jurídico. Con él, se requiere significar la defensa de una cosa en un juicio o la justificación de una acción que ha sido puesta en entredicho. En el siglo XVIII, el concepto de responsabilidad se usaba cuando alguien ocasionaba un perjuicio a otro y debía asumir la reparación del daño o un equivalente fijado por las leyes y el juez.

El uso en el ámbito jurídico no es el único, pues también podemos hablar de una responsabilidad moral, que se diferencia del anterior porque es un fenómeno subjetivo de la conciencia moral. Esto significa que el sujeto que actúa se siente responsable de su acción sin que haya un tribunal que lo declare responsable, excepto su propia conciencia. En este sentido, la sanción que puede recibir una persona que sabe que ha actuado moralmente mal no proviene del exterior (juez, policía, etc.), sino de ella misma, en la forma de sentimientos de reprobación que llamamos remordimiento.

Así, ser moralmente responsable de una acción significa:

 Qué quien actúa lo ha hecho con libertad, es decir, que esa acción podría no haberse realizado, o haberse realizado de otra manera.

 Que quien actúa es capaz de responder por la acción realizada, aduciendo las razones o motivos que le han impulsado a actuar de esa forma concreta.

 Que quien actúa así debe asumir las consecuencias (el bien o el mal) que deriven de la acción realizada.

La responsabilidad en el mundo de hoy

A partir de la década de 1950 se fue generando en el mundo un nuevo tipo de conciencia, la conciencia planetaria, como consecuencia del progreso científico- técnico.

Este progreso nos enfrenta a problemas que requieren de la cooperación y responsabilidad de todos los países. Algunos de estos problemas son la contaminación, el agotamiento de los recursos naturales como efecto de la producción y consumo masivos, y la posibilidad real de destrucción del planeta como efecto de las nuevas armas de destrucción masiva.

El principio de responsabilidad

Esta rápida evolución ha llevado a filósofos como Apel y Jonas a denunciar la falsa idea de “progreso” sobre la que estamos construyendo nuestra civilización. La creencia general de que el progreso consiste en explotar los recursos de la Tierra para satisfacer nuestro deseo de bienestar, está llevando a la destrucción del planeta. Por eso, tenemos que cambiar nuestra idea de progreso y asumir responsablemente nuestras acciones para dejar a las generaciones futuras un mundo tan habitable como el que nosotros encontramos.

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