Mercantilismo

mercantilismo deriva de la palabra mercantil. Esta a su vez, procede del latín: del participo presente mercans, mercantis del verbo mercor, mercaris, mercari, mercatus sum, mercatum cuyo significado es comerciar, comprar, adquirir. A ese participio se le une el sufijo -il (derivado, perteneciente a). Ya en español se le ha agregado el sufijo -ismo con la acepción de doctrina, sistema, y también actitud, conducta. De esta manera puede decir que el concepto de este vocablo es la doctrina referente a lo que pertenece o deriva de comerciar. Clase: Sustantivo, masculino, singular. Definición de mercantilismo La primera definición correspondiente a este término es la conducta y actitud mercantil que se aplica a todo objeto o bien que no tiene que ser comercializado. En este sentido, es una definición por oposición ya que explicita una actitud o cualidad comercial en hechos que no deben tenerlas. La segunda acepción se refiere al sistema económico que se encarga de desarrollar el comercio, fundamentalmente el ligado a la exportación y reconoce a los metales preciosos que se posea como el símbolo de riqueza. Este sistema es un conjunto de ideas económicas y políticas que tuvieron su auge durante los siglos XVI y XVII en Europa, y cuya característica principal era la intervención marcada del Estado en la economía. Para eso se tomaron medidas centradas en las relaciones entre el poder político y la actividad económica; la intervención del Estado y el control de la moneda. mercantilismo De ese modo se buscó unificar el mercado interno de cada país, se tendió a aumentar la producción, al control por parte del estado de la economía, se protegió a la industria nacional frente a la extranjera, se prohibió la exportación de metales preciosos y se controlaron los recursos naturales y mercados internos, entre otras medidas. Sinónimos de mercantilismo Tráfico, explotación, expoliación; avaricia; ambición. Antónimos de mercantilismo Generosidad, filantropía, fraternidad, solidaridad; desinterés. Ejemplos de uso y frases “Para el examen de historia, ha tenido que estudiar con suma profundidad todo el proceso del mercantilismo europeo”. Se refiere en este caso, a la historia del surgimiento y aplicación de ese sistema. “La indignación de todos ha sido mayúscula, al descubrir el mercantilismo con que la organización realiza la supuesta solidaridad”. En este ejemplo, se usa con el sentido de la aplicación del espíritu comercial en algo que no debe ser así. “Puede asegurarse que las medidas económicas que está realizando este gobierno se apoyan en un mercantilismo feroz”. Aquí, se aplica para denominar el empleo de las características económicas de esa doctrina. Características mercantilismo Esencialmente son: Una actividad económica que se concentra en adquirir monedas y metales como el oro y la plata para que el estado se enriquezca. Un estado que ejerce la organización de esta compra de monedas y metales, así como dar un impulso a las manufacturas del país. Todo esto lo realiza a través de leyes que regulan la producción y el comercio y el cuidado de todas las infraestructuras que ayudan a aquél como pueden ser los ferrocarriles, puertos, etc. Una balanza comercial que cuida que las importaciones no sean mayores que las exportaciones. Para eso se establecen tasas aduaneras altas para todos los productos que provengan del extranjero y así persuadir a los potenciales compradores de los mismos a que no lo hagan. Un comercio que se desarrolla a través de compañías que dependen del Estado. Críticas al mercantilismo Algunas de ellas fueron realizadas por Dudley North, John Locke y David Hume, mucho antes de que Adam Smith desarrollara la doctrina que pudiera sustituirlo totalmente. Estas pueden sintetizarse en: La incapacidad por parte de esta doctrina de entender la noción de ventaja competitiva y los beneficios del comercio. El descuido de la agricultura. La imposibilidad de

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