LoS 7 SABERES NECESARIoS PARA LA EDUCACIoN DEL FUTURo

La evaluación es un proceso por el cual se determina que sabe hacer el niño, como lo sabe, cuando lo aplica, porque lo aplica, gracias a que lo sabe y que es lo que no sabe por lo que la tarea de evaluar se puede considerar compleja y complicada para quienes la ejercen, ya que como maneja la lectura “la evaluación dentro del proceso enseñanza- aprendizaje” comúnmente la evaluación es confundida con la medición es decir designar un numero de acuerdo a un instrumento que comúnmente es un examen sobre que sabes y que no aunque sin percatarse que ese tipo de instrumento solo evalúa una parte de las areas del ser humano como el conocimiento, sin embargo falta, la motriz, actitudes, social, psicológica, resolución de problemas, etc. Debido a esto he descubierto que ningún instrumento por si mismo puede evaluar a una persona de forma integral es decir que es injusto que utilizando un solo instrumento se etiquete y se juzgue a una persona la capacidad de ejercer o hacer tal o cual acción,

por lo que en lo que se refiere a evaluación considero que una buena estrategia para mejorar la calidad de la educación y que los alumnos salgan competentes de nuestras aulas educativas, es la actitud, motivación y autoestima, es decir la palabra “yo soy” y “yo puedo” ya que si estas palabras se trabajan en el niño puede llegar a utilizar todas aquellas herramientas que posee para desarrollar otras herramientas y con esto alcanzar el éxito en la vida, o si lo quieren llamar con el nombre que les dan los psicólogos es el “efecto pigmaleon” que es cuando tu desarrollas o implantas por medio de estas palabras una etiqueta mental con una acción que quieres que realice el individuo.

Por ejemplo yo le digo al niño Luis que “es un niño inteligente”, “que sabe muchas letras y los números” y que “piensa tan veloz que cualquier problema matemático lo puede solucionar” “porque tu eres un niño que siempre puedes”, lo mas probable es que el niño se motive y tenga la actitud de sacar y utilizar todas las herramientas que posee para superar esa prueba o esa situación de conflicto, cuando por el contrario se acerca un alumno y nos dice “no puedo maestra” 2no me sale” y con una cara de fastidio porque es el niño que no sale del no puedo le contestamos hay Pedrito, bueno ya déjalo ahí no importa, y eso porque somos educadoras porque en casa le han de decir que no puede que no le sale bien o se lo borran y vuelve a empezar.

Entonces comparando los casos del párrafo anterior podríamos crear una hipótesis sobre cual niño tendrá mas oportunidad de salir mejor en una evaluación de cualquier tipo, por consecuente el niño luis debido a que por su alta autoestima y autoconcepto logra estar abieryo a recibir el conocimiento ya que se siente competente para tenerlo, lo contrario de pedrito que al ser etiquetado con actitudes deprimentes y conformistas no se siente ni capaz ni competente de recibir ni poner en practica ningún conocimiento, por lo que considero que para lograr una evaluación exitosa hay que desarrollar en los alumnos actitudes de éxito y con esto se nos va a ser mas fácil evaluar además que van a convertirse en personas criticas, reflexivas y prosociales con seguridad en ellos mismos dispuestos a contribuir y adaptarse con armonía a la sociedad.

Debido a esto la evaluación debe ser un formativa es decir que forme al alumno con competencias, capacidades, habilidades, destrezas y actitudes y lo que debe evaluar el docente mas que el resultado es el proceso del alumnos como llego a ese conocimiento a esa reflexión, como logro interiorizar y utilizar eso que aprendió y que conoce, además que es relevante para el docente tener evidencias de ese avance por medio de rubricas, observación directa, registro anecdótico, listas de cotejo, videos, fotos, etc. Y todas estas herramientas nos van a apoyar a hacer

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