La voz de mis acciones

La voz de mis acciones

Juan Carlos León Garduño

3°A N.L.16

Literatura

Rebeca Morales

        Muchas veces nos preguntamos por qué las personas actúan de cierta forma. En los sentimientos, emociones y maneras para responder a las  situaciones que se nos presentan en la vida cotidiana. Muchos pensarían que obtenemos nuestra personalidad al formar nuestros valores, pensamientos o el criterio, pero lo que hay que preguntarse es ¿Cómo obtenemos nuestra propia personalidad?  Sabemos que contestar a este tipo de cuestionamiento no resulta fácil, ya que implica conocer nuestros grupos de convivencia, experiencias o anécdotas que vivimos y que nos dejan aprendizajes únicos para cada individuo, teniendo como resultados en la persona distintas maneras de actuar en las muy diversas cosas que experimentamos . En mi caso, mis grupos de convivencia son la escuela, mi grupo de clase, mi carril de natación, mi grupo de clase de robótica, mis amigos, y mis familiares. Convivo más con mi madre, y mi abuela, con el novio de mamá, y a veces con mis tíos; para mí esa es mi familia. Sé que cada quien tiene a diferentes miembros de la familia con los cuales se desenvuelve con mayor facilidad. Para mí, la familia perfecta está integrada por ellos.   En mi caso, mi persona habla continuamente de éstas personas, de mi familia. Soy paciente como mi abuelita, tolerante como mi mamá. Me gusta leer los libros de ciencia y algunas novelas igual que mi madre, e incluso tengo una forma singular de cantar muy parecido a como lo hace mi tía. Si lo analizo, me doy cuenta de lo  que uno puede comunicar sobre ellos. También cabe mencionar que no necesariamente vamos a seguir alguno o algunos de los comportamientos de nuestros  padres, aquí es donde la parte de la experiencia o anécdotas previamente vividas: Tiene que ver por ejemplo; no porque mi mamá sea doctora, yo obligadamente deba estudiar medicina. Además está la cuestión de. Yo no quiero dañar la reputación de mi madre que es una doctora, amable, respetuosa y muy ordenada, con mis propias acciones. Mi comportamiento habla mucho, y no solo de mí, sino de las personas que me enseñaron esos modos de comportarme. Si obrara mal, verían a mi mamá como una mala persona, en cambio si yo decido portarme bien, hablarán muy bien de ella.  Nuestros padres no merecen pagar por nuestros caprichos o formas de comportarnos; yo quiero que las personas vean en mí, a una persona tolerante, capaz de respetar las diferentes personalidades que cada quien tiene, una persona organizada y contenta de sí misma. No quiero que vean cosas negativas, que al final, ni siquiera son ciertas.                      A mí me encantaría que las personas también fueran respetuosas. En México y en el mundo, la realidad es distinta, cada día suceden demasiados eventos desafortunados, los cuales sencillamente podrían evitarse si las personas se tuvieran tolerancia y comprehensión, dos aspectos mutuamente ligados entre sí, en general, las personas no ven que con sólo un poco de cambio, de tolerancia, organización y respeto, podríamos vivir mejor como sociedad.      los invito a extraer lo positivo de sus familias para revertir esta situación, ya que México lo merece y a nosotros para tener una mejor vida y sentirnos bien de nuestras acciones. La corrupción y todos los eventos desafortunados, se aprenden desde pequeños en las familias; en ciertos casos se debe a que como el niño está en una fase de aprendizaje, imita los comportamientos de sus padres, para después reproducirlos y hacerlos parte de sus vidas cotidianas, ya que no solo se hereda la parte física de los padres, sino también la mental y emocional. Los invito a que también hagan valor de su criterio, por ejemplo, si no me parece alguna acción, o forma de contestación o lo que sea de algún familiar mío, nadie te obliga a seguir y preservar esas acciones, y es por eso que tomas una personalidad única, con base a tus intereses y sin que ninguna persona pueda cambiarla, aunque sea de tu familia.                        En la familia, cada uno de sus integrantes tiene un rol diferente que todos juntos funcionan, manteniendo un sistema   para llevar una mejor vida y evitar los conflictos internos                  que existan dentro de una familia. Los invito a cuestionarse y preguntar a sus amigos compañeros, y otras personas cercanas a ti que no sean de tu familia, que hablen acerca de cómo es tu personalidad, es decir cómo eres al realizar tus acciones, si eres valiente, tímido, atrevido, (estos son diferentes según la acción), y pienses de donde proviene tu valentía o timidez, y descubrirás con el tiempo que son recursos que fuiste desarrollando desde pequeño, al ver comportamientos de tus padres, abuelos, hermanos y otros miembros de tu propia y única familia. Ustedes que harían para conservar estas formas de pensar de su familia, como habría sido tu vida sin una familia, debemos continuar transmitiendo estos valores que nos fueron dados y que después servirá, para hacer nuestra propia familia, ustedes que piensan acerca de esto, yo pienso que a pesar de los momentos malos que como familia se hayan vivido, la familia merece ser recordada, sea cual sea la situación, ya que al final siempre será tu familia, y por todo lo aprendido es fundamental para contar nuestras propias historias y al entrelazarlas van formando poco a poco, la historia de nuestra sociedad, e incluso de nuestro país, ya que nuestras acciones y enseñanzas, se ven reflejadas diariamente en lo que sucede en el mundo, porque somos personas y nuestras vidas se van uniendo, y  eso es lo que forma a la sociedad y a una nación que es principalmente unida por la globalización y con ella podemos aprender de otras personas.                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                  

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