La teoría de los derechos subjetivos

TEORÍA DE LOS DERECHOS SUBJETIVOS

A lo largo de la historia del hombre se sabe que es de su naturaleza relacionarse y convivir en sociedad. Pero para que el hombre funcione en esta sociedad, es necesario que existan unas directrices capaces de fortalecer y regular este sistema (sociedad), y para que sea posible convivir en armonía y con arreglo a las normas del sistema.

Estas normas de las que infiere la anterior premisa no son nada más que el derecho, teniendo como definición global el «conjunto de normas jurídicas que sirven para regular, mitigar y resarcir conflictos de intereses entre las personas». Por otra parte, entre las diversas acepciones de la palabra derecho suele indicarse con esta expresión «la facultad o poder moral inviolable para hacer o no hacer algo» (Larraín, 1994, p. 121).

En tanto, en términos de Larraín (1994), Para indicar que se emplea la palabra derecho bajo esta acepción, se habla de derecho subjetivo, en contraposición a los términos derecho objetivo, que indican que la palabra derecho es empleada como sinónima de conjunto de reglas o normas. Por muchos se acepta la definición de derecho subjetivo que daba el ilustre profesor alemán Von Ihering: «Derecho subjetivo es el interés jurídicamente protegido. Sólo lo constituyen aquellos intereses que pertenecen o incumben al individuo y no aquellos que incumben a la colectividad entera». En realidad, al reglamentar el derecho objetivo las relaciones jurídicas entre los hombres, lo hace con un doble objeto:

1. Proteger el desenvolvimiento de la actividad de cada individuo, en lo que sea compatible con el interés de la colectividad.
2. Asegurar la satisfacción de las necesidades de todos los miembros de la sociedad.

De acuerdo con lo anterior, con este doble objeto se determinan las facultades o derechos que corresponden a cada individuo o a cada grupo de personas que componen la sociedad, facultades o derechos que constituyen el derecho subjetivo.

El derecho subjetivo, entonces, no es otra cosa que un interés de orden material o moral, protegido por el derecho; objetivo que da a aquel que lo inviste, el poder de hacer los actos necesarios para obtener la satisfacción de ese interés. (Larraín, 1994, p. 122).

• Clasificación

Los derechos subjetivos son de cuatro clases: absolutos, relativos, políticos, de familia y civiles. Los civiles a su vez se dividen en derechos públicos, derechos patrimoniales y derechos de familia.

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Elaboración propia con base en: Larraín, 1994.

• Fuentes de los derechos subjetivos

• Hechos jurídicos: son los acontecimientos que hacen nacer los derechos; los trasmiten, los modifican o los extinguen.
• Actos jurídicos: comprenden todos aquellos hechos voluntarios, o sea, todos aquellos actos del hombre a los cuales el derecho asigna consecuencias jurídicas, en vista de ser ellas queridas por el autor del acto.

Comprenden todos los actos ejecutados por el hombre con la intención de crear, modificar, trasmitir o extinguir derechos, por ejemplo, un contrato, el testamento, la tradición. Cuando el acto es bilateral y ejecutado con la intención de crear obligaciones, generalmente recibe el nombre de convención y constituye una fuente de derechos subjetivos.

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