Un Alto A La Siempre Tibia Sociedad Mexicana

UN ALTO A LA SIEMPRE TIBIA SOCIEDAD MEXICANA

“Los hombres no vivirían mucho tiempo en sociedad si no se engañaran unos a otros.” Rochefoucauld. Por ello la realidad de lo que vivimos, es acaso, ¿una confirmación de la predicación de los políticos y la ficción un invento de los estudiosos, de los poetas, de los humanistas? Es hora de darnos cuenta

El libro “La ciudad de las palabras”, de Alberto Manguel, muestra claramente las analogías del pasado a partir de historias y cuentos clásicos, para comprender mediante la literatura, el mundo que vivimos. Más allá de esto, este libro permite realizar una comparación sumamente interesante del capítulo “La voz de Casandra” con la sociedad actual mexicana, la relación de su política, sociedad a partir del factor de gran importancia los “hacedores” como Manguel los llama, esos que no son sólo escritores, sino pensadores y seres que se atreven a cuestionar y tratar de hacer pensar a la sociedad mexicana. Una sociedad que tras años ha vivido pasiva, haciendo oídos sordos a la realidad, refugiándose en una ignorancia que acepta, que se ha visto desprovista de la capacidad de cuestionamiento de la situación que vive y ha vivido durante varios años, abordando el valor de la ficción como forma de entender o escapar de los problemas sociales.

Es necesario enfocar la atención, a sí esta ficción que inventa la mente, o nuestra sociedad, puede ser capaz de proporcionarnos una identidad, ya sea verdadera o falsa, pero necesaria, para que cambien al individuo o incluso sea capaz de cambiar a la sociedad en la que vivimos. Descubrirlo y entenderlo es el objetivo de este ensayo.

“Las palabras no sólo otorgan realidad; también pueden defenderla” (Manguel, 2010)

Es necesario encontrar las variantes, del contexto social en México y sus problemas, la política, los mexicanos y el sentido de los” hacedores.” Por un lado existe una política, que se reduce desgraciadamente, en la mayoría de las situaciones, a una justificación del poder y su autonomía de ejercerlo frente al individuo en la adopción de decisiones, esto gracias, a que los políticos son los encargados de la formación de las identidades sociales y políticas, lo que deja a unos mexicanos, sin poder de pensamiento propio.

Dentro de este contexto no encontramos un elemento de gran valor, en el ejercicio de poder así como en su justificación, el elemento discursivo, dándose un universo dividido, entre el discurso dominante y el dominado, por lo que las estrategias discursivas resultan de gran transcendencia para la manipulación de su entorno social e intentar imponer su propia voluntad e intereses. (Norzagaray, 2010)

Ésta es una realidad de nuestra política mexicana, ya que hay que tener en cuenta la situación de corrupción, pero sobre todo una política marcada por intereses manipuladores, y monopolios de poder que con el paso del tiempo han sobre pasado los intereses sociales, pero ¿con qué consecuencia?

Roger Bartra en su libro “La Jaula de la Melancolía” expresa una opinión más ligada hacia la política, expresamente hacia los dirigentes políticos de la nación que desde principios de siglo crearon a un nuevo mexicano, basado en personas dóciles y pasivas para poder mitigar cualquier intento de sublevación.

En la cultura mexicana podremos encontrar diversos motivos que originan dichos comportamientos, pero también tenemos que puntualizar el hecho de que este país es una nación llena de desigualdades y las diferencias económicas son abismales entre la clase baja y la clase alta, es entendible, como dice Samuel Ramos “los hombres se moldean de acuerdo a las

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