Venezuela, ¿Al borde de un colapso?

País en crisis                                                               Venezuela, ¿Al borde de un colapso?

[pic 1]Guillermo Parra | C.I 26.314.146

Desde tiempos remotos la situación política venezolana se ha venido tornando cada vez más intrincada. La falta de seriedad, compromiso e hidalguía de quienes tienen y han tenido el poder, han llevado al país a un panorama desolador, donde lo básico se hace extraordinario, donde las aspiraciones se van al traste por la realidad que vivimos, donde los profesionales se marchan de nuestras tierras en busca de mejores oportunidades, y lo más triste de todo, se van a “hacer país” en otras tierras que los acogen con los brazos abiertos, puesto que según estudios, el inmigrante venezolano es uno de los mejores preparados del planeta. Tristemente, por décadas de malas políticas, Venezuela podría encontrarse al filo de un abismo.

Es importante siempre tener presente en la memoria aquella época de oro en la que nuestra moneda tenía un mayor valor frente a las extranjeras, como el dólar americano, por ejemplo. A mediados del siglo pasado, la producción Venezolana y PIB per cápita se elevó 60% más que el de Estados Unidos y Gran Bretaña, hasta el año 1957, según el Anuario Estadístico de la ONU del año 1964. Para 1956 el Bolívar superó al Dólar siendo la única vez en la historia en que una moneda latinoamericana pudo lograr tal hazaña. Esto se debió a una extraordinaria política económica que generó una bonanza de libertades económicas nunca vistas en la historia, al punto que los consulados venezolanos en Europa y Estados Unidos tenían largas filas diarias de personas queriendo venir a vivir y trabajar en Venezuela, transformando el famoso nombre del “Sueño Americano” a “Sueño Venezolano”. Todos estos acontecimientos que venían dándose desde 1950, hicieron que la revista norteamericana TIME de febrero de 1955 nombrara como “Hombre del Año” al entonces presidente Marcos Pérez Jiménez, siendo su rostro la portada de la revista de ese mes “El Hombre TIME”.

Cabría preguntarse si la llamada época democrática fue lo mejor que nos pudo suceder, ya que el status que tuvo Venezuela jamás pudo ser igualado o superado luego de la salida del dictador Pérez Jiménez, aunque bien es sabido que todo no era color de rosa; Los derechos humanos no eran respetados y precisamente ese es uno de los puntos prioritarios para cualquier nación desarrollada, uno  que siempre debe estar por encima de todo. El respeto a las minorías, la inclusión de pensamientos de todos los sectores o que el discernir no sea satanizado, sin embargo, ¿esto no lo vivimos hoy también? ¿Qué se puede decir de un lugar donde no se garantiza el derecho a la vida, la alimentación, la educación, o de un país donde sus ciudadanos deben emigrar en busca de mejores oportunidades? ¿Existe realmente la democracia en Venezuela? ¿Basta solo con poder ejercer el derecho al voto? Preguntas que quedan para la reflexión, pero Venezuela atraviesa una de las peores etapas en la historia republicana.

Venezuela no es un país en guerra, pero los índices de emigración son muy altos. Las causas de esta son conocidas por cualquier venezolano: inseguridad personal, miedo a morir en cualquier atraco o secuestro exprés, temor a no encontrar medicinas, hospitales públicos en pésimo estado, emergencias de clínicas cerradas por falta de insumos. Escasez de alimentos, medicinas y repuestos de automóviles. Seguros de salud sin credibilidad, expropiación de empresas privadas. Negación al ascenso social a través del mérito y los estudios, privilegio de la pobreza como virtud enaltecida. Desplome de los precios del petróleo, escasez de dólares, invasión permitida de otros países y muchas cosas más que ya ni se pueden nombrar. Pero por encima de todo, una visión disociada y psicótica de la realidad en el colectivo venezolano: para quienes viven de las mieles del poder todo está bien. Pero para el ciudadano de a pie que tiene que sortear toda la serie de inconvenientes y tragedias, la cosa es diametralmente distinta.

Las reacciones a la asfixia de no encontrar una salida creíble y confiable para la vida, el sentirse atrapado, la idea paranoica pero real sobre la seguridad, el pensamiento anticipatorio de no encontrar medicamentos para la salud o los implementos básicos para el cuido personal, son las preocupaciones más frecuentes del venezolano.

Ahora bien, Es casi un rumor a voces que el venezolano está enfermo, y que una de las características de las enfermedades crónicas que aparecen en la población es la agresividad de su comportamiento. Tristemente en nuestro día a día sufrimos los embates de esta grave crisis, el venezolano esta desilusionado, frustrado, entre otras cosas. Pero, ¿cuál es el camino a seguir para salir de este atolladero? En el año 2015 el país vivió las elecciones legislativas en las que salió triunfante la alianza opositora de partidos (Mesa de la unidad Democrática) sin embargo, y a pesar de las múltiples promesas, no se ha evidenciado mejoría de la situación, al contrario, Venezuela ha acrecentado su crisis.

Dentro de este orden de ideas, se puede decir que esas elecciones y la posterior instalación de la asamblea nacional significaron un antes y después en el destino político del país, el entonces presidente de la AN Henry Ramos Allup, con su discurso incendiario y la promesa de que en 6 meses Nicolás Maduro saldría de Miraflores hizo que el escenario político nacional se tornara un poco más turbio de lo acostumbrado, la MUD no hizo honor a su nombre y las distintas opiniones ideológicas que ahí convergen no se pusieron de acuerdo, demostrando cierta desunión.

...