LA SUPERVISION BAJO EL NUEVO CONTEXTO DE LA REFORMA EDUCATIVA

LA SUPERVISION BAJO EL CONTEXTO DE LA NUEVA REFORMA EDUCATIVA

La calidad y eficiencia educativa merece de grandes personas que capacitadas y con gran conciencia de vocación desarrollen al máximo su actividad laboral para la mejora del individuo y de todo el marco académico institucional que de él depende. El supervisor como persona debe ser un individuo capaz y con gran sentido de liderazgo, que tenga una visión estratégica a las actividades educativas y a la vida misma, gran comunicador, trabajador, un excelente negociador y muchas cualidades más que no terminaríamos de describir, esto hace difícil encontrar a la persona adecuada para ocupar tal puesto.

La supervisión, entonces, representa todos los esfuerzos de los participantes escolares cuyo objetivo es favorecer la actuación de maestros, institución, alumnos y todo el ámbito educativo para su mejora; buscando soluciones a los posibles problemas y deficiencias que puedan tener las instituciones a su cargo, introduciendo cambios, transformaciones, gestionar y proponer como secuencia metodológica, será su fin, así como una permanente capacitación al desarrollo de la tecnología y ciencia para su uso.

Es así como la supervisión en el nuevo contexto de la reforma educativa intenta transformar el desarrollo de los sistemas educativos modernos utilizando la tecnología al máximo, para mejorar la calidad de los aprendizajes escolares; atendiendo a la diversidad y singularidad del personal, desarrollando en cada individuo y alumnado áreas de oportunidad en la que este se desarrolle (futbol, danza, teatro, música, lengua extranjera, computación, etc.) quitando la generalidad de las instituciones al darle prioridad a la actividad de lectoescritura y memorización. La supervisión articula funciones de control administrativo, apoyo y calidad, es así como el supervisor propone y gestiona los recursos necesarios para la institución o instituciones educativas que tienen a su cargo, optimizando así todos los materiales que tiene a su alcance. Unirse al trabajo institucional, con docentes, y todo el personal hace que identifique la problematización y carencias áulicas para su correspondiente tratamiento, pasando de eficiencia a la eficacia en los procesos. Las funciones y tareas del supervisor se centran en la planeación y organización a través de proyectos educativos, atendiendo a toda diversidad a su cargo. El apoyo y seguimiento de la reforma curricular y pedagógica será óptimo en el contexto adecuado al alumno, así como la gestión y transformación pedagógica, el trabajo colegiado mejorará las materias. Verificar el seguimiento de las leyes y normas para su control adecuado.

Lamentablemente en una primera instancia la supervisión era un trabajo individual y de control donde sólo se busca la eficiencia en el uso de los recursos, en un horizonte de escuelas homogéneas donde la burocratización del personal era el adecuado. El apoyo al puesto de niveles jerárquicos es una política institucional basada en un nivel de autoridad subjetivo dando ausencia a la profesionalización y vocación en la función del puesto.

Es por eso que la nueva supervisión debe ser capaz de observar el logro de objetivos y metas para incidir resultados de aprendizaje, administración y normalidad. Observar los programas y adecuarlo, mejorando así la currícula, aumentando o eliminando partes de ella para bajarlo al contexto áulico será labor predominante en el supervisor. Trabajar mediante la tecnología y método de proyecto, para la gestión y vinculación de todos los individuos hará sin duda una actividad organizada y planeada para la eficacia educativa.

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