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Tarea ética


Enviado por   •  4 de Marzo de 2015  •  4.785 Palabras (20 Páginas)  •  266 Visitas

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Introducción

Cuando hablamos de ética, nos referimos a la práctica de las buenas costumbres, de los Buenos hábitos, de los valores morales, de hacer bien las cosas tomando en consideración el bien común de personas y naturaleza.

A lo largo de la historia, la ética no fue muy bien vista en aspectos económicos, dado que los negocios se hacen por dinero. Ese fue siempre el único objetivo… obtener ganancias monetarias.

Debido a lo que algunos llaman el “mundo sin fronteras” o “el fin de la geografía”, el campo de juego es más grande y abierto que nunca antes. Esto significa que tenemos que competir con las mejores empresas del mundo, independientemente de la ubicación y de donde se opere.

La globalización tiene un impacto determinante en la sociedad, en su cultura, en su modo de vida, su forma de hacer negocios, a tal grado que la misma ha tenido apoyo y rechazo de gran parte de la humanidad. Quienes la aceptan ven oportunidades de negocio, de expansión, dominio, crecimiento y riqueza. Quienes la rechazan ven pérdida de valores, de cultura, de identidad nacional, y la amenaza de competir en desventaja con las grandes potencias.

Las naciones, la sociedad, las organizaciones, y los individuos deben estar preparados para los cambios mundiales que están sucediendo; el proceso de adaptación no es fácil y menos la aceptación de una nueva cultura que en la mayoría de los casos es vista como capitalista, impuesta y que viene a sustituir los valores y cultura actuales. Durante mucho tiempo, ética y empresa han sido conceptos que se han movido en planos de la realidad distintos. La ética se ha vinculado con lo que cada uno cree que está bien o mal.

Situación Actual mundial

Hoy en día la situación mundial ha evolucionado. Congresos, conferencias o medios de comunicación se ocupan de nuevo de unir las palabras ética y empresa, en concreto al hablar de la ética empresarial.

Alrededor de los años 50 del siglo XX, debido a la aparición de los modelos teóricos que desembocaron en las primeras escuelas de dirección de empresas, se produjo el primer encuentro entre la ciencia ética y las teorías de la dirección. Es entonces cuando se comienza a concebir a la empresa como una comunidad de personas. Se desarrollan las teorías de la responsabilidad social; se introducen los criterios de justicia en el reparto del valor económico añadido.

En los años siguientes en los que la oferta de formación empresarial creció, con el influjo de los modelos anglosajones de dirección que pasaron a dominar el mundo occidental y en consecuencia, España también, pareció que la ética estaba ausente, y el positivismo y el pragmatismo dejaban poco espacio a las teorías humanistas. Se puede afirmar que hay un paréntesis en el desarrollo de la ética empresarial en España y en el mundo occidental hasta los años setenta y ochenta del siglo XX.

Es a partir de este momento cuando se comienza a experimentar un proceso profundo y acelerado de cambios, sin precedentes en la historia de la humanidad. Este cambio es voraz, complejo, turbulento e imprevisible, que llega de forma avasalladora y alcanza todos los segmentos de la sociedad. Tales mutaciones imprimen un dinamismo tecnológico y científico, y las consecuentes revisiones de valores, de forma jamás vista que alcanzan en pleno nuestra vida cotidiana y el de las organizaciones empresariales. La concepción de las empresas ha cambiado mucho en los últimos años, lo que ha llevado a considerar que tienen una seria responsabilidad moral para con la sociedad, independientemente de las responsabilidades individuales de sus miembros:

El papel de las organizaciones como núcleo básico de las sociedades pos capitalistas, que hace indispensable una ética de las organizaciones para devolver la moral de la sociedad.

La toma de conciencia de que la ética constituye una exigencia impuesta por la propia viabilidad del sistema económico en su conjunto. Si el comportamiento inmoral se convierte en norma acaba con la confianza y la lealtad, provocando importantes disfunciones en el mercado. La existencia de una conciencia de la solidaridad (el mal que se hace siempre perjudica a alguien) y una conciencia de la alteridad, que no lleva a no hacer a los demás lo que no deseamos para nosotros. El miedo a la mala imagen y a las sanciones legales, que pueden derivar para la organización el descubrimiento de su falta de ética, etc. No puede por tanto concebirse la actividad de las organizaciones al margen de la ética o regida por unas reglas del juego diferentes que justifican actuaciones inaceptables desde la perspectiva de la moral individual.

Una reflexión ética que intenta escapar a tales objeciones se cerciora primero de su postura práctica: ¿desde la perspectiva de qué afectados se consideran los procesos y estructuras de la globalización? Luego se esfuerza por conseguir una coherencia entre análisis científico – social y reflexión ético – social: ¿qué paradigmas científico – sociales resultan convincentes desde el punto de vista de los agentes afectados? En lo sucesivo, la globalización ha de ser considerada como arreglo a un concepto así: a la retirada del aspecto público del debate sobre la globalización le sigue una mayor precisión de ésta, por cuanto que los mercados financieros internacionales se independizan y las asimetrías del poder económico se agudizan. Los márgenes políticos de maniobras ya existentes se pueden aprovechar y ampliar para constituir un contrapeso.

¿Dónde podemos encontrar las fuentes de la ética global?

Las Religiones o "tradiciones de sabiduría de la humanidad" son una de las principales fuentes de la ética global. Tal vez muchas personas, sobre todo aquí en Occidente, prefieran hablar de "tradiciones de sabiduría" en lugar de las Religiones. El gran historiador británico Arnold Toynbee dijo:

"¿Quiénes son los más grandes benefactores de la humanidad de nuestra generación? Debo decir que son Confucio y Lao Tse, Buda, los profetas de Israel y Judá, Zoroastro, Jesús, Mahoma y Sócrates."

En lugar de buscar diferencias (Concepto de Negociación Intercultural), vamos a buscar puntos de convergencia que nos ayudará a facilitar:

• El diálogo,

• La diplomacia cultural,

• Las relaciones internacionales y

• Los negocios internacionales

La ética generada por las religiones

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