Venezuela Colonial

Este planteamiento coincide con Ruiz (1993) , quien refiere que además delas funciones gerenciales de planificación , organización, dirección y control, están las referidas a “motivación, comunicación , conflicto, toma de decisiones, retroalimentación, cambio, innovación y liderazgo” (p.2), funciones estas que las ubican dentro de la dimensión gerencial y que el director no puede pasar por alto , ya que le permiten desempeñar con éxito su rol como gerente de la Institución preescolar.

No obstante, los aspectos teóricos expuestos y el hecho de que el director debe desempeñarse como gerente de la Institución , no implica que la función le estén realizando en su justa dimensión , y así lo demuestran algunos estudios referenciales como el de Durán ( 1995), quien encontró que la educación venezolana carece de personal con formación óptima en el área gerencial, lo cual involucra al director de preescolar, quien no está capacitado por gerenciar la institución y, por lo tanto, tiene grandes dificultades para canalizar las actividades del personal docente y más aún , para ejercer un efectivo liderazgo, ser un verdadero agente motivador, que satisfaga tanto las aspiraciones individuales como las de organización , lo cual afecta significativamente la educación que se imparte al niño y la niña en este nivel.

Estos resultados guardan correspondencia con la situación que se evidencia en la institución “ Preescolar Nacional Bolivariano Rio Blanco I “, de Maracay Estado Aragua, por cuanto, a través de la observación se pudo detectar que los directivos no cumple a cabalidad con la función gerencial que les fue asignada, notándose un marcado ausentismo laboral que les impide abordar en el momento oportuno y en forma eficiente lo de orden gerencial, tales como dirigir, coordinar, supervisar, planificar o controlar, los cuales son fundamentales para el exitoso funcionamiento escolar.

Igualmente se pudo evidenciar que en dicha institución prevalece un clima organizacional cerrado caracterizado por un liderazgo autocrático , donde no se motiva al personal a la expresión plena de sus habilidades y capacidades, ni se les brinda la oportunidad de participar con sus ideas o sugerencias en la solución de los problemas, ya que las decisiones las asume el personal directivo con la plena conviccion que serán aceptadas y ejecutadas por los docentes sin ninguna objeción .

Asimismo, se pudo constatar que el proceso de retroalimentación no se efectúa en la forma debida, ya que según los docentes, se utiliza sólo para evaluar, presionar y controlar y no como herramienta que los incentive a mejorar, lo que los lleva a adoptar una actividad de indiferencia, mantener poca disposición y colaboración y falla de identificación con la institución y con sus objetivos.

Lo expuesto pareciera surgir como consecuencia de un desconocimiento sobre las funciones administrativas

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