La Tierra Como Espacio Simbolico
jimena2636 de Noviembre de 2013
4.151 Palabras (17 Páginas)454 Visitas
LA TIERRA COMO DIMENSIÓN SIMBÓLICA
Representaciones sociales, imaginario social, identidad, cultura, cosmovisiones, intereses, conflictos y nuestra intervención.
Introducción
Dicho ensayo tiene como soporte un trabajo de campo, realizado en la zona de alrededores o barrios periféricos a la ciudad de La Calera, como lo son Diquecito, Piedras Blancas y La Mesada.
Espacio en el cual como estudiantes de la cátedra de Trabajo Social Comunitario, de la Escuela de Trabajo Social, Universidad Nacional de Córdoba; hemos trabajado con los pobladores y distintas organizaciones como Cecopal, el Movimiento Campesino de Córdoba, Adifa, la Escuela de Piedras Blancas y le de La Mesada. Sobre un obstáculo que influye en la reproducción social de los sujetos, y que además se da en un momento de gran valor e interés por la tierra.
Las familias del lugar no poseen títulos que avalen o certifiquen la propiedad de la tierra, que habitan y utilizan en el lugar.
Desde nuestra intervención nos ha parecido importante, reflejar en el siguiente ensayo ciertos aspectos que se derivan de la tierra, no sólo en su dimensión material, sino y sobre todo desde el universo simbólico que gira en torno a ella,. compuesto por un conjunto de representaciones e imaginarios sociales, culturas, identidades, capitales, visiones, concepciones, intereses y conflictos.
Desarrollo
Contexto General
Para comenzar con el desarrollo del tema, debemos definir y conocer los diferentes significados y cosmovisiones que de la tierra se desprenden. Podemos decir entonces que “la tierra es un concepto político” , de acuerdo a la disputa de poder existente sobre ella.
Los aborígenes no se sienten dueños de la misma, argumentan que estaba antes que ellos y que por eso pertenecen a esta. Le dan uso y sentido como un medio social (posesión colectiva y no individual), no como un bien económico. La tierra (Pachamama) y ellos son un nosotros. La idea de la tierra como un medio económico, es algo que ha aparecido con la instauración de los sistemas capitalistas.
Los indígenas poseen culturas ancestrales anteriores a la aparición de este sistema y sus diferentes modelos, desde su cultura y cosmovisión no esta la idea de posesión individual sobre la tierra, es decir, no existe en ellos la concepción de la propiedad privada. Actualmente los pueblos originarios se encuentran reclamando las tierras que desde siempre les han pertenecido, y que les han expropiado otros actores.
“Para los campesinos la tierra vendría a resultar como un instrumento de trabajo y para los chacareros un patrimonio familiar” . Actualmente estos últimos se encuentran desarrollando grandes emprendimientos agrícolas. Cultivan grandes extensiones de soja, maíz, girasol o trigo; lo que significa el desmonte de bosques nativos, la degradación y pérdida de la fauna autóctona, como del suelo. Esta situación provoca sequía, debido a la gran demanda de agua que se utiliza para el riego y la desertificación o rotura del suelo por los cultivos. Además se da una disminución de espacio y de condiciones para la crianza de animales, en desmedro de los campesinos.
En cambio para el capitalista es una mercancía que se compra y se vende, se explota lo más posible, y una forma de acumulación de capital. Así podríamos continuar enumerando otros significados acerca de lo que es la misma. Concluimos con que la tierra no es para todos igual.
La Tierra como territorio o espacio geográfico da origen y enraíza distintas bases ecológicas e identidades culturales, las cuales caracterizan a los distintos sujetos que habitan dicho espacio, de manera individual y colectiva. Es el ámbito en el cual se forjan y construyen las identidades, los imaginarios y las representaciones sociales .
Es decir que la sustentabilidad y la permanencia en un espacio geográfico determinado, genera en los sujetos una construcción social de la realidad, una relación o visión del mundo atravesada y caracterizada por un sentido de pertenencia. El cual en cierto sentido determina quienes somos y de donde venimos, haciendo además de estandarte o vanguardia, que los sujetos utilizan para presentarse y diferenciarse de otros.
De acuerdo a esto estamos “viendo al territorio como un espacio poblacional, en tanto espacio de vivienda, consumo y cultura, ocupa una importante porción de la dimensión pública de la vida cotidiana” . “Es decir, no solo se valora la tierra como un bien material, sino como reproductora de redes de relaciones, vínculos, identidad, arraigo y medios económicos para la subsistencia” .
Es un espacio donde se desarrolla un conjunto de relaciones entre individuos, grupos y organizaciones que adquieren una dinámica propia, y se despliega y desempeña la reproducción cotidiana de la existencia y es donde se desarrolla la vida cotidiana.
Es la tierra quien posee y otorga un conjunto de recursos naturales y oportunidades para con el hombre, con los que se construye el desarrollo de diversas formas de vida, culturas y una economía propia, con lo que los sujetos basan su existencia. Y por ello quizás también es que se dan diferentes pujas y conflictos por la misma. Así se presentan en diferentes coyunturas diversos actores como empresarios, campesinos, aborígenes, el Estado y otros. Quienes mantienen y poseen intereses distintos, que en algunos casos son antagónicos o se contraponen.
La pérdida de la tierra, de un lugar y el traslado a otro implica una situación de desarraigo. Una pérdida o alteración de la identidad, de la reproducción de vínculos, formas de vida, la cultura y la economía. Arrojando como resultado profundas crisis en los sujetos que atraviesan dichas situaciones. Es decir, que el desarraigo genera costos muy elevados en cuanto a la integración social, la conformación nuevas redes de relaciones, vínculos e inserción en actividades económicas. Lo que esta de alguna manera potenciando a la exclusión social.
Por medio y haciendo mención a la tierra, a un lugar es que nos presentamos y proyectamos; ante y hacia el mundo.
Nuestra Intervención
Debemos destacar en un principio la importancia de podernos acercar en forma temprana a nuestro centro de práctica. Nos posibilito cumplir y atravesar un proceso de inserción acorde a los tiempos o periodos académicos. Se requirió de un continuo y perseverante trabajo. Nos referimos a que, en los primeros encuentros, percibimos cierto grado de desconfianza hacia nosotros en los miembros de la organización, que se plasmaba o reflejaba, en la resistencia a nuestra participación, o el comentario de experiencias negativas.
Desde un comienzo entonces nos sentimos un poco confundidos, en torno a como íbamos a lograr nuestra inserción, pero somos conocedores de que estos obstáculos son propios de esta etapa o proceso.
Con un trabajo de permanente presencia, compromiso, interés y conocimiento mutuo; fuimos de a poco integrándonos.
Para el logro de ellos nos basamos en los cinco técnicas que plantea Margarita Rozas Pagaza, la cual considera a la inserción “como un primer acercamiento a la trama social que los sujetos establecen en su vida cotidiana con relación a la satisfacción de sus necesidades (..) consiste en iniciar el conocimiento de dicho contexto particular a fin de establecer una ubicación profesional y una mirada estratégica de dicha ubicación” . Es decir, que nosotros para lograr una inserción nos informamos del contexto en el nos insertamos a través de observaciones y entrevistas a los miembros de la organización, para conocer como trabajan , cuales son sus códigos, sus normas y reglas internas, y tratar de a poco ganar su confianza, con el fin de comprender porque actúan de esa manera, y trabajar en forma articulada sobre la problemática. Es por eso que les planteamos a los mismos, nuestros objetivos, dejando claro cual es nuestra actividad y rol.
Conformamos un equipo de trabajo compuesto por miembros de Adifa, Cecopal (Centro de comunicación popular y asesoramiento legal), Movimiento Campesino de Córdoba y de la Comisión para una Reserva Natural de Calera. Equipo desde el que hemos venido trabajando con la gente en base a la problemática motivo de intervención. Articulándonos además con las escuelas de La Mesada y Piedras Blancas, donde se realizaron los talleres; y participando en las distintas reuniones de La Reserva, desde hemos podido interaccionar con otros actores ajenos a nuestro equipo.
Un interrogante, que se nos presento en nuestro periodo de inserción en el marco de las prácticas de Trabajo Social Comunitario, tiene que ver con:
¿Por qué gran parte de los sujetos, si bien viven en el lugar desde hace generaciones, dudan y demoran en responder cuando se les pregunta, de quién es la tierra en donde están ubicadas sus viviendas?. Generalmente hemos obtenido como respuesta, “en tal lugar, que dicen que es de...”.
Encontramos en el imaginario social un primer obstáculo para el desarrollo del proceso. Ya que muchos de los sujetos no se sienten dueños del espacio, debido a que no poseen escrituras sobre las tierras, y
...