MANIFESTACIÓN DE LAS INTERACCIONES DEL SUELO

MANIFESTACIÓN DE LAS INTERACCIONES: EL SUELO

DEFINICION DE SUELO: Desde el punto de vista de la pedológico Jaimes (1996) lo define como: «una entidad tridimensional que yace sobre el estrato rocoso, formando parte de un paisaje en medio de un clima, en la interfase litosfera-biosfera-atmósfera».

ENTIDADES BASICAS DEL SUELO: Podemos hablar básicamente de tres que a saber son:

-EL PEDÓN: Este término se ha propuesto como un nombre colectivo para las pequeñas entidades o cuerpos básicos de suelo. Dicho de otra manera son muestras tridimensionales de suelo que equivalen generalmente a la descripción de un perfil y sus propiedades específicas. El pedón puede variaren tamaño, entre 1 y 10 m2., y viene a ser, entonces el volumen más pequeño que puede llamarse suelo y es una unidad de muestreo.

-EL POLIPEDÓN. Es una unidad básica que tiene tamaño suficiente para servir como una unidad de clasificación (serie de suelos). En términos más claros, un paisaje de un área pequeña con características parecidas se puede ver como un compuesto de un grupo de pe dones estrechamente asociados y bastante similares en sus características.

-EL PÉRFIL. Es el conjunto de horizontes o capas superpuestas con características distintas desde la superficie hasta el substrato. Desde el punto de vista pedológico, sencillamente se refiere a una de las caras del pedón. En otras palabras cualquier cara vertical. Cuado se aprecia el perfil, puede definirse claramente varias diferenciaciones paralelas que se conocen con el nombre de horizontes genéticos u horizontes maestros.

HORIZONTES DIAGNÓSTICOS. Son definiciones nuevas y rigurosamente concebidas como una parte integral del sistema de taxonomía de los suelos. Los horizontes diagnósticos permiten diferenciar las clases de suelo.

HORIZORNTE DE SUELO. Es un estrato paralelo a la superficie del suelo que tiene un conjunto de propiedades que se han producido por los procesos de formación de suelo. Los diversos horizontes se designan por letras y sus correspondientes subíndices para indicar diversos niveles o unidades edafogéneticas. La denominación de los horizontes, (O, A, E, B, C y R) representan lo que el agrólogo concibe como las principales desviaciones del material padre. Se consideran dos clases principales de horizontes: orgánicos y minerales.

Los diversos horizontes pueden variar considerablemente con las características, la clase de vegetación, sistema de drenaje. Pero también los horizontes por su variedad y número determinan el grado evolutivo del suelo. Por lo que pueden presentar uno, dos o tres horizontes.

FORMACION Y DESARROLLO DEL SUELO.

El suelo es producto de la acción de cinco factores responsables por la clase, intensidad y grado de desarrollo del mismo y por sus propiedades físicas, químicas y orgánicas. Algunos de esos factores desempeñan un rol pasivo (Material parental, relieve y tiempo) y otros un papel activo (clima y organismos). Estos fueron inicialmente planteados por JENNY en 1941 en una ecuación abierta en la que todos están interrelacionados.

S = f (clima, material parental, organismos, relieve y tiempo).

Por cuanto nuestro conocimiento del suelo es incompleto; actualmente se le ha agregado a la ecuación un sexto elemento: el hombre. De allí que cuando aumente, es posible que haya que incluir otros factores más.

Esta ecuación también nos señala que cualquier propiedad del suelo es el resultado de la interacción de los factores mencionados, por lo tanto cualquier pedólogo al examinar un perfil de suelo, generalmente comenzará por considerar como están operando estos «in situ» Veamos el modo de acción de cada uno de ellos:

El material parental, así como los minerales de la superficie terrestre están sujetos a las variaciones de temperatura (meteorización térmica) que producen dilatación durante el día, contracción durante la noche, y terminan por cambiar el aspecto hasta que se reducen a fragmentos cada vez menores, puesto que sus componentes minerales tienen distintos coeficientes de dilatación, y en combinación con las lluvias son preparados para experimentar nuevos cambios. Así mismo el viento puede transportar grandes cantidades de polvo, como producto final de la meteorización y acumularlo en otros lugares del planeta.

Las precipitaciones al caer en las altas montañas producen grietas y fisuras de las rocas, se congelan aumentando un 10% de su volumen, lo que permite ejercer una presión de unos 146 Kg/cm2, y se produce lo que llaman los expertos «efecto cuña», que termina por fragmentar grandes bloques que poco a poco van separándose hasta convertirse en cascajos y fragmentos. El agua al infiltrarse en el suelo ejerce su poder de disolución (levigación) formando grandes depósitos de arcillas, compuestos minerales y orgánicos.

Las plantas con sus raíces ejercen su acción mecánica cuando penetran en las grietas y fisuras de las rocas, obran a manera de cuña y expanden las, rocas poco a poco con levantamientos de bloques de varias toneladas de peso produciendo la disgregación de las rocas, aun las más resistentes. Los animales también intervienen como agentes de la meteorización orgánica, especialmente los roedores que excavan y llevan a la superficie gran cantidad de fragmentos parcialmente descompuestos que son de nuevo sometidos a la acción química de las aguas. También las lombrices (25 - 50 toneladas al año), ácaros, arañas, hormigas, etc., se consideran contribuyen en la tarea. La materia orgánica en descomposición

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