Ku Klux Klan

La Reconstrucción es el período postguerra en los Estados Unidos, en el que se implantaron nuevas reformas políticas, económicas y sociales, para solucionar los problemas que afectaban al país después de la guerra.

En 1861, once estados meridionales americanos proclamaron su separación de la nación, creando su propio estado independiente, La Confederación. Las causas de esta división fueron principalmente las restricciones con respecto a la esclavitud a las que debían ajustarse desde que Abraham Lincoln llegó al poder ese año. En 1865, después de ser derrotados en la Guerra Civil, estos estados se reincorporaron a la nación, bajo nuevas leyes republicanas, a las que se enfrentó el Ku Klux Klan.

Tras el fin de la guerra, en Estados Unidos se decidió comenzar un plan de reconstrucción para reestablecer el orden político, económico y social. En 1865, el nuevo presidente Andrew Johnson, firmó una proclamación de paz, afirmando que esta reinaba en todos los estados americanos. Sin embargo, los once estados sureños que formaron La Confederación, permanecieron bajo una fuerte supervisión militar hasta 1877; debido a esto, este periodo se conoce como “Reconstrucción Radical”.

Para los blancos del sur, esta época fue de tiranía y opresión política, a la que llamaban “Guerra de agresión norteña”. Durante la reconstrucción, se construyó el nuevo imperio de Carpetbaggers y Scalawags. Los Carpetbaggers eran blancos del norte que llegaron al sur con el fin de apoderarse de las propiedades y territorios sureños; muchos de ellos se convirtieron en políticos, adquiriendo grandes riquezas. Los Scalawags eran personas del norte que se habían opuesto a la guerra y que apoyaban la reconstrucción.

“A menudo, las propiedades y casas de las viudas de soldados confederados eran incautadas, y altos impuestos eran recaudados en esta pobre economía devastada por la guerra. Impuestos excesivos también influenciaron en la redistribución de tierra” . Los sureños, que durante la guerra perdieron muchos todos sus bienes se encontraban en miserables condiciones, ya que a partir de la reconstrucción sus últimos recursos empezaron a desaparecer. Además, su moneda perdió todo su valor, y muchos blancos que antes de la guerra tenían grandes riquezas, ya no contaban con ella.

Pero lo que más afectó a los sureños, incluso desde antes de la Reconstrucción fue la emancipación de los esclavos. En 1863, el presidente Abraham Lincoln firmó un documento denominado Proclamación de Emancipación, a través de la que pretendía liberar a todos los esclavos negros . Debido a la sospechosa legitimidad de esta proclamación (contraria a una resolución del Tribunal Supremo) y a falta de potestad de Lincoln para dictarla en la Confederación, la esclavitud continuó en muchos estados.

Pero durante el período de Reconstrucción, una serie de enmiendas fueron proclamadas “La Decimotercera, de 1865, abolió la esclavitud; la Decimocuarta, de 1868, extendió la ciudadanía y todos sus derechos constitucionales a “todas las personas nacidas o naturalizadas en los Estados Unidos y sujetas a su jurisdicción”, prohibiendo a los estados que limitaran sus “privilegios e inmunidades”; y la Decimoquinta, de 1870, prohibió que se denegara a los ciudadanos el derecho al voto “en razón de su raza, color o anterior condición de servidumbre”” . Estas enmiendas hacían referencia principalmente a las personas de color, ya que hasta entonces habían sido esclavos de los blancos durante

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