Grooming

La internet ha sido utilizada como un medio para pasar el comercio y o explotación sexual en este caso la pedofilia.

El Grooming comprende todas aquellas conductas ejecutadas “on line” por pedófilos (los Groomers) para ganar la confianza de menores o adolecentes mediante la utilización de una identidad usurpada, fingiendo una buena apariencia, empatía, identidad o intereses o contención emocional con la finalidad de concretar un abuso sexual.

Las nuevas tecnologías y en especial las redes sociales han revolucionado el mundo de la comunicación y, aquel que no es consciente de este cambio, está mirando el campo vecino. Mayores y menores de edad emplean nuevas relaciones sociales a través de plataformas digitales como Facebook donde hay intercambio de todo tipo (opiniones, fotos, comentarios y videos) un océano que nunca se agota, todo el mundo quiere jugar el partido “social media” el que presenta un gran peligro para los menores de edad.

Muchas veces sólo pensamos en los grandes beneficios que nos puede traer el hecho de que cada vez más personas tengan acceso a internet, que si bien es una gran fuente de información, también es un gran peligro.

La internet como todo avance tecnológico es un arma de dos filos, ya que así como puede destruir barreras para acercar a familias y amigos, también es una forma en la que los pedófilos se aprovechan de miles de niños al año, los cuales por falta de educación, recursos o simplemente por experiencia, son expuestos a sufrir abuso sexual.

Las estadísticas del crecimiento del abuso infantil son alarmantes y según datos de la ONU y el FBI cada segundo hay alrededor de 750 mil pedófilos conectados al internet y se estima que tan sólo en Filipinas decenas de miles de niños de edades que van desde los 6 años sufren de abuso tras las cámaras web. (Ramos A, 20 13)

No obstante, no hay un perfil concreto para los delincuentes sexuales, ya que se ha podido comprobar que los detenidos en esta operación son profesores, policías hasta padres de familia, no sabemos con lo que nos podemos llegar a encontrar.

Es increíble que para estos delincuentes con hacer una simple pregunta como “¿ Tienes una cámara web?”, pueden conseguirlo todo, se le debe que encontrar un fin a esto.

Pero la ausencia de contacto físico entre el depredador y la victima no reduce la severidad del trauma psicológico que el turismo sexual virtual deja en miles de niños y niñas. Las cámaras web dan a los predadores acceso directo a menores vulnerables por sumas muy bajas, lo que quiere decir que pueden abusar de niños en otros países más fácil y más frecuentemente que nunca antes. (El Tiempo, 2013)

Una organización no gubernamental holandesa llamada “Terre des Homes” creo una niña

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