"LA HERRAMIENTA ADECUADA". EL TEATRO COMO PRETEXTO
Enviado por YOLIS_1242 • 4 de Febrero de 2014 • 1.046 Palabras (5 Páginas) • 889 Visitas
UNIVERSIDAD VIRTUAL DEL ESTADO DE GUANAJUATO.
LICENCIATURA EN ADMINISTRACIÓN DE CAPITAL HUMANO.
TRABAJO: “LA HERRAMIENTA ADECUADA”.
EL TEATRO COMO PRETEXTO.
MATERIA. TALLER DE LECTURA Y REDACCIÓN.
ASESORA. MARISOL GUADALUPE VERDÍN VALDÉS.
ALUMNA. JOSEFINA VILLANUEVA GARCÍA.
MATRÍCULA. 09000115.
FECHA DE ELABORACIÓN: 19 DE SEPTIEMBRE DE 2013.
Voy a tratar de realizar lo que se me pide en la tarea denominada “La Herramienta Adecuada”, y lo que elegí para desarrollarlo es el denominado “Diagrama de Doble Entrada.”
En principio trataré de hacer una pequeña rememoranza de quien fue Jorge Ibarguentoitia.
Nacido en Guanajuato el 22 de Enero de 1928, Jorge Ibargüengoitia fue un literato sin el cual la dramaturgia mexicana durante la segunda mitad del siglo XX no podría ser explicada. Ha sido un referente tanto para directores y autores, incluso para actores y maestros del arte dramático. Murió en un accidente de avión en Madrid, España, el 27 de noviembre de 1983. Se cuenta que era un hombre de un humor muy especial, que a veces rayaba en lo oscuro e incluso en lo corrosivo, criticando sobre todo las estructuras sociales que favorecían a unos y que marginaban a otros, ya fuera por su género o ideologías.
RESUMEN.
EL TEATRO COMO PRETEXTO.
México 1928, el conflicto entre el Estado y la Iglesia esta en su punto más álgido.
El presidente Plutarco Elías Calles, endurece sus políticas contra el Clero. Como respuesta los altos jerarcas de la iglesia, ordenan la suspensión de cultos.
El pueblo, que poco sabe de los acuerdos y desacuerdos entre las cúpulas del poder, le aterra la idea de no poder bautizar a sus hijos, de que hombres y mujeres tengan que vivir en pecado, ó que un moribundo no pueda confesarse y obtener la absolución. Un numeroso grupo de mexicanos, mayormente humildes, toman las armas y al grito de “Que viva Cristo Rey”, inician una guerra por la defensa de su fe, que se conocerá como La Guerra Cristera.
En medio de esta atmósfera de violencia, desconfianza y manipulación, el caudillo de la revolución, general Álvaro Obregón, es reelecto Presidente de la República.
Un joven cristero, aparentemente incitado por La Mitra, cree escuchar un llamado divino y en el restaurante La Bombilla de San Ángel, acribilla de siete balazos al presidente electo Obregón, haciéndole, sin saberlo, un gran favor al presidente Calles en su camino para convertirse en El Jefe Máximo del país.
Jorge Ibargüengoitia toma este suceso y escribe El Atentado, obra donde cualquier parecido con la realidad no es coincidencia, sino una vergüenza nacional.
En 1962, publicó la obra El atentado, con la cual ganó el Premio Casa de las Américas, y a partir de allí, paradójicamente, decidió hacerse novelista. Los relámpagos de agosto (1964) fue su primera novela y la que lo llevó a comprender que había elegido su camino. Se trata de una farsa feroz acerca de la última fase de la Revolución mexicana y de la conformación de la clase político-militar mexicana. En Los relámpagos de agosto se observa ya el Jorge Ibargüengoitia gran satírico. También
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