LA ENFERMEDAD DEL PESO COLOMBIANO

En el presente documento se exhibirá una parte del vertiginoso, fantasmal y pernicioso efecto de la inflación en Colombia, que como cáncer de la economía damnifica la estabilidad y exige un cuidado oportuno con tal de evitar una decadente metástasis de efectos colaterales bruscos en la sociedad. Dado que la situación ampara una opinión bipartidista y desde luego opuesta, en este caso se analizará mediante cifras y ejemplos fidedignos la facción negativa de la inflación haciendo hincapié en la pérdida del valor real de la moneda (peso colombiano) a través del tiempo no sin antes ofrecer un panorama general de la inflación en Colombia.

Para comenzar, la inflación entendida como el proceso en el cual se presenta un incremento general en el nivel de precios (Baca C.G.; 2007), ha sido un factor determinante en la economía colombiana teniendo en cuenta sus periodos y niveles1 percibidos, su comportamiento relacionado con la política cambiaria-monetaria, política fiscal y política económica de cada gobierno, aunado a variables externas como los precios del petróleo, las devaluaciones de los países vecinos dada su relación comercial y política, el manejo de tasas de interés, los precios de los alimentos y las reservas internacionales por parte de las autoridades monetarias, entre otros. (Ochoa D.H., Martínez M.A.; 2005).

Si bien, actualmente el gasto público y los impuestos elevados estancan paulatinamente la economía e incrementa la sumisión a la pobreza; como lo afirma Milton Friedman2: “La inflación es un impuesto que se impone sin legislación”, tal impuesto va directamente a ejercer su furor en las clases bajas; por ejemplo, los alimentos son el componente de mayor relevancia como también son el eslabón sensible de la economía por su propensión a la variación, por ende, cuando se presenta el fenómeno inflacionario, aquellas personas no están en condiciones de aumentar sus ingresos proporcionalmente para satisfacer necesidades, suscitando con esto carencias y/o otras afecciones. Colombia se cuenta entre las economías latinoamericanas con buenas perspectivas de desarrollo, consolidando una apertura económica a lo que sigue que cifras del DANE3 revelaron disminución de la pobreza4, ¿El gobierno estará “cumpliendo”?.

En ese orden de ideas, enero de 2013 ha fomentado las estimaciones y proyecciones de acuerdo a los resultados obtenidos en el año anterior –2,44% el aumento de la canasta familiar de los colombianos –, donde el Banco de la República había definido una meta de inflación entre 2 y 4%. En lo que respecta al salario mínimo este tuvo un incremento de 4,02%, ganancia de poder adquisitivo en la última década; de manera que a pesar de la disminución porcentual de la inflación 2011-2012 en 1.29%, ¿Cuál es el impacto de la inflación en el peso colombiano?

Para profundizar en esta parte cabe resaltar con anterioridad la huella que ejerce la inflación sobre el sistema de intercambio monetario. Cuando el nivel de precios aumenta, cada unidad monetaria –peso – puede comprar menos bienes y servicios (Comunidad Forex;2013); en verbigracia, en 2011 debido al fuerte invierno la infraestructura vial colapsó, los productores aún teniendo cosecha de alimentos no podían abastecer a los consumidores (Revista Dinero; 2011), esto ocasionó un aumento de los precios de los productos como las hortalizas y la leche, lo cual fue directamente hacia la restricción de compra por parte de algunos consumidores dado que sus gastos debían ser mesurados.

Así pues, la revaluación y devaluación presentan características específicas. En cuanto a la primera, si el peso se fortifica respecto al dólar, donde

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